STUDIA CROATICA
Año XXXVIII, Buenos Aires,
julio de 1997, número 134
SEPTIMO ANIVERSARIO DE LA REPUBLICA DE CROACIA
TRES CUENTOS DE GUERRA DE IVO KLARIC
¿EL MEMORICIDIO ES UN CRIMEN CONTRA LA HUMANIDAD IGUAL
QUE EL GENOCIDIO?
LOS EMBAJADORES ANTE LA SANTA SEDE HAN VISITADO A CROACIA
Y BOSNIA HERCEGOVINA
CELEBRACION DEL 10 DE ABRIL DE 1941
VISAJES PRECOLOMBINOS EN EL ARTE CONTEMPORANEO
ANTUN SOLJAN, UNA VIDA DEDICADA A LAS LETRAS
EL PERSONAJE RELIGIOSO DEL AÑO
LOS ESLAVOS EN EL MUNDO DE LA FILOSOFIA
RELACIONES ENTRE LOS TERRITORIOS CROATAS Y LA MONARQUIA
ESPAÑOLA DE LOS AUSTRIAS EN EL SIGLO XVI
ALGO MAS SOBRE LOS MASONES EN CHILE
MARKO MARULIC:
VITA DIVI HIERONYMI (BRITISH LIBRARY MS.ADD. 18 .029)
MASACRE DE BLEIBURG - DIALOGO CON NICOLAS TOLSTOI
Radovan Latkovic
Conferencia pronunciada en ocasión de la Fiesta
Nacional Croata en el Club Cultural Croata-Argentino, Buenos Aires 31 de mayo
de 1997.
Han pasado siete años desde aquel histórico 30 de
mayo de 1990 cuando en la capital de Croacia se constituyó el Sabor croata y el
legítimo gobierno de la República.
Aún cuando en ese día no se proclamó formalmente la
República de Croacia independiente y soberana -y eso ni siquiera era posible
antes de resolverse las cuestiones sobre la reestructuración de la República
Federativa Socialista de Yugoslavia- no hay duda de que en ese día, según la
voluntad expresada a través de tantos siglos y en particular mediante las
elecciones del abril precedente, el Sabor croata estableció los fundamentos del
actual Estado.
La presidencia del partido Unión Democrática Croata
(HDZ), lo llamó "Día de la soberanía croata".
Para evaluar correctamente la importancia de ese
acontecimiento histórico es necesario recordar todo aquello que lo precedió, el
largo y espinoso camino de la nación desde el momento de la muerte del último
vástago de la gloriosa Dinastía de reyes de sangre croata, y en particular del
período que va desde poco antes del 30 de mayo de 1990 hasta después de esa
fecha.
Porque la grandeza del actual Estado croata no está
solamente en el hecho de su proclamación, en su existencia objetiva, sino
especialmente en el empinado y muy dificultoso camino, lleno de peligrosas
trampas que hubo que recorrer.
El camino que nos llena de un justificado orgullo
nacional, así como de responsabilidad hacia esa lucha gigante por existir o
desaparecer.
El gobierno de la República de Croacia hizo todo lo
posible para que la separación de la RFS de Yugoslavia se llevara a cabo
mediante un camino político, basado en la aceptación del derecho a la
autodeterminación. Pero el establecimiento de un Estado croata independiente y
soberano era totalmente inaceptable para el hegemonismo gran serbio, que estaba
apoyado también por la comunidad internacional.
En la reunión que tuvo lugar en Luxemburgo el 7 de
abril de 1991 se aprobó la siguiente toma de posición respecto de la crisis de
Yugoslavia:
a) La Comunidad Europea tiene la obligación de cuidar
la unión y la integridad territorial de Yugoslavia;
b) Eslovenia y Croacia, que son partes integrantes de
Yugoslavia, no tienen que hacerse ninguna ilusión respecto de sus perspectivas
de ingresar a Europa. Esa chance en el futuro sólo existe para Yugoslavia;
c) La Comunidad Europea no ve ninguna razón por la
que debería inmiscuirse en las sensibles cuestiones internas de la RFS de
Yugoslavia (Vjesnik 14/12/1993).
En ese entorno nada amistoso y en un aislamiento
total, la conducción política croata no sucumbió ante la tentación del
tradicional "arreglo croata".
Se llevó a cabo un referendum y basados en la
voluntad expresa del 94,3% de los votantes en favor de la autodeterminación, el
Sabor aprobó el 25 de junio de 1991 una Resolución Constitucional por la que se
proclamaba a la República de Croacia como un Estado Soberano e Independiente.
Sabemos que ese acontecimiento marcó la luz verde de
la comunidad internacional para la agresión serbia contra Croacia (precedido
por un ataque de prueba contra Eslovenia) y luego contra Bosnia y Hercegovina.
La destrucción y los actos criminales realizados por el agresor serbio son
demasiado conocidos para que sea necesario repetirlos.
Pero lo importante es proclamar el valor que dejó al
descubierto el drama de esta guerra defensiva: la unidad nacional y el heroismo
nunca visto de los luchadores croatas quienes, totalmente desarmados,
defendieron la patria amenazada por un enemigo mucho más poderoso.
Al mismo tiempo, esta guerra patriótica representa un
nuevo escenario en la historia croata del último siglo: en esta guerra los
croatas pelearon y perecieron en pos de la libertad y del bienestar de su
propia nación, para lograr su propio Estado.
Se estableció en ese momento la necesaria unidad
entre el pueblo y su liderazgo político y militar, el que interpretó
correctamente su voluntad y lo guió para lograr sus objetivos a pesar de todos
los obstáculos existentes. Esta relación no existió en muchas períodos de la
historia croata, en particular en este siglo, cuando la conducción política
croata no representaba las aspiraciones legítimas de la nación. Esta separación
también se hubiese podido dar en el último período crucial, signado por la
caída del muro de Berlín, que estableció la posibilidad del establecimiento del
Estado croata, pero también podría haber ocurrido otro desacierto. Y hubiera
sido el que la "razón" de los políticos venciera otra vez al
"corazón de los héroes".
El hecho de haber sido rechazado un nuevo 1918 o 1945
es mérito de la determinación de liderazgo político, que se apoyó en la fuerza
de la mayoría, bajo la conducción del Dr. Franjo Tudjman, figura dominante en
el proceso del establecimiento y defensa de la República de Croacia.
Como sabemos, en el tercer año de su independencia
nacional, Croacia estaba reducida a dos tercios de su territorio, dividida en
dos partes desconectadas entre sí, con ciudades, poblados, iglesias y
monumentos históricos destruidos. Con numerosas víctimas de guerra, una
economía paralizada y teniendo numerosos refugiados y exilados, no sólo de
Croacia sino también de Bosnia y Hercegovina. Y su ejército recién estaba en
proceso de organización y contaba con insuficiente armamento.
En estas circunstancias, los invasores y sus amigos
ya veían a Croacia derrotada. Pero ocurrió el milagro: Croacia no fue
derrotada.
¿Cuáles fueron los factores decisivos para el éxito
de la defensa croata? -habría que estudiarlos.
En este repaso sumario de los acontecimientos,
podemos observar la existencia de algunas fuerzas que se intercambiaban en una
partida político-militar y diplomática bien sincronizada. Pero la fuerza
fundamental de la defensa contra el agresor fue la entrega total de todos los
sectores de la población a la causa croata, especialmente de la juventud.
Durante esa defensa, que fue cada vez más efectiva y
evitó un avance mayor del enemigo, el Gobierno aprovechó el tiempo para organizar
y armar unidades militares profesionales y para establecer una diplomacia
eficaz, que pudo paralizar el accionar de los países occidentales que se
oponían.
En un tiempo relativamente breve, los éxitos no
dejaron de producirse. Ya en la primera fase de la guerra la diplomacia logró
el 19 de diciembre de 1991, el reconocimiento internacional de los gobiernos de
Alemania, Italia, Suecia, Islandia y Malta (al día siguiente).
Para ese reconocimiento tuvieron un rol importante el
Secretariado de Estado de la Santa Sede y el Santo Padre Juan Pablo II, lo que
fue de particular significación por su influencia en la opinión pública mundial
y en los medios oficiales.
Menos de un mes después, el 15 de enero de 1992,
reconoció a Croacia el resto de los miembros de la Comunidad Europea. Siguieron
los reconocimientos de los princiales países del mundo, y en mayo de ese año de
1992 la República de Croacia fue recibida como miembro pleno de la Organización
de las Naciones Unidas.
A pesar del reconocimiento internacional de Croacia,
la guerra de conquista de Serbia continuaba, así como los preparativos croatas
para la batalla final.
La diplomacia acompañó este camino a través de
compromisos necesarios, como por ejemplo el Plan Vance, que permitió un respiro
y la preparación para nuevas acciones.
En el lapso de los tres años siguientes -desde abril
de 1992 hasta agosto de 1995- las Fuerzas Armadas croatas encararon cuatro
grandes operativos militares de carácter ofensivo: La operación Dubrovnik,
desde abril hasta octubre de 1992, la operación Maslenica, en enero de 1993, la
operación Relámpago entre el 1 y el 3 de mayo de 1995 y la operación Tormenta
entre el 4 y el 7 de agosto del mismo año.
Por medio de estas operaciones las Fuerzas Armadas
liberaron casi la totalidad del territorio de la República de Croacia y lo
integraron dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas.
La concepción y el rápido éxito de estas dos últimas
operaciones y en particular la Tormenta, dejaron sorprendidos no sólo al
enemigo sino también a los observadores especialistas militares de la NATO. Y
lo que es aún más importante, Croacia demostró en particular su valor como
Estado organizado y el valor de sus Fuerzas Armadas. Esto tendrá que ser tomado
en cuenta como un factor importante en las demarcaciones entre los Balcanes, el
Mediterráneo y Europa Central.
Podemos, pienso, afirmar que Tormenta representa no
sólo la liberación del territorio de la llamada Krajina serbia, sino la
integración potencial de la totalidad del territorio estatal croata dentro de
las fronteras reconocidas por las Naciones Unidas. Porque el acuerdo sobre la
integración pacífica de la zona danubiana no hubiera ocurrido tan rápidamente
sin la manifestacion del poderío militar croata, demostrado particularmente en
las operaciones Relámpago y en Tormenta.
Surgió claro que las Fuerzas Armadas de Croacia
pueden integrar a la zona danubiana croata por medio de una nueva Tormenta si
se vieran forzadas a ello. Por eso fue posible llegar al acuerdo sobre la
reintegración pacífica, con la cual estuvo de acuerdo el liderazgo croata para
evitar las pérdidas humanas y materiales de una nueva guerra. Los ocupantes
serbios aceptaron ese acuerdo con la esperanza de hacer trampa, según su
costumbre con respecto a los acuerdos establecidos. Esto lo confirma el actuar
del liderazgo serbio y las provocaciones de los chetniks locales a lo largo de
dos años posteriores a la Tormenta.
Pero la existencia de la fuerza armada croata
convenció a la administración provisoria de las Naciones Unidas para la Región
danubiana (Podunavlje) y a los representantes serbios sobre la inevitabilidad
de celebrar de elecciones.
Las elecciones del 13 de abril de 1997 y el aceptar
la documentación croata por la población serbia como condición para votar
representan la integración de iure del Podunavlje croata dentro de la República
de Croacia. La consumación de ese hecho, la aceptación de la administración de
los representantes del Ministerio del Interior croata, que ya se encuentra
allí, no puede ya ser esquivada porque la administración croata está apoyada
por las Fuerzas Armadas de Croacia, como garantía de la integridad estatal de
Croacia.
La operación Tormenta inaugura la época de la Paz
Croata, la que, creemos, paulatinamente se refleja también en la vecina Bosnia
y Hercegovina. En la República de Croacia esa paz fue una realidad desde el
momento en el que el presidente de la República inauguró el Tren de la
Libertad, acompañado por los más altos funcionarios estatales, diplomáticos y
periodistas, desde Zagreb hasta Split pasando por la liberada Knin; allí empezó
la era "post Tormenta".
La diplomacia croata, a pesar de las tradicionales y
aún existentes fuerzas internacionales opuestas, exhibe un actuar vivo y logra
la comprensión de los EE.UU., mientras fortalece nuestras relaciones de amistad
en Europa y se proyecta hacia el Oriente Cercano y Lejano.
Sagaz y decididamente giró contra aquellos que, como
dicen, tuvieron que "reconocer tempranamente a Croacia" y ahora
tratan de limitar y controlar su desarrollo para llevar a Croacia dentro de un
ente balcánico.
Empero Croacia dispone ya de suficiente fuerza, y lo
que es importante, la decisión de su presidente, de expresar con firmeza un
'no' a esos intentos. Así por ejemplo, en ocasión de la visita oficial del
presidente de Croacia a Hungría, en abril de este año, se expresó la posición
común de no permitir que por medio de una cierta integración económica se lleve
a la República de Croacia a los Balcanes.
Se llegó también al pleno acuerdo de que ambos países
entren en la Unión Europea y otros organismos de integración euroatlántica.
Entre los pasos diplomáticos después de la operación
Tormenta debemos mencionar el acuerdo entre la República Federal de Yugoslavia
y la República de Croacia sobre la normalización de relaciones firmado el 23 de
agosto de 1996, por medio del cual la República Federal de Yugoslavia reconoce
"la existencia de la continuidad del Estado croata" y las fronteras
internacionalmente reconocidas de la República de Croacia. Este acuerdo, a
pesar de los juicios emotivos de valoración negativa de algunos políticos
croatas, es el resultado de una fría evaluación de las dos partes del acuerdo.
Este acuerdo ha sido señalado como muy positivo por la comunidad internacional.
La Unión Europea lo considera un "aporte constructivo para la paz y la
estabilidad en la región".
El reconocimiento serbio a la República de Croacia en
sus fronteras reconocidas internacionalmente es un reconocimiento tácito de su
propia derrota, la derrota de la idea granserbia por la que hicieron la guerra
durante cinco años, guerra de la que terminaron vencidos, desacreditados y en
el borde del colapso económico.
Los comentarios de la prensa extranjera establecen la
significativa derrota de Serbia, pero demuestran también desconocimiento de la
realidad histórica de las relaciones croato-serbias. El diario francés "Le
Monde" en su editorial afirma: "Fue esa una guerra sin sentido, y
Slobodan Milosevic simplemente la perdió".
No comprende el editorialista que esa no fue la
guerra del Milosevic sino la guerra de Serbia contra Croacia, una guerra que
inspiraron los hegemonistas serbios hace ya un siglo. Una guerra que fue
inspirada por toda la elite intelectual serbia a través del conocido
Memorandum. Una guerra que recibió el apoyo y el aplauso de todos los
representantes de la actual "oposición democrática" serbia: Vuk
Draskovic, Seselj y los demás.
Una guerra que fue incentivada y bendecida por la
iglesia ortodoxa serbia con el patriarca Pavle a la cabeza.
¿Podremos tener la esperanza de que el Occidente
culto comprenda que esa no fue la guerra de Slobodan Milosevic sino de todo lo
serbio, y finalmente darse cuenta del irracional hegemonismo granserbio?
Croacia venció por la superioridad de su herencia histórica en defensa de su
ser nacional, amenazado por el imperialismo granserbio.
En el mismo año de la operación Tormenta -1995-
Croacia firmó el acuerdo de paz de Paris el 14 de diciembre, según lo que se
logró en Dayton, como culminación del acuerdo de Washington de 1994, que
establece la Federación de musulmanes y croatas en Bosnia-Hercegovina y prevé
la futura confederación entre la Federación y la República de Croacia.
La contribución de Croacia para vencer los obstáculos
que impedían el acuerdo fueron señalados por el presidente Clinton en una
significativa carta que le enviara recientemente al presidente Tudjman:
"Vuestra conducción fue de importancia fundamental para el éxito de las
conversaciones de Dayton y para los adelantos que hemos logrado hasta ahora
mediante el ejemplo del acuerdo de Dayton, tanto en Bosnia-Hercegovina como en
Eslavonia oriental (...) El éxito de nuestros esfuerzos conjuntos para
construir una paz justa y duradera abrirá el camino para la plena integración de
Croacia en la comunidad transatlántica (...) los Estados Unidos de Norteamérica
están totalmente dispuestos a apoyar a Croacia para que sea miembro del
Programa Socios para la Paz y la membresía plena en la comunidad de países
occidentales".
Habría que hacer también un repaso de todo aquello
que se hace hoy en Croacia aunque esto es imposible en una corta exposición.
Me limitaré por eso sólo a un ejemplo de ese
crecimiento general. Hablaré del puente Maslenica que, junto con otros
numerosos ejemplos confirma cómo la nación puede desarrollar sus creativas
fuerzas.
En el lugar en el que Croacia se encontraba cortada
mortalmente y en el que se pensaba que iba a ser finalmente vencida, se levanta
hoy un monumental Puente Maslenica como símbolo de la victoria.
Es importante exponer las circunstancias bajo las
cuales se construyó ese puente y la contribución patriótica de sus
constructores, ya que esto explica su significación especial.
La construcción empezó en 1993, luego de que los
invasores serbios destruyeron el puente antiguo.
Los constructores se encontraban expuestos a las
granadas serbias, así que la mayor parte del trabajo se realizó de noche y
frecuentemente con condiciones meteorológicas muy difíciles, con frecuentes
vientos huracanados y tormentas.
Es prueba de devoción y fe también la capilla de San
Antonio, a una veintena de metros del puente, que los obreros construyeron por
propia iniciativa, en los momentos en los que debido a los ataques enemigos no
era posible estar en el puente.
El nuevo puente representa una obra maestra de la
tecnología contemporánea, diseñado por ingenieros de la Facultad de Ingeniería
de Zagreb, y fue construido por la firma "Konstruktor" de Split.
Tiene 377,6 metros de largo, 21,4 metros de ancho y
80 metros de altura, con una longitud de arco de 200 metros. Se encuentra entre
los 15 puentes más grandes del mundo y es el único en el mundo que tiene cuatro
carriles hechos de una única pieza de hormigón armado. Se prevé su conexión con
la futura autopista que vinculará el interior con la costa adriática.
En abril el presidente de la República de Croacia
abrió el puente al tráfico. En esa ocasión el presidente afirmó: "A pesar
de las circunstancias bélicas, y el que teníamos 600.000 refugiados y
desplazados de nuestros territorios ocupados y 200.000 refugiados croatas de
Bosnia-Hercegovina, hemos construido y convertimos a Croacia aún durante la
guerra en un gran lugar de construcción".
"Vencimos tanto al enemigo como a todos los que
estaban en contra de que estableciéramos nuestro propio Estado independiente,
soberano y democrático. Nosostros hoy no sólo que renovamos lo destruido, sino
que levantamos también nuevas construcciones. Croacia invirtió cerca de cinco
mil millones de kunas en la reconstrucicón de lo destruido y en nuevas
construcciones y para las víctimas de la guerra patriótica se aseguraron 2200
millones de kunas".
"En las inmediatas operaciones bélicas
participaron cerca de 210.000 soldados, y nuestras pérdidas en esa guerra
ascienden (muertos y desaparecidos) a 57.829, junto con las pérdidas en la
vecina Herceg-Bosnia con quienes teníamos acuerdos de accionar conjunto, para
defender el suelo croata".
"La nación croata tiene que saber que la única
fuerza que creamos, la fuerza armada, fue la garantía para la liberación de la
tierra, por eso hoy podemos pasar a construir la patria, podemos desarrollarla,
pero esa fuerza armada es la garantía de que nunca nadie nos va a llevar a un
entorno balcánico del que salimos a costa de tantos sacrificios".
"Ese ejército colabora ya hoy en día, confirmó
el presidente, en la construcción de caminos desde Medjumurje hasta Konavle y
acá cerca en la construcción de la autopista a Zadar. Ese ejército es también
una fuerza moral que colabora en el renacimiento espiritual de la nación
croata, y ese renacimiento espiritual es algo que tenemos que completar, lo que
va a tomar años, y el ejército croata puede jugar en ello un rol
importante".
"Todo lo que hemos logrado, lo hicimos con
nuestras propias fuerzas, con el pueblo que se encuentra en la patria y con el
que está fuera de ella, y con la ayuda de Dios. Tenemos que estar conscientes
de que el futuro está en nuestras manos, y no debemos dejar más que alguien
entregue esto a manos ajenas, para que alguien domine a Croacia" (Velebit,
publicación del Ministerio de Defensa de la República de Croacia, 11/4/1997).
Pienso que estas palabras del presidente de la
República de Croacia son la mejor conclusión de este resumen a los siete años
de nuestra independencia estatal.
Siento, con todo, la necesidad de añadir algo más, de
responder a la pregunta que quizá se hagan algunos -por lo menos para sus
adentros- al final de estas palabras: ¿No hubo quizá también en este tiempo
omisiones, errores, desventuras, que habría que mencionar para que este resumen
no refleje el sonido de una sola campana?
- Sí, hubo. Hubo seguramente también errores
políticos, mejores pasos que hubiesen podido ser tomados.
El Dr. Tomac, en su libro Iza zatvorenih vrata
(Detrás de las puertas cerradas), recuerda los días de 1991, cuando era
vicepresidente del gobierno de unión democrática y dice: Hubo momentos cuando
teníamos que elegir uno de entre cien pasos posibles, que en su momento había
que seguir, y sabíamos de antemano que ninguna decisión sería correcta. Ese era
un tiempo en el que se cayó todo sobre Croacia, y ese tiempo aún no ha pasado
completamente. La guerra demostró el espíritu de lucha, la valentía, la firmeza
de la nación croata, pero ¿no es natural que en ese rico granero se encuentre
también hierbas malas: especuladores de guerra y corruptos?
¿Hay que sorprenderse acaso de que el cambio en la
propiedad de las empresas y la privatización, problema con el que siguen
lidiando países del ex bloque socialista, siga encontrando entre nosotros
tantas dificultades para ser resueltas?
¿Finalmente, no es acaso también natural que el
partido que llevó el peso del re- establecimiento del Estado croata, de su
organización y de su defensa, han desfallecido alguna vez en el ejercicio del
gobierno?
Pero, en la balanza de la valoración ¿qué importancia
tienen esas insuficiencias comparadas con el haber alcanzado y defendido al
Estado croata, formando de la nada las Fuerzas Armadas croatas, su ejército de
tierra, su marina, su fuerza aérea, la diplomacia croata, la integración y la
renovación de Croacia, la libertad democrática de sus ciudadanos, el avance
económico, etc.?
Su evaluación de la proporción de estos valores la
dio repetidamente el hombre y el ciudadano croata, y en particular en las
pasadas elecciones, cuando votó mayoritariamente por la Unión Democrática
Croata (HDZ) y a la cabeza de su lista el Dr. Franjo Tudjman.
Estas elecciones son consideradas como elecciones en
favor de estabilidad y la prosperidad de la República de Croacia. Ellos dieron,
y esto es muy importante también, apoyo a los principales partidos de
oposición, para que entren en el espíritu y el mecanismo del movimiento
democrático contemporáneo, en el cual tienen un rol correctivo importante del
partido mayoritario, que está en el gobierno, el que con su mayoría asegura la
estabilidad del Estado y la eficacia del gobierno.
En los tiempos pasados fuimos frecuentemente testigos
de que muchos partidos de oposición todavía no habían comprendido cuál es su
función en el auténtico movimiento democrático, de modo que ponían sus énfasis
en "destruir al gobierno" en vez de contribuir constructivamente a
través de un accionar correctivo respecto del partido gobernante el que -como
no lo es nadie en la vida- no es perfecto.
Existen signos de que esta relación negativa de a
poco cambia, de modo que un equilibrio de estos dos factores de la vida
democrática de Croacia sea un logro al llegar al octavo año de vida de la
República de Croacia.
Quisiera terminar con las palabras del presidente de
la República de Croacia: "Demostramos que hemos sido capaces de construir
una Croacia libre e independiente y capaces de defenderla. Seremos también
capaces de conservarla y hacer de ella una tierra de gente libre y
feliz"..."El futuro está en nuestras manos"..."¡Tendremos
una Croacia tal como nosotros mismos la hagamos!"
Creemos que será siempre, como lo es ahora, fuerte e
invencible!
Tradujo: Joza Vrljicak
Selección, traducción y nota preliminar de F. J. Juez Gálvez, Madrid
Preliminar
Al concebir sus cuentos, nuestro autor parte siempre
de la realidad, de un detalle -o de varios- sucedido realmente. Por ejemplo,
cuando Sarajevo sufría los bombardeos más atroces, podía leerse en la prensa
que sus habitantes pasaban hambre e incluso morían de inanición porque las
organizaciones humanitarias les habían mandado harina, pero no levadura. En
esas mismas fechas los periódicos publicaban fotografías de los parques y
campos de fútbol de Sarajevo convertidos en cementerios. Al mismo tiempo se
celebraba la Conferencia de Lisboa- Y eso mismo vale para los demás
cuentos."
Sin embargo, los acontecimientos reales le sirven al
autor sólo como fundamento de unos cuentos en que lo real y lo irreal se
mezclan hasta el absurdo lógico, en busca, según sus propias palabras, de un
refugio mental contra los horrores circundantes. Americka jahta u Gruzu (Un
yate americano en Dubrovnik), cuyo título parafrasea el de una obra de teatro
del autor croata Milan Begovic (1876-1948), Amerikanska jahta u splitskoj luci
(Un yate americano en el puerto de Split), es el primero de los cuentos de la
serie de “Cuentos de Guerra” que ha publicado; lo escribió en un refugio
antiaéreo, sobre las rodillas, en días de alarmas aéreas en Zagreb y de
bombardeos en Dubrovnik. Unicamente el cuento D'Artagnanu s ljubavlju- (A
d'Artagnan, con amor-) no se publicó, por problemas técnicos.
Ya han pasado varios años desde que la guerra
estuviera en su trágico apogeo, primero en Croacia, luego en Bosnia y
Hercegovina. Y como muchos acontecimientos importantes se olvidan demasiado
pronto, hay que recordar que en aquel momento la comunidad internacional se
comportó respecto a esa tragedia más o menos conforme al adagio Roma
deliberante Saguntum periit. Muchos medios de comunicación y muchos políticos
no hablaban más que de “partes en conflicto”. Las víctimas no eran víctimas, el
agresor no era agresor; sólo había “partes en conflicto”. Para el autor,
“partes en conflicto” es palabrota o una especie de insulto, porque mientras
una de las “partes en conflicto” se defendía con la “ayuda humanitaria” -sin
levadura-, la otra “parte en conflicto” machacaba Sarajevo con las armas más
sofisticadas.
Nuestro autor se enfrenta a esa conducta con la única
arma de que dispone: una pluma cargada de ironía, fina ironía, pero también
amarga. Y se teme que hoy, con el paso del tiempo, a los poco enterados algunas
de sus palabras les parezcan demasiado “fuertes”. Pero hay que acordarse de esa
danse macabre, de las terribles imágenes que veíamos a diario, y esperar que
esa atroz realidad no se vuelva a repetir.
Ivo Klaric, autor y, a veces, personaje de estos
“cuentos”, nació en Split. En la Universidad de Zagreb estudió Filología
Románica. Profesor, periodista, redactor-jefe del semanario Skolske novine
(Periódico escolar), de las revistas Nasa knjiga (Nuestro libro) y
Umjetnost i dijete (El arte y el niño), conocido traductor literario del
francés (Marqués de Sade, Alexandre Dumas, André Gide, Jean Genet -por las
traducciones de cuyas novelas ha sido premiado-, Albert Camus, Simone de
Beauvoir, Francoise Sagan-), del italiano (Gabriele D'Annunzio-) y
esporádicamente del español. Su género literario favorito es el cuento breve y,
al menos a primera vista, humorístico. Como escritor no le interesan las
“grandes cosas”, sus temas son les choses de la vie, “lo que pasa en la calle”,
en la escuela, en casa, en el trabajo. Es un excelente observador de los
detalles, a menudo sólo perceptibles cuando se encuentran en sus cuentos,
ingenuos a primera vista; en ellos, con distanciamiento -casi siempre en
primera persona-, con fina ironía, con frecuentes juegos de palabras, critica
sutilmente la realidad social. Aunque su expresión es sencilla, sus cuentos
tienen más de un estrato, oculto en algún juego de palabras, en alguna alusión
mitológica, histórica, literaria- Por eso puede decirse que Klaric es un
escritor exigente con sus lectores y que, a despecho de los posibles influjos
recibidos, ha formado un estilo propio, característico e inconfundible.
La forma expresiva favorita de Klaric es el diálogo.
La mayoría de sus cuentos podría dramatizarse, lo que quizá se deba a la
dilatada experiencia teatral del autor. Es un excelente conocedor de los
recursos del croata literario, lo que quizá le venga, al menos en parte, de familia:
tanto su padre, Branko Klaric (1912-1945), como su tío, Jaksa Ercegovic
(1918-1945), fueron poetas, miembros de lo que que Andjelko Novakovic ha
llamado “Academia Poética de Poljica” (Poljicka pjesnicka akademija), junto con
Jure Kastelan, Drago Ivanisevic, Josip Pupacic, Nikola Milicevic, Srecko
Karaman- No obstante, el encanto de sus cuentos radica justamente en el uso de
los dialectos croatas, levemente estilizados, y en especial del dálmata.
Los cuentos que presentamos son fruto de una
situación excepcional; con todo, son buena muestra de la creación de Klaric. Un
centenar de los cerca de cuatrocientos cuentos cortos que ha publicado componen
el libro Krajnje vrime (El último momento -la expresión tópica de los
políticos yugoslavos en los congresos del Partido, al referirse a la solución
de algún problema, etc.-), publicado en Zagreb en 1989. Los dos primeros
cuentos traducidos ahora al español, el ya citado Un yate americano en
Dubrovnik y Europa se moli- (Europa reza-), se publicaron en Vecernji
list (La Hoja de la Tarde) de Zagreb; el tercero, inédito en croata, se
publica ahora por primera vez.
Ivo Klaric es miembro de la Asociación de Traductores
Literarios Croatas, de la Asociación de Periodistas Croatas y del Centro Croata
del P.E.N. Desde junio de 1993 desempeña el cargo de Segundo Secretario de la
Embajada de Croacia en Madrid, encargado de Cultura y Prensa.
AMERICKA JAHTA U GRUZU
Savjetnik za vanjsku politiku (u daljem tekstu
savjetnik):
-Gospodine predsjednice, upravo smo primili vijest iz
naseg konzulata u Zagrebu da je u Hrvatskoj prognano vise od 300.000 ljudi iz
svojih visestoljetnih domova. Da se spaljuju sela, kolju starci, ene, djeca. Da
se unistava sve zivo-
Predsjednik :
-Reci Bakeru da netko iz njegove sluzbe uputi
telefonski protest jugoslovackom ambasadoru u Sjedinjenim Drzavama.
Savjetnik:
-Pise u raportu da u gradu Vukovaru vec dva mjeseca
vise od 15.000 ljudi zivi pod zemljom. Da je medju njima mnogo ranjenika u
bolnici koja se bombardira dan i noc. Da je mnogo djece, cak i trudnica-
Predsjednik :
-Reci Bakeru da jugoslovackom ambasadoru posalje
pismeni protest. Da niposto ne zaboravi spomenuti ljudska prava i tako dalje.
Ali da malo pripazi na rjecnik. Ne bih zelio da se doima kao ultimatum.
Savjetnik:
-Gospodine predsjednice, u poruci stoji i da srpski
osloboditelji nisu njeni ni prema crkvama, muzejima, skolama, vrticima. Da je
pogodjena vrlo stara katedrala u gradu Sibeniku, da je Zadar razoren-
Predsjednik :
-Obavijesti ministarstvo financija da gradonacelniku
Sibenika uputi pomoc za popravak katedrale. 1000 dolara? Dvije? No dobro, neka
bude tri. Kao beskamatni kredit. Cekaj
malo. Nek' ipak ostane pet posto kamata godisnje.
Savjetnik:
-Gospodine predsjednice, pise i da je raketom
pogodjena “Bijela kuca” u Zagrebu. Da su predsjednici Milosevic i Jovic te
general Kadijevic jedva izvukli zivu glavu.
Predsjednik :
-Tog Tudjmana bi doista trebalo ozbiljno upozoriti-
Savjetnik:
-Gospodine predsjednice, u raportu iz Zagreba stoji i
da je Dubrovnik u velikoj opasnosti.
Predsjednik
:
-Sto je
to?
Savjetnik:
-Svjetski
dragulj, gospodine predsjednice.
Predsjednik
:
-Pazi,
nisam znao. A koliko karata?
Savjetnik:
-Grad, gospodine. Biser Jadrana.
Predsjednik :
-Pardon! Pardon! Reci Bakeru da uputi vrlo vrlo ostar
protest, ali putem onog Mayora, iz UNESCO-a. Ne moramo mi bas sve potpisivati.
Savjetnik tada zasuti. A predsjednik, koji je u
medjuvremenu stavio paraf na dvadesetak dokumenata koje mu je savjetnik donio,
digne glavu:
-No, sto je? Sto si zasutio? Vidim da te nesto muci.
Izvoli.
Savjetnik:
-Gospodine predsjednice- moja jahta-
Gospodin predsjednik:
Da, vec si mi pricao o njoj. Kako te sluzi? Gdje je
sada?
Savjetnik:
-Gospodine presjednice nisam je uspio izvuci u
Pescaru. Ostala je u Gruzu. Gospodin ambasador Zimmermann javio mi je da je
pogodjena. S dva metka. Iz
malokalibarke. Umalo je potonula. A nova-
Predsjednik :
-Ma nemoj! Hitno sazovi sjednicu Nacionalnog savjeta
za obranu. Prije toga posalji faks komandantu Seste flote da sto prije uplovi u
Jadran. I obavijesti Schwarzkopfa da
odmah prekine odmor.
Savjetnik:
-Thank
you, thank you very much, mister President.
Art
Buchwald, alias Ivo Klaric (Vecernji list, Zagreb, 24.X.1991)
UN YATE AMERICANO EN DUBROVNIK
El Consejero de Política Exterior (en adelante, “el
Consejero”):
-Señor Presidente, acabamos de recibir desde nuestro
consulado en Zagreb la noticia de que en Croacia se ha expulsado a más de
300.000 personas de sus hogares ancestrales. Que se incendian pueblos, se
degüella a ancianos, mujeres y niños. Que se acaba con todo bicho viviente-
El Presidente:
-Dile a Baker que alguien de su servicio dirija una
protesta telefónica al embajador yugoslovaco en los Estados Unidos.
El Consejero:
-En el informe dice que en la ciudad de Vukovar hace
dos meses que más de 15.000 personas viven bajo tierra. Que entre ellas hay
muchos heridos en un hospital que bombardean día y noche. Que hay muchos niños,
incluso mujeres embarazadas-
El Presidente:
-Dile a Baker que envíe una protesta escrita al embajador
yugoslovaco. Y que no se le olvide por nada del mundo mencionar los derechos
humanos y todo eso. Pero que tenga cuidadito con el vocabulario, no vayan a
tomárselo como un ultimatum-
El Consejero:
-Señor Presidente, también se dice en el mensaje que
los libertadores serbios no se detienen ni ante las iglesias, los museos, las
escuelas ni ante las guarderías, que le han dado a una catedral muy, muy
antigua en la ciudad de Sibenik, que Zadar ha sido arrasado-
El Presidente:
-Notifica al Ministerio de Hacienda que envíe al
alcalde de Sibenik una ayuda para reparar la catedral. ¿1.000 dólares? ¿Dos
mil? Bueeeno, venga, que sean tres mil. Como crédito sin intereses. Espera un
momento. Que dejen un cinco por ciento anual por si acaso.
El Consejero:
-Señor Presidente, también dice que la “Casa Blanca”
de Zagreb ha sido alcanzada por un mísil, y que los presidentes Milosevic y
Jovic y el general Kadijevic se han salvado por los pelos.
El Presidente:
-A ese Tudjman de verdad que habría que advertirlo seriamente-
El Consejero:
-Señor Presidente, en el despacho de Zagreb también
se dice que Dubrovnik corre un grave peligro.
El Presidente:
-¿Y eso qué es?
El Consejero:
-La joya del mundo, señor Presidente.
El Presidente:
-Fíjate, no lo sabía. ¿Y cuántos quilates tiene?
El Consejero:
-Es una ciudad, señor. La Perla del Adriático.
El Presidente:
-¡Huy, perdón! Dile a Baker que mande una protesta
muy, pero que muy severa, pero por medio del Mayor ese, el de la UNESCO. No lo
vamos a firmar nosotros todo-
Entonces el Consejero enmudeció. Y el Presidente, que
entre tanto había estado poniendo su media firma en la veintena de documentos
que le había traído el Consejero, alzó la cabeza:
-¿Bueno, qué pasa? ¿Por qué te has callado? Veo que
algo te atormenta. Venga, hombre.
El Consejero:
-Señor Presidente- mi yate-
El señor Presidente:
-Sí, ya me has hablado de tu yate. ¿Cómo te va con
él? ¿Dónde lo tienes?
El Consejero:
-Señor Presidente, no logré llevármelo a Pescara. Se
me quedó en Dubrovnik. El embajador Zimmermann me ha avisado de que ha sido
alcanzado. Por dos proyectiles. Dos perdigonazos. Por poco se me hunde. Y uno
nuevo-
El Presidente:
-¡De eso ni hablar! Convoca urgentemente a sesión al
Comité Nacional de la Defensa. Pero antes mándale un fax al comandante de la
Sexta Flota para que zarpe cuanto antes rumbo al Adriático. Y notifica a
Schwarzkopf que interrumpa inmediatamente sus vacaciones.
El
Consejero:
-Thank
you, thank you very much, Mister President!
Art
Buchwald, alias Ivo Klaric (Vecernji list, Zagreb, 24.X.1991)
EUROPA SE
MOLI
Ministar
za one i sve druge poslove svojoj tajnici:
-Gospodjo,
molim vas, hitno, hitno me pokusajte spojiti s gospodom na ovom popisu. I to
redoslijedom koji sam naznacio. Ostavite sad sve druge poslove, ovo je doista
urgentno. Treba iskoristiti priliku dok telefonska linija jos nije prekinuta.
Sat
poslije. Tajnica ulazi kod ministra za one i sve druge poslove. U lijevoj
ruci papir, u desnoj olovka.
-No?
-Gospodine ministre, upravo kad sam zvala,
predsjednik Cossiga molio je u privatnoj kapelici predsjednicke palace. Njegova
me tajnica obavijestila da joj je rekao kako zeli apsolutni mir. Ne zeli da ga
bilo tko ili sto ometa u molitvi za Hrvatsku. Zatim ce, ako molitva u predsjednickoj
kapeli u iducih pet godina ne da ploda, gospodin predsjednik izravno krenuti u
hrvatsku crkvu sv. Jeronima. Ako pak- To je sve sto mi je mogla reci.
-Mitterrand?
-Ni njega nema. Rano jutros krenuo je na hodocasce u
Lourdes. Da moli za mir u Hrvatskoj-
-Nije li
on ateist?-
-Ne znam- cini mi se, ali i sami znate da neki ljudi
pod starost-
-Walesa?
-On vec mjesec dana nije svracao u Varsavu. Nitko ne
zna gdje je. Zlobni jezici govore da pliva izmedju vlade i predsjednistva.
Ipak, tajnica mi je sapnula da je, po svemu sudeci, u Czestochowi gdje usrdno
moli Crnu bogorodicu da nas mimoide casa ova.
-Havel?
-Da sam zvala pet minuta ranije, mogla sam dobiti
gospodina Havela. Trenutacno je hermeticki zatvoren u privatnim predsjednickim
prostorijama s nalogom da nikoga ne pustaju unutra. Boji se da mu ne izvjetri
stvaralacki zanos. Pise, naime, dramu Croatia
plorans. A to ce, kaze tajnica, potrajati.
-Vranitzky?
-On se rano jutros napokon pridruzio Bedemu ljubavi
i, s hrvatskim prognanicima, moli u katedrali sv. Stjepana.
-Sto je s ostalima? Kohl, Carlsson, González-
-Svi mole, gospodine- Svi!- upravo razdragano
odgovori tajnica.
Ministar s
olaksanjem uzdahne. A onda, nakon kratke pauze:
-Molim vas, nazovite mi jos gospodina Carringtona.
-Vec sam ga nazvala, gospodine. Cim sam cula sve ovo
sto sam vam iznijela, pokusala sam predvidjeti vasu zelju. On, gospodine, vec
puna dva dana usrdno, vrlo usrdno, moli gospodina Milosevica da prestane. Jer,
ako ne prestane, dat ce mu po guzi. Tako je zaprijetio.
P. S. -Ovo ti ne bu proslo!- rece mi prijatelj koji
provjerava svaku moju rijec koju pripremim za tisak.
-Zakaj? Mislis da je u suprotnosti s Uredbom o
medjunarodnom informiranju u ratu? -ja cu.
-Ne. Nema poente! Nisi poentiral, razmes?
-Ozbiljno!?
Ivo Klaric
P. S. (za spanjolsku verziju) Zahvaljujuci ovim
molitvama 250.000 Bosanaca naslo se u raju.
(Vecernji list, 20.XI.1991)
EUROPA REZA-
El Ministro de Asuntos de Allá y Acullá a su
secretaria:
-Señorita, por favor, intente ponerme en comunicación
urgentísimamente con los señores de esta lista, en el orden que le he indicado.
Deje ahora todos los demás asuntos; esto es realmente importante. Hay que
aprovechar la ocasión antes de que se corte la línea telefónica.
Al cabo de una hora, la secretaria entra en el
despacho del Ministro de Asuntos de Allá y Acullá. En la mano izquierda papel,
en la derecha bolígrafo.
-¿Y bien?
-Señor Ministro, justo cuando he llamado el
Presidente Cossiga estaba rezando en la capilla privada del palacio
presidencial. Su secretaria me ha informado de que le ha dicho que quiere una
paz absoluta. No quiere que nada ni nadie lo moleste mientras reza por la paz
en Croacia. Después, si sus rezos en la capilla presidencial no dan fruto en
los próximos cinco años, el señor Presidente marchará directamente a la iglesia
de San Jerónimo de los Croatas. Por si acaso- Es todo lo que me ha podido
decir.
-¿Mitterrand?
-Tampoco está. Esta mañana temprano se fue en
peregrinación a Lourdes. Para rezar por la paz en Croacia-
-¿Pero no era ateo?
-No sé- eso creo, pero ya sabe usted que algunas
personas, cuando se hacen mayores-
-¿Walesa?
-Lleva ya un mes sin volver por Varsovia. Nadie sabe
dónde está. Las malas lenguas dicen que fluctúa entre el gobierno y la
presidencia. Sin embargo, su secretaria me ha soplado que ella cree que está en
Czstochowa, donde ruega fervorosamente a la Virgen Negra para que aparte de
nosotros este cáliz.
-¿Havel?
-De haber llamado cinco minutos antes, habría podido
dar con el señor Havel. Por el momento está encerrado a cal y canto en las
habitaciones privadas de la presidencia, con orden de no dejar pasar a nadie.
Teme que se le vaya el entusiasmo creador. Está escribiendo, pues, el drama Croatia
plorans. Y, según su secretaria, va para largo.
-¿Vranitzky?
-Esta mañana temprano se unió por fin al “Baluarte
del Amor”, y reza en la catedral de San Esteban con los refugiados croatas.
-¿Qué hay de los demás? Kohl, Carlsson, González-
-Todos rezan, señor- ¡Todos! -respondió la
secretaria, verdaderamente exultante.
El Ministro suspiró con alivio. Luego, tras una breve
pausa:
-Por favor, llámeme ahora al señor Carrington.
-Ya he llamado, señor. Nada más oír todo lo que le
acabo de exponer, intenté adelantarme a sus deseos. Lleva dos meses enteros
rogando fervorosa, pero que muy fervorosamente, al señor Milosevic para que
pare. Porque, como no pare, le dará en el culete. Así lo amenazó.
P. S.: -¡No te lo van a pasar! -me dijo el amigo de
la barra que revisa palabra por palabra todo lo que preparo para publicar.
-¿Por qué? ¿Te parece que no está de acuerdo con el
Decreto de Información en Guerra? -dije yo.
-No. No es eso. No tiene moraleja. No has dado en el
clavo, ¿me entiendes?
-¿En serio?
Ivo Klaric
P. S. a la versión española: Gracias a estas
oraciones unos 250.000 bosníacos se encuentran en el paraíso.
(Vecernji list, Zagreb, 20.XI.1991)
D'ARTAGNANU S LJUBAVLJU
Lutecijska palaca, nekoliko trenutaka nakon sto je
gospodin predsjednik, na prigodnoj svecanosti, primio Povelju naslovljenu
“gospodinu s ljubavlju”, koju mu je urucila delegacija nekad poznatoga
sarajevskog naselja Dobrinja, u ime svih onih koji su barem deset dana uspjeli
prezivjeti njegov iznenadan i plodotvoran posjet.
Gospodin predsjednik, sav razdragan izrazom
zahvalnosti koju mu je pribavio njegov herojski cin, nije imao nista protiv kad
sam ga zamolio za mali prigodni razgovor. Naprotiv!
-Sto vas je potaklo na taj viteski pothvat bez
presedana u povijesti Europe, Amerike i Galije u posljednjih deset mjeseci,
dvadeset i cetiri dana i pet sati? Pothvat koji, prema mojem skromnom
misljenju, nije nista manje ucinkovit od pothvata gusaka koje su spasile Rim-
Asteriksa, pardon, Vercingetoriksa da i ne spominjem!-
-Pa- Potaknuo me onaj turobni, tuzni i mucni sastanak
u Lisabonu kad smo pokusali uciniti sve da bismo konacno sprijecili tragicne
posljedice bezumnoga sukoba sukobljenih strana u Jugoslaviji. Nakon sastanka
koji je jos jednom urodio vrlo konstruktivnim zakljuccima, htjeli smo se malo
opustiti pa smo, premda vrlo umorni, svi zajedno otisli pogledati jedan dobar
fado. Sigurno znate da su na sastanku bili gospoda Dumas, Atos, Portos, Aramis
i moja skromnost. Kako vidite, gotovo cijela ujedinjena Europa na okupu. No, ni
za vrijeme predstave koja je, moram pohvaliti nase domacine, bila izvrsna,
nismo mogli mimoici tu tuznu temu. “Zamislite, gospodo, odjednom je kao u snu
kliknuo gospodin Dumas, ti ljudi umiru ne zato sto ih masakriraju, vec zato sto
imaju brasna, a nemaju - kvasa! Uzas!!!- Obicna sitnica, ali sitnica bez koje
nema zivota!”- Nesto je puklo u meni kad sam to cuo. Odjednom sam osjetio kako
me ponovno ispunjava negdje duboko zapretani musketirski duh. Odlucno sam se
dignuo i rekao: “Gospodo, ja idem, a vi kako znate!”- Napustio sam fado, uletio
u prvi ducan, kupio kilo najkvalitetnije germe, odjurio na aerodrom i prvim
avionom poletio prema Jugoslaviji. Spustio sam se u grad moga starog prijatelja
Dioklecijana, gdje su me neki gnjavatori pokusali uvjeriti kako je to neka druga
zemlja koja nema nikakve veze s Jugoslavijom. Te su mi cak i pasos pokusali
traziti! Gotovo da sam mac izvukao iz korica- Eto, vidite cime se oni bave u
vrijeme kad 300.000 ljudi skapava od humanitarne pomoci, pardon, od gladi, samo
zato sto nema germe!- No, moj vjerni pratilac gospodin Touche-noire i ja nismo
se na to osvrtali. Prvim helikopterom odnijeli smo kvasac u Sarajevo. Ostalo
ste ili vidjeli ili culi.
-Da, ali za novine su vazni i detalji. Citatelji to vole. Vasa osobna zapazanja?-
-Pa, njih je bilo vec i iz helikoptera. Kad smo se
priblizavali gradu u cudu sam se pitao: sto predstavlja pravo mnostvo krizeva i
nekih drugih neobicnih znakova zasadjenih po parkovima? Podsjecalo me na
groblja, a groblja nisu bila- To sam pitanje kasnije postavio u vrlo srdacnom
razgovoru generalu Mladicu i gospodinu Karadzicu. Objasnili su mi da to druga
sukobljena strana svoju, iz cista nehata stradalu djecu, zene i starce, pokapa
po gradskim parkovima, sto je, cak i prema misljenju generala Mladica,
barbarski, nehumano, a i vrlo nehigijenski, kad za to u civiliziranom svijetu
postoje posebna mjesta. Slozio sam se i pitao kakva je perspektiva u tom
pogledu. General Mladic se iskreno nada da bi, uz dosad iskazanu europsku
pomoc, samo po parkovima Sarajeva, moglo niknuti novih pedesetak tisuca slicnih
nadgrobnih znakova. Tom barbarskom pokapanju treba stati na kraj, zakljucio je
general. Slozio sam se. Gospodin
Touche-noire i ja zamislili smo se nad tim rijecima i shvatili da se
humaritarna pomoc ne smije zaustaviti na germi vec da je treba obogatiti. Zato
cemo odmah najodgovornijima iz medjunarodne zajednice predloiti da nastradaloj
sukobljenoj strani hitnooo, za prvu ruku, isporuci pedesetak tisuca lijesova.
Uz strogu obavezu da se to vise po parkovima ne cini. Kad vec hoce u Europu,
neka se onda i europski ponasaju! Uostalom,
sukob ce, kad tad, ipak zavrsiti. A gdje ce onda, ako se ovako nastavi,
civilizirani i ujedinjeni svijet setati sa svojim kucnim mezimcima? Da i ne
spominjem mnogobrojne turiste koji ce kasnije htjeti posjetiti rezultate
humanitarne pomoci u sukobu sukobljenih strana!
Da, da- Merci beaucoup, Monsieur d'Artagnan!
Ivo Klaric
P. S. Napisano 19. srpnja 1992. godine, nakon
Mitterrandova posjeta Sarajevu, kad je, na str. 22 Slobodne Dalmacije, osvanula
fotografija Sarajeva punog krizeva i muslimanskih nadgrobnih znakova. Poslano
faksom iz Dugog Rata u Zagreb- ali faks je bio neispravan.
A D'ARTAGNAN, CON AMOR-
El palacio de Lutecia, unos momentos después de que
el señor Presidente, en la solemnidad de la ocasión, recibiera el diploma con
el título “al señor, con amor”, que le había entregado la delegación de
Dobrinja, antaño célebre barrio de Sarajevo, en nombre de todos los que habían
logrado sobrevivir, al menos diez días, a su sorpresiva y fructífera visita.
El señor Presidente, todo exultante por esa expresión
de agradecimiento que le había procurado su acción heroica, no tuvo ningún
inconveniente cuando le pedí una breve entrevista con tal motivo. ¡Al
contrario!
-¿Qué le impulsó a esa hazaña caballeresca, sin
precedentes en la historia de Europa, de América y de las Galias en los últimos
diez meses, veinticuatro días y cinco horas? Una hazaña que, a mi modesto
entender, no ha sido menos efectiva que la hazaña de los gansos que salvaron a
Roma- ¡Por no mencionar a Astérix, digo, a Vercingétorix!-
-Bueno, me impulsó la triste y penosa reunión de
Lisboa, en la que intentamos hacer todo lo posible para impedir de una vez por
todas las trágicas consecuencias del insensato conflicto de las partes en
conflicto en Yugoslavia*. Después de la reunión, que una vez más produjo
conclusiones muy constructivas, queríamos relajarnos un poco, así que, aunque
cansados, fuimos todos juntos a escuchar unos buenos fados. Estuvieron en la
reunión, ya lo sabe usted, los señores Dumas, Athos, Porthos, Aramis y un
servidor. Como puede ver, casi toda la Europa Unida junta. Pero ni siquiera
durante la actuación, que, tengo que alabar a nuestros anfitriones, fue
extraordinaria, podíamos eludir ese triste tema. “¡Imagínense, señores, -exclamó
de repente, como en un sueño, el señor Dumas- esa gente muere no porque la
degüellen, sino porque, teniendo harina como tienen, no tienen levadura! ¡¡¡Qué
horror!!!- ¡El típico detalle, pero un detalle del que depende la vida!” Algo
estalló dentro de mí al oírlo. De repente sentí cómo renacía en mi interior el
espíritu mosquetero, aletargado en las profundidades de mi alma. Me levanté
resueltamente y dije: “¡Señores, yo me voy; ustedes hagan lo que quieran!”-
Dejé los fados, me fui volando a la primera tienda, compré un quilo de levadura
de la mejor calidad, salí corriendo al aeropuerto y despegué en el primer avión
hacia Yugoslavia. Aterricé en la ciudad de mi viejo amigo Diocleciano, donde
algunos pelmazos me intentaban convencer de que ése era otro país, un país que
no tenía nada que ver con Yugoslavia. ¡Y hasta exigían que les enseñara el
pasaporte! A punto estuve de desenvainar la espada- ¿Se da usted cuenta de a lo
que se dedican cuando 300.000 personas se mueren de ayuda humanitaria, digo, de
hambre, sólo porque no tienen levadura! Pero bueno, ni mi fiel compañero el
señor Touche-Noire ni yo le dimos la menor importancia. En el primer
helicóptero llevamos la levadura a Sarajevo. Eso fue todo. Lo demás ya lo ha
visto u oído.
-Sí, pero a los lectores les intereresan los
detalles. ¿Sus impresiones personales?
-Bueno, ya hubo varias desde el helicóptero. Cuándo
nos acercábamos a la ciudad me preguntaba sorprendido: ¿Qué son tantísimas
cruces y signos raros plantados en los parques? Me recordaban cementerios, pero
no eran cementerios- Esa pregunta se la hice después, en cordialísima
conversación, al general Mladic y al señor Karadzic. Me explicaron que la otra
parte en conflicto, por pura dejadez, entierra en los parques públicos y en los
campos de fútbol a los niños, mujeres y ancianos fallecidos, lo que, al parecer
del general Mladic, es bárbaro e inhumano, así como muy antihigiénico,
existiendo como existen en el mundo civilizado lugares especiales para eso. Le
di la razón y le pregunté cuáles eran las perspectivas a ese respecto. El
general Mladic tenía la sincera esperanza de que, junto a la ayuda europea ya
mencionada, pudieran surgir sólo en los parques de Sarajevo unos cincuenta mil
signos sepulcrales más. Hay que poner fin a esos bárbaros enterramientos,
concluyó el general. Le di la razón. Mi fiel Touche-Noire y yo nos quedamos
pensando en esas palabras, y nos dimos cuenta de que la ayuda humanitaria no
podía limitarse a la levadura, sino que había que enriquecerla. Por eso
propondremos inmediatamente a los máximos responsables de la comunidad
internacional que se despachen urgentííísimamente a esa parte en conflicto
afectada, para las primeras necesidades, unos cincuenta mil ataúdes. Con el
firme compromiso de que no vuelvan a hacer eso en los parques. ¡Ya que quieren
entrar en Europa, que se comporten como europeos! Por lo demás, el conflicto
tarde o temprano tiene que terminar. ¿Pero por dónde pasearía el mundo
civilizado y unido con sus perritos, de seguir así?
¡Eso sin mencionar a los numerosos turistas que más
tarde querrán contemplar los resultados de la ayuda humanitaria en el conflicto
de las partes en conflicto!
-Sí, claro- Merci beaucoup, Monsieur d'Artagnan!
Ivo Klaric
P. S.: Escrito el 19 de julio de 1992, después de la
visita de Mitterrand a Sarajevo, cuando en la página 22 del diario Slobodna
Dalmacija (Dalmacia Libre) de Split apareció una fotografía de Sarajevo
lleno de cruces y de signos funerarios musulmanes. Enviado por fax de Dugi Rat
a Zagreb- pero el fax estaba mal.
* Los hispanohablantes comprenderán en seguida el
significado de la palabra Yugoslavia. El procedimiento en muy sencillo; basta
aplicar una de las cuatro operaciones matemáticas básicas, la división:
¡yugo-eslavia! Ahora se puede comprender todo lo que ha pasado, lo que pasa y
lo que puede pasar- sub iugo. A no ser que uno sea político- (Nota del autor a
la versión española).
Vesna Blazina. Montreal, Canadá
MEMORICIDIO O LA PURIFICACION CULTURAL: la guerra y
las bibliotecas de Croacia y Bosnia-Hercegovina
Desde 1991, los patrimonios culturales de Croacia y
Bosnia y Hercegovina fueron víctimas de memoricidio o de purificación cultural.
Los organismos internacionales han establecido que la destrucción deliberada y
sistemática de las bibliotecas y de los archivos constituye un crimen contra la
humanidad en virtud del derecho internacional humanitario y de las convenciones
de Ginebra (1949) y La Haya (1954). Mientras que los bibliotecarios concentran
sus esfuerzos en la reconstrucción de los edificios y la reconstitución de las
colecciones, el Tribunal Internacional de Guerra de La Haya ha inculpados a los
líderes serbios de Bosnia de crímenes contra la cultura.
"No puede haber paz sin justicia y no puede
haber justicia sin que la verdad sea conocida" Prof. Cherif Bassiouni
(Consejo de Seguridad de la Comunidad Europea, 1995).
¿Está justificado lamentar la destrucción de las
bibliotecas, los archivos, el patrimonio arquitectónico o de obras de arte en el
momento en que los humanos están expuestos al genocidio, a los campos de
concentración, a las violaciones, a la purificación étnica? (Almond, 1994; Biolley, 1993; Cigar, 1995; Cushman
& Mestrovic, 1996; Finkielkraut, 1992; Garde, 1992; Grmek, 1993; Gutman,
1993; Kostovic, 1992; Mestrovic, 1994 y 1996; Nouvel Observateur et Reporters
sans frontieres, 1993; Stiglmayer, 1993).
¿La purificación cultural es tan perniciosa como la
purificación étnica? ¿Se trata del memoricidio? ¿El memoricidio es un crimen
contra la humanidad del mismo tenor que el genocidio? ¿Hay leyes que protegen
el patrimonio cultural en caso de conflicto armado?
¿Una biblioteca puede representar un blanco militar
justificado? otras tantas preguntas que nacen frente a la devastación cultural
de Croacia y B-H desde 1991.
Los informes del Consejo de Seguridad Europea hablan
"de una catástrofe cultural y europea de una amplitud aterradora"
(Consejo de Europa, 1993, doc. 6756, p.47) mientras que el informe final de la
Comisión de Expertos de las Naciones Unidas describen la "destrucción
intencional de bienes culturales que no se puede justificar por la necesidad
militar" (Naciones Unidas, Comisión de Expertos de la ex Yugoslavia, 1994,
Anexo VI, parágrafos 183-193, Anexo XI, parágrafos 17,22 y 33).
¿Cómo expresar el sentimiento de la tristeza
indecible que surge con la idea de desaparición de una ciudad de arte?
La destrucción de bienes culturales representa la
aniquilación de aquello que fue dejado en herencia por decenas de generaciones
anteriores, de allí el sentimiento de pérdida irreparable que suscita.
Además, el agresor, habiendo eliminado las víctimas
humanas puede destruir hasta eliminar todo rastro de la existencia del grupo
eliminado (Consejo de Europa, 1993, doc. 6756, p 14; Lorkovic, 1995).
Según los observadores internacionales, durante la
guerra de 1991-1995, el objetivo de Serbia era ocupar los territorios habitados
por los no serbios, sobre todo los de los croatas y de bosnios musulmanes y
destruir su identidad política, económica y cultural en nombre de la
autodeterminación de los serbios (Consejo de Europa 1993, doc. 6756). Nótese al
pasar que estos territorios no formaron parte jamás de un estado serbio.
La República de Croacia proclamó su independencia de
la federación yugoslava el 25 de junio de 1991, después de un referendum
aprobado por el 85 por ciento de la población (participó el 92 por ciento). De
este voto democrático que proponía la soberanía en el caso de que la
confederación de las repúblicas yugoslavas fuera rechazado, no fue respetado
por las fuerzas armadas yugoslavas que armó a la minoría serbia (11 por ciento)
y ocupó un tercio del territorio. El razonamiento del gobierno serbo-yugoslavo
había sido el siguiente: si los croatas tienen el derecho de salir de la
federación, los serbios de Croacia tienen el derecho de quedarse. Ellos
entonces ocuparon los territorios poblados en parte por los serbios y los
unieron por la fuerza a Yugoslavia. Siguió una agresión brutal en el curso de
la cual fueron muertos 10.000 no serbios, heridos 50.000 y 500.000 han sido
expulsados de sus hogares (Kostovic, 1992; Naciones Unidas, Alto Comisariado
para los refugiados, 1993, p.79). Y el colmo de la injusticia, la ONU impuso un
embargo sobre las armas que favorecía al agresor, ya muy bien armado.
El 15 de enero de 1992, la comunidad internacional
reconoció a Croacia como país independiente. En 1995, Croacia pudo liberar el
25% de su territorio, mientras que los 5 por ciento que todavía están bajo
ocupación (Eslavonia oriental, Baranja y Srijem occidental) deben ser
restituidos de a poco. Desde 1991, todos las resoluciones del Consejo de
Seguridad de la ONU reiteran que los territorios croatas ocupados por los
serbios forman parte de la República de Croacia y deben ser reintegrados a su
control.
La agresión más violenta fue en el Este de Croacia,
donde las fuerzas armadas yugoslavas se transformaron rápidamente en ejército
serbio, capaz de desplegar todos los medios militares a su disposición. La
región de Eslavonia, en el nordeste y la de Dalmacia, en el sudeste, han
sufrido los peores ataques. La destrucción total de la ciudad de Vukovar,
asediada y demolida, y el intento de destrucción de Dubrovnik, patrimonio
cultural de la humanidad desde 1972, son verdaderos símbolos de esta guerra.
Protección del patrimonio cultural en tiempos de
guerra
La protección cultural en tiempos de guerra plantea
muchos problemas. Digamos para empezar que los croatas y los bosnios no
creyeron hasta el último minuto en la eventualidad de un conflicto armado.
Pensaron siempre que una llamada a la comunidad internacional, principalmente a
las Naciones Unidas y a la Unión Europea, impediría una agresión militar contra
sus países.
Por otra parte, la evacuación de las obras de arte y
de bibliotecas es una admisión por parte de las autoridades de que la guerra es
inminente. A causa de su enorme impacto psicológico en la población, es una
decisión difícil de tomar. Por lo tanto, una vez comenzadas las hostilidades
todos los esfuerzos para proteger esos bienes están seriamente comprometidos.
En el caso de las bibliotecas, el problema se complica por la necesidad
imperiosa de encontrar espacios muy vastos. Dejar las colecciones en el lugar,
a merced de los bombardeos, o bien desplazarlo con el riesgo de pérdida en
razón de las condiciones de transporte y de depósito, ese es el gran dilema.
El Instituto para la Protección de Monumentos había
emprendido tres tipos de medidas preventivas: la evacuación de las colecciones
de museos y de objetos de arte, depositándolos en lugar seguro, y la protección
física de los instalaciones (cajas de arena, paredes de ladrillo, planchas de
madera). Había igualmente la obligación de izar sobre los monumentos las
banderas blancas y azules previstas por la Convención de La Haya de la UNESCO
para la protección de los bienes culturales en caso de conflicto armado
(UNESCO, 1954). Esta convención dictamina cierto número de principios de
protección pero, desgraciadamente, no ha previsto medidas coercitivas para
aquellos que no las respeten. Desde el comienzo, los croatas y los bosnios
tuvieron sus dudas acerca de la eficacia real de la bandera de La Haya, ese
pequeño pedazo de tela azul y blanco destinado a asegurar la protección de su
patrimonio cultural.
En Croacia, el gran número de iglesias adornadas de
estas banderas que paradojalmente han sido sacudidas por impactos ha hecho
creer a mucha gente que esas banderas sirvieron más bien de blanco. Jacques
Baumel, al informar sobre su misión de encuesta en Croacia, nota que "Las
banderas no constituyen una protección contra los obuses sin el sostén de una
acción de la comunidad internacional" (Consejo de Europa, 1993. Doc 6756
p. 10).
Barbara O. Roberts, curadora-restauradora consultora
y miembro del ICOM (Internacional Council of Museums) menciona en su informe
que "si bien no puede determinar que la bandera de La Haya estaba sobre
todos los edificios e instalaciones, en Dubrovnik la artillería serbia no
ahorró sus tiros sobre los que tenían desplegadas estas banderas."
Croacia
Relevar y documentar los daños: ésta es el punto más
urgente de los especialistas en protección de patrimonios culturales.
Sobre esto, los datos que consignan los daños
infligidos al patrimonio cultural de Croacia están expuestos en su mayoría, en
el libro Cultural Heritage of Croatia in the War 1991-1992 (Ivancevic, 1993) y
en los informes del Consejo de Europa (Informes 1-5, 1993 y 1994). La
descripción del patrimonio de Croacia antes de la guerra está en el libro
Tesoro artístico de Croacia (Ivancevic, 1993).
Daños en las bibliotecas
Tres son las obras que establecen principalmente la
envergadura de los daños sufridos por las bibliotecas de Croacia, enumerados
por región y por tipo de biblioteca.
Se trata de Wounded Libraries in Croatia (Aparac-Gazivoda,
1993); Croatian Libraires on Target: Guide (Celic-Tica et al., 1992); y los
informes sobre las bibliotecas publicados en el Vjesnik bibliotekara Hrvatske
(1992). Otros datos provienen de observaciones personales sobre el terreno y de
entrevistas con los bibliotecarios de Croacia donde la autora permaneció
estudiando la cuestión en 1993- 94. La descripción de daños en una localidad,
en general en el orden cronológico, sirve para ilustrar las dificultades acerca
de la protección de las colecciones, al mismo tiempo que testimonian la
devoción y el coraje de los bibliotecarios en el cumplimiento de esta tarea en
condiciones de vida extremadamente difíciles.
Región de Eslavonia
La biblioteca municipal de Vinkovci, fundada en 1875,
tiene la dudosa distinción de haber sido la primera biblioteca incendiada en
esta guerra: su suerte debiera servir de mensaje y advertencia a todos los que
se ocupan de la herencia cultural.
El 17 de septiembre de 1991 fue reducida a cenizas
por dos ataques de artillería serbia según el escenario típico: los bomberos
tuvieron éxito en detener el fuego después del primer ataque, pero se lanzó un
segundo que aniquiló las colecciones y el edificio. Esta biblioteca poseía
85.000 volúmenes además de una rica colección de manuscritos de autores de la
región. Como la mayor parte de las bibliotecas públicas en Croacia, ésta tenía
el rol de casa de la cultura y ofrecía todo un abanico de acontecimientos
culturales.
Un año más tarde, los servicios a los usuarios tenían
una colección de 30.000 mil volúmenes, conseguidos por medio de donaciones de
toda Croacia y un bibliobus donado por la ciudad de Viena (Erl, 1992; Phillips,
1992). Los bibliotecarios notaron por todos lados un acrecentado interés por la
lectura: cuanto más eran atacadas sus ciudades más leía la gente. Los niños, en
particular, solían llevar un libro en los refugios subterráneos donde vivían
durante los ataques (Ivanisevic, 1994).
La biblioteca pública de Pakrac, fundada en 1919,
recibió impactos directos que dañaron gravemente su edificio. Una vez que cesó
el fuego, el personal de la Biblioteca Nacional de Croacia en Zagreb organizó
la evacuación de la colección de 22.000 volúmenes a la Biblioteca Pública de
Bjelovar a 80 kilómetros de distancia, ésta misma estropeada por los tiros.
Algunos libros fueron dañados por la lluvia durante la evacuación.
Muchas bibliotecas de la Universidad de Osijek se
encontraron en la línea del frente en 1991, sus edificios sufrieron graves
daños mientras que la mayor parte de las colecciones fueron depositadas en
lugar seguro. Así, la Biblioteca Central de Agricultura, edificada en 1990
(30.000 volúmenes y 670 títulos de periódicos), fue la que más sufrió: el 80
por ciento de su equipo y el 40 por ciento de su colección fue destruida
(Phillips, 1992). Igualmente, los archivos históricos de la ciudad de Osijek
han sufrido graves daños.
El Museo Municipal de Vukovar, establecido en el
castillo de la familia Eltz, del siglo XVIII, abrigaba la colección
prehistórica de Vucedol, de 32.513 objetos. La biblioteca, que poseía 515
libros raros (de los siglos XVI al XIX) entre sus 13.000 volúmenes, estaba
declarada monumento nacional. Durante los bombardeos de los serbios en los días
25 y 26 de agosto de 1991, fueron alcanzados la fachada y el techo. El 20 y el
21 de septiembre, durante un ataque de artillería pesada, el castillo fue
dañado seriamente otra vez. Bombardeado por el aire, el museo fue apresado por
el fuego y ardió durante dos días. Los ataques continuaron el 22 y el 28 de
septiembre. Los libros salvados del fuego fueron apilados a lo largo de los
muros en los corredores.
La Biblioteca Pública de Vukovar, fundada en 1947,
comprendía una central con 15 sucursales. Contenía 76.000 volúmenes, una
importante colección de audiovisuales y la colección "Vukovariensia"
que hablaba de la historia local. Los grandes arcadas de vidrio, que en tiempos
normales hicieron el encanto de ese edificio situado a orillas del Danubio,
presenta un serio defecto en tiempos de guerra.
Marija Brkic, empleada con 35 años de antigüedad en
el cargo, fue amortajada por estas ruinas en octubre de 1991 mientras que otros
dos empleados son considerados desaparecidos. Durante el otoño de 1991, la
biblioteca fue completamente aniquilada "la guerra nos atrapó
desprevenidos y desprotegidos como un desastre natural" explica la
bibliotecaria Antonija Kukuljica "Hay que proteger las colecciones antes
de la guerra, una vez que comienza, hasta la vida humana no vale nada"
(Rapport sus les bibliotheques.., 1991, p.76-77) La parte más preciada de la
biblioteca había sido evacuada a un lugar seguro antes de estos
acontecimientos. En realidad, no había lugar seguro en Vukovar.
Una suerte similar le reservaba al Museo Histórico, a
la Galería de arte, a la colección Bauer de obras de arte (1.357 cuadros de los
siglos XIX y XX), al Museo conmemorativo Lavoslav Ruzicka (con recuerdos del
premio Nobel de química de 1939) al igual que a las bibliotecas de las
localidades cercanas a Vukovar.
La Biblioteca del Convento de los franciscanos de
Vukovar que, además de 4 incunables, contenía 17.000 volúmenes publicados entre
los siglos XV y XIX, ha sufrido grandes daños. Los franciscanos habían llevado
los libros preciosos a las alas más seguras del convento pero, vista la importancia
de los daños del edificio, es imposible decir qué proporción de la colección
pudo haberse salvado.
El 17 de octubre de 1991, 8.000 habitantes no serbios
de la ciudad de Ilok (Srijem occidental) cerca de Vukovar, fueron expulsados de
sus hogares. Después de ese tiempo, el franciscano Marko Malovic quedó como el
único sacerdote católico de esa región ocupada. Se quedó a pesar de las
numerosas amenazas de muerte. La puerta de su iglesia, San Juan de Capistrano,
construida en 1439, fue sacudida por una fuerte explosión en julio de 1993. El
celebraba siempre la misa en un altar de madera que fue alcanzado por una
esquirla. En el campanario medieval, el padre Malovic apiló libros raros,
manuscritos, obras de arte y registros de bautismo y de casamiento; todo lo que
pudo salvar de los 2.000 iglesias y monasterios católicos en ruinas de la
región. Hay que notar que los edificios religiosos que no fueron destruidos
durante las operaciones militares en 1991 han sido dinamitados más tarde. Así
ha sido barrida la memoria colectiva de comunidades enteras (Hedges, 1996).
El 18 de noviembre de 1991, la ciudad de Vukovar
(50.000 habitantes), totalmente demolida durante tres meses de sitio, fue
ocupada por las fuerzas serbias. Su centro histórico barroco que databa del siglo
XVIII no existe más. Los habitantes no serbios fueron expulsados y deportados.
Los 261 heridos del hospital de Vukovar, fueron
ejecutados y enterrados en un osario en Ovcara, una granja vecina. Las familias
de Vukovar están todavía en la búsqueda de 2.862 parientes arrancados por la
fuerza por los serbios y considerados desaparecidos. En el otoño de 1996, la
administración temporaria de la región de la ONU (UNTAES) posibilitó la
exhumación de los cadáveres a los expertos internacionales que deberán suministrar
una respuesta definitiva a los familiares que esperan desde hace cinco años.
Los bibliotecarios de Vukovar que viven en el exilio
en el territorio libre de Croacia tratan de reconstruir las colecciones de sus
bibliotecas. Ya en 1991, el mes del libro fue dedicado a las donaciones para
las bibliotecas destruidas.
El 29 de noviembre de 1991, las colecciones del Museo
Municipal de Vukovar, la colección Bauer, la colección de la Galería de Arte y
de la Biblioteca Municipal, un total de 25.000 objetos de arte, fueron
transportados a Serbia, bajo la supervisión del Ministerio de cultura de
Serbia, para su protección. Según las informaciones disponibles, esos objetos
entrarán en el mercado del arte de Novi Sad, de Belgrado y de París (Consejo de
Europa, 1993. Doc 6756, p 18; Consejo de Europa, 1994, doc 7070, p. 52; Tuttle,
1992; Naciones Unidas Comisión de expertos de la ex Yugoslavia, 1994, anexo IX,
parágrafo 60, p.14). Según los informes de la agencia noticiosa Associated
Press de noviembre de 1993, citados por Andras Riedlmayer, Belgrado será el más
grande mercado de objetos de arte y de antigüedades en todo Europa (Riedlmayer,
en: Carnegie Endowment for International Peace, 1994).
Así, en la primavera de 1992, un museo de Belgrado
organizó una exposición de iconos griegos arrebatados de Zadar, en Dalmacia.
Esos tesoros fueron prestados a Serbia para una exposición en agradecimiento a
los especialistas serbios que habían estado implicados en su restauración,
durante la guerra.
Parece que Serbia no tiene ninguna intención de
devolver esos objetos de arte a sus propietarios bajo el pretexto de que
estarán más protegidos en Serbia. Estos tesoros bizantinos provienen de la
iglesia ortodoxa que Zadar hizo construir en el siglo XVI para los mercaderes
griegos y no son de origen serbio (Consejo de Europa, 1992, doc 6904, p.36;
Consejo de Europa, 1994, doc.7070, p.57).
Región de Dalmacia
Las ciudades de Zadar y Dubrovnik, al norte y al sur
de la costa adriática, son las que han sufrido los peores estragos de esa
región.
Zadar
La Biblioteca Científica de Zadar, fundada en 1850,
fue tremendamente sacudida por dos impactos directos el 5 de octubre de 1991.
Contenía 600.000 volúmenes, 5.566 títulos de periódicos, 929 títulos de
revistas, 33 incunables, 1080 manuscritos, 370 pergaminos, 1.350 libros raros,
1200 cartas geográficas, 2.500 fotografías, 1.500 partituras y 60.000 piezas
documentales más. El techo, la fachada y los muros internos fueron alcanzados
directamente por impactos y han sufrido graves daños. Las adquisiciones
recientes y los catálogos, así como el equipamiento informático y todos los
recursos materiales de la sala de lectura fueron demolidos. Seis pinturas de
artistas célebres que se encontraban en exposición fueron igualmente
destruidos. En el curso del invierno, trabajando entre los restos de su
biblioteca sin electricidad, sin calefacción y sin agua, los empleados
transportaron toda la colección al subsuelo del edificio.
La Biblioteca Municipal de Zadar (fundada en 1857) de
60,000 volúmenes fue bombardeada el 9 de octubre de 1991. El edificio sufrió
graves daños pero las colecciones permanecieron intactas. Ese palacio histórico
albergaba igualmente la biblioteca de la Escuela de Música; esta biblioteca fue
gravemente dañada.
Obligados a retirarse del territorio croata en
octubre de 1991, los serbios se encontraron frente a un gran dilema. Tenían
evidentemente toda la intención de llevarse el material militar, pero ¿qué
hacer con la biblioteca de 200.000 volúmenes? Los oficiales serbios decidieron quemar
en la hoguera todos los libros escritos en caracteres latinos, considerados por
ellos como no serbios. El humo de los libros que ardieron durante 20 días fue
visible desde muchos kilómetros. En la misma operación, 60 computadoras fueron
destruidas a punta de hacha. (Aparac-Gazivoda,
1993, p.6; Phillips, 1992).
Dubrovnik
Las instituciones de vocación cultural de Dubrovnik,
públicas y privadas, tenían el mayor número de incunables de Croacia y de toda
la región.
La biblioteca del Centro Interuniversitario de
Dubrovnik -lugar de encuentros estivales de científicos del mundo entero-
fundada en 1971 y enriquecida desde 1981 por las contribuciones de muchas
universidades americanas, fue alcanzada por proyectiles incendiarios el 6 de
diciembre de 1991 y devorada por el fuego. La colección de 20.000 volúmenes fue
quemada en su totalidad. Era la única biblioteca en Croacia que utilizaba el
sistema de clasificación del Congreso; el catálogo se perdió igualmente durante
el incendio. Recientemente, la Universidad de Zagreb reconstruyó este
establecimiento.
La Biblioteca Científica de Dubrovnik que fue fundada
en 1950, tenía su espacio en el palacio Skocibuha, construido en 1588. Contenía
200.000 volúmenes, 7.783 títulos de periódicos, 922 manuscritos, 77 incunables
y más de 9.000 libros raros. Estos incunables y manuscritos son parte del
patrimonio mundial. Estaba allí la preciosa colección del Collegium ragusinum
(1559-1764), con sus 13.000 volúmenes de la época de la república de Dubrovnik
(Ragusa). Así como una de las obras maestras científicas, De natura coelestium
spiritum quod angelos vocamus de Juraj Dragisic (1445-1520) impresa en
Florencia en 1499 con la financiación del senado de Dubrovnik. Esta edición
incunable -escrita en Dubrovnik- fue donada a la ciudad por el célebre
arqueólogo Arthur Evans en ocasión de su visita en 1932.
La Biblioteca Científica fue alcanzada por 60 obuses
el 19 de noviembre 1991 y nuevamente el 8 de junio de 1992 por 5 proyectiles
que perforaron el techo en varios puntos y dejaron inestable al edificio
renacentista. El diez por ciento de la colección de referencia y del depósito
legal fueron destruidos.
Durante los tres meses del otoño de 1991, la
directora de la biblioteca, Mirjana Urban, junto con algunos miembros del
personal, dormía en el espacio exiguo del subsuelo. "El edificio estaba
situado en un parque, era muy grande el peligro de incendio después de los
ataques; estábamos allí sobre todo para impedir que el fuego se propague"
nos dijo la señora Urban, que ha perdido a su hijo Pavo, estudiante de 23 años,
el 6 de diciembre de 1991. Pavo perdió su vida en el momento en que documentaba
el ataque más grave de la guerra sobre el casco histórico de Dubrovnik. Las
fotografías de la ciudad museo incendiada -que fueron en encontradas en su
aparato- dieron la vuelta al mundo.
Entre dos bombardeos, el 8 de junio de 1992 las
colecciones más preciadas fueron depositadas en 97 cajas metálicas. Como llovió
torrencialmente durante la noche, todos los documentos se humedecieron. Después
de tres años, los documentos no han podido ser ubicados nuevamente por falta de
espacio adecuado. La condición precaria del edificio, ponía en peligro los
documentos que se encontraban allí. El techo del edificio, que debería estar
refaccionado en breve, está todavía cubierto de papel de alquitrán.
La biblioteca del convento de los franciscanos de
Dubrovnik -fundada en el siglo XIII- es una de las más célebres de Croacia.
Contiene 65.500 volúmenes; entre ellos, 2.106 manuscritos, 206 incunables,
3.547 libros raros y 10.000 partituras musicales. En el otoño de 1991, el
convento recibió una lluvia de 51 obuses de los que tres perforaron el techo de
la biblioteca. Las colecciones, que fueron transportadas anteriormente al
comedor, no fueron tocadas. Sin embargo, falto de fondos para su reparación, el
edificio quedó inestable y la biblioteca, que recibía a investigadores del
mundo entero antes de la guerra, permanece cerrada. En el convento está la
primera farmacia de Europa, de 1317.
La biblioteca del convento de los dominicos -fundada
en el siglo XIII- contiene una colección de 23.198 volúmenes con 239 incunables
y 236 manuscritos. El techo del convento fue perforado el 25 de octubre y el 6
de diciembre de 1991, y nuevamente en mayo y junio del 92. El 6 de diciembre de
1991, el campanario de la iglesia fue perforado por 4 proyectiles. A pesar de
los 23 impactos directos que recibió el convento, la colección de la biblioteca
no fue dañada en forma considerable.
Los archivos históricos de Dubrovnik, que cubren el
período 1272-1808, están entre los más completos de Europa y representan una
fuente crucial para la historia de Croacia y todos los pueblos del sudeste
europeo. Su variado contenido concerniente a las relaciones comerciales,
políticas y culturales de la ciudad-estado con los poderes de la región, atrae
a los investigadores del mundo entero. Señalamos, a título de ejemplo, la serie
Acta Consiliorum que comprende todas las decisiones de los tres consejos que
administraron la ciudad durante 600 años.
Esta serie de documentos es, de la misma manera, una
fuente importante por el estudio de la reglamentación de la salud pública,
particularmente entre los siglos XIV y XVI, cuando la ciudad era pionera en ese
terreno. En la primavera de 1992, una parte de los archivos ubicados en el
palacio Sponza fue alcanzada por proyectiles. El techo de uno de los depósitos
fue destruido por los obuses, exponiendo los documentos del siglo XIX a una
lluvia torrencial. Felizmente, los documentos más antiguos no han sufrido daño.
La ciudad medieval de Dubrovnik, de una unidad
arquitectónica excepcional, es la joya de la costa croata. La ciudad
fortificada, sitio del patrimonio mundial de la UNESCO con el mismo título que
la ciudad de Québec, fue la capital de la república del mismo nombre desde 1358
hasta 1808. Como dijimos, fue en Dubrovnik donde se desarrolló la primera
farmacia de Europa (1317) y se hizo el primer control sistemático de las
epidemias por medio de cuarentenas (1377). Allí nació Marin Drzic (1508-1567),
considerado el Moliere croata. En otoño 1991, la ciudad, apenas defendida por
las fuerzas croatas -prácticamente inexistentes en esa época-, resistió durante
tres meses el sitio de 20.000 soldados serbios.
El peor ataque tuvo lugar el 6 de diciembre de 1991.
Ese día, 800 proyectiles cayeron sobre la ciudad protegida por la UNESCO,
matando a 19 personas e hiriendo a 60. El 60 por ciento de los 854 edificios de
la ciudad amurallada fue alcanzado por ese fuego tan intenso; los techos fueron
los más tocados; ocho mansiones patricias fueron incendiadas y quedaron
solamente sus muros de piedra (Bumbaru, 1992). Justamente en 1991 se habían
terminado los trabajos de restauración que siguieron al terremoto de 1979.
Todo esto pasó en presencia de emisarios de la UNESCO
que habían izado las banderas de las Naciones Unidas sobre los muros de la
ciudad para poner de manifiesto la preocupación de la comunidad internacional
por el patrimonio. Este gesto simbólico no pudo proteger a la ciudad contra un
ataque injustificado e injustificable (Bumbaru, 1992). Según la comisión de
expertos de la ONU la destrucción del patrimonio fue deliberada. Siguiendo la
cronología de los acontecimientos cotidianos, los especialistas demostraron que
los daños infligidos a la ciudad museo de Dubrovnik no pueden en ningún caso
justificarse como de necesidad militar. Así, con respecto al estatuto del
Tribunal Internacional, los ataques en Dubrovnik pueden ser considerados
destrucción y apropiación de propiedad no justificados por ninguna necesidad
militar. (UN, Comisión de Expertos, Anexo XI. A, 1994, p.8).
Balance de los daños en Croacia
Damos a título de ejemplo un balance fragmentario de
los daños sufridos por las bibliotecas de Croacia (Kroller, 1992a; Kroller,
1992b; Lorkovic,1993; Phillips, 1992; Stipevic, 1992). Durante la guerra de
1991 fueron dañadas más de 195 bibliotecas. A la cifra de 11 bibliotecas
universitarias, 3 de investigación, 8 especializadas, 12 conmemorativas, 23
públicas y 138 escolares habrá que sumar aún las cifras de las regiones liberadas
durante agosto de 1995 al igual que las de las regiones todavía bajo ocupación
serbia, que son las que sufrieron los daños más terribles (Aparac-Gazivoda,
1993, p.11).
Después de la liberación, en la biblioteca municipal
de Drnis no se encontraron más que 1.000 volúmenes de los 15.000 con que
contaba antes de la guerra. Allí, donde las colecciones fueron menos tocadas,
las instalaciones sufrieron sin excepción: los techos tambalean, los vidrios
están destrozados, no hay electricidad, ni calefacción y el mobiliario y equipo
técnico no existen más.
Antes de la guerra, Croacia tenía 2.262 bibliotecas:
una Nacional, una de la Academia de Artes y Ciencias, 93 post-secundarias, 6
científicas, 5 regionales, 199 especializadas, 286 públicas, 1.468 de escuelas
primarias y 203 de escuelas secundarias. Y había 1.286 bibliotecarios de
formación terciaria.
Según el Instituto Croata para la Conservación de
Monumentos Culturales, el triste balance de la guerra se elevaba en febrero de
1993 a 801 monumentos individuales y 350 sitios históricos dañados (Consejo de
Europa, Doc 6869, 1993, p.5). El hecho de que los edificios religiosos
representen el 63,7 por ciento de este número dice mucho acerca del tratamiento
preferencial que los serbios reservaron a este tipo de monumentos y excluye
todo hipótesis de daños colaterales (Ver el testimonio de Thomas S. Warrick,
en: Carnegie Endowment for International Peace, 1994.)
Vesna Blazina es Directora de Desarrollo de
colecciones y publicaciones oficiales en la Biblioteca de Letras y de Ciencias
Humanísticas de la Universidad de Montreal.
Tradujo Carmen Vrljicak-Espain
(El resto de este trabajo así como la bibliografía se
publicará en el próximo número)
Juan Pablo II emprendió el 12 de abril la visita a
Sarajevo, su 75 peregrinación apostólica internacional. Sarajevo, "ciudad
símbolo de las tragedias que han afectado a Europa en el siglo XX",
anhelaba esta visita desde hace años.
El mensaje fundamental del Vicario de Cristo fue: la
paz, la amistad, el respeto y la reconciliación entre las poblaciones que
integran ese martirizado país; los cinco años de guerra fueron una presencia
terrible de muerte y destrucción. El Santo Padre no se ha cansado de repetir:
"Es preciso pedir perdón y perdonar" si se quiere volver a una
verdadera convivencia fraterna en Bosnia-Hercegovina, donde están llamados a
entenderse los bosnios musulmanes, los serbios ortodoxos y los croatas
católicos.
En la visita -que duró poco más de veinticuatro
horas- hubo importantes encuentros. Y un acto central que fue la concelebración
eucarística en el estadio de Kosevo bajo el amparo de un crucifijo mutilado por
las bombas.
En este viaje el Papa estuvo acompañado por los
cardenales Angelo Sodano, secretario de Estado; Camilo Ruini, su vicario para
la diócesis de Roma y presidente de la Conferencia episcopal italiana; Jozef
Tomko, prefecto de la Congregación para la evangelización de los pueblos y
Roger Etchegaray, presidente del Consejo Pontificio Justicia y Paz.
Cuando sobrevoló la República de Croacia, el Papa
saludó al presidente Tudjman con un telegrama: "En viaje hacia Sarajevo,
adonde me dirijo en visita pastoral, y mientras sobrevuelo el espacio aéreo de
la República de Croacia, aprovecho la ocasión para enviarle a usted señor
Presidente de la República, al Gobierno croata y al Parlamento, mi deferente
saludo, así como mi ferviente oración por una paz justa y duradera en esta
parte de Europa y por la constante protección de Dios sobre usted y sobre todo
el pueblo croata, tan cercano al corazón del Sucesor de Pedro".
En el aeropuerto Butimir de Sarajevo lo esperaban dos
de los tres miembros de la Presidencia colegiada: el musulmán Alija Izetbegovic
y el croata Kresimir Zubak.
(Como es sabido, después del largo conflicto que
ensangrentó al país, se llegó a un acuerdo de paz según el cual Bosnia sería
gobernada por un triunvirato compuesto por el musulmán Alija Izetbegovic, el
serbio Momcilo Krajisnik y el croata Kresimir Zubak.)
También lo esperaron todos los obispos de Bosnia
Hercegovina encabezados por el cardenal Puljic; el nuncio apostólico msgr.
Francesco Monterisi, el cuerpo diplomático, otros funcionarios y muchos jóvenes
ataviados con trajes típicos.
Dos de ellos, cuyos padres perdieron la vida en la
guerra, ofrendaron al Papa tierra de Bosnia. El Papa besó ese símbolo de luchas
y dolores con mucha devoción.
En el aeropuerto no hubo banderas ni se tocó himno
alguno; solamente se hizo un intercambio saludos, de bienvenida por parte de
Izetbegovic y de agradecimiento por parte del Papa.
El Peregrino se trasladó a la catedral a través de
diez kilómetros que mostraban la terrible guerra sufrida; edificios destruidos,
casas sin techo, ventanas sin vidrios. Mucha gente aclamó al Papa agitando
banderas vaticanas y fotos mientras él los saludaba y bendecía.
En la catedral de Sarajevo, dedicada al Sagrado
Corazón de Jesús, construida en los años 1882-1885, le esperaban los
cardenales: Franjo Kuharic, arzobispo de Zagreb, Jean Marie Lustiger, arzobispo
de París, Miloslav Vlk, arzobispo de Praga, Joaquín Meisner, arzobispo de
Colonia. Estuvieron también el nuevo arzobispo de Ljubljana, Franc Rode, de
Belgrado, Franc Perko y muchos altos dignatarios eclesiásticos de casi todos
los países europeos.
En la catedral, el Papa presidió la celebración de
las vísperas del III domingo de Pascua y participaron sacerdotes, religiosos,
religiosas y seminaristas.
Después del saludo litúrgico, el cardenal Vinko
Puljic presentó a Su Santidad la situación de la Iglesia Católica después de
cinco años de guerra; relató que en las archidiócesis de Vrhbosnia-Sarajevo
había antes de la guerra 528.000 católicos y han quedado solamente unos
200.000. La diócesis de Banja Luka, que antes de la guerra contaba con 120.000
católicos, tiene hoy sólo 50.000. Fueron asesinados seis sacerdotes, una
religiosa y un elevado número de fieles. Y algo semejante ha sucedido en la
diócesis de Trebinje-Mrkan. Además, en todas ellas numerosos santuarios han
quedado destruidos.
El Vicario de Cristo entregó al cardenal Puljic la
lámpara que él mismo había encendido el 23 de enero de 1994, como signo del
compromiso de toda la Iglesia de orar por la paz en Sarajevo y que, desde
entonces, se encontraba en la capilla de la Virgen del Perpetuo Socorro, en la
Basílica de San Pedro. Esa lámpara de esperanza brillará desde ahora en la
catedral de Sarajevo como signo de acción de gracias a Dios por su misericordia
y testimonio de la presencia materna de María en las vicisitudes humanas.
Traducción: Joza Vrljicak
Después, Juan Pablo II se trasladó en coche al
seminario mayor de la ciudad. En él estudian cincuenta y dos seminaristas. Este
centro es uno de los pocos edificios que ya han sido reconstruidos en Sarajevo.
La comunidad del seminario ha podido volver a este lugar el pasado mes de
noviembre, después de cuatro años de exilio en Croacia. En la actualidad el
seminario sirve también de sede provisional de la nunciatura apostólica.
Allí, el Pontífice celebró un encuentro con todos los
obispos presentes en Sarajevo y cenó con ellos.
En la sede del arzobispado, donde pasó la noche, el
domingo temprano Juan Pablo II se reunió con los representantes de la Iglesia
ortodoxa serbia, presididos por el metropolita de Dabar-Bosnia, mons. Nikolaj.
Luego se trasladó al Museo Nacional de la ciudad para
celebrar un encuentro con los tres miembros de la Presidencia colegiada de
Bosnia-Hercegovina.
El presidente Alija Izetbegovic dirigió al Santo
Padre unas palabras de saludo en nombre de la Presidencia y a continuación tuvo
lugar un intercambio de regalos y un encuentro privado con cada uno de los tres
presidentes.
Desde el Museo, el Papa se trasladó al estadio Kosevo
para la celebrar la misa. El Papa se conmovió al contemplar las innumerables
cruces que rodean al estadio en los cementerios improvisados durante la guerra.
En el recinto lo esperaban unas cincuenta mil
personas. El frío era intenso, el viento soplaba con fuerza y nevaba
intermitentemente. Juan Pablo II presidió la celebración ante el mutilado crucifijo
de bronce de Kupres. La multitud lo aclamó. Cuando concluyó la liturgia de la
Palabra, pronunció una homilía.
Cuando oró por los fieles, recordó a las víctimas de
la guerra y a los que lloran la muerte de sus seres queridos; pidió por una paz
duradera; fue un momento en que la emoción se desbordó en los ojos, anudó las
gargantas y estremeció los corazones.
En el ofertorio recibió, entre otros dones, un álbum
con fotos de los sacerdotes y religiosas asesinados en Banja Luka en los años
pasados.
Al final de la misa el Vicario de Cristo bendijo
veintitrés piedras fundamentales de nuevas iglesias.
Terminada la ceremonia, Su Santidad se trasladó
nuevamente al arzobispado de Sarajevo, donde almorzó con los obispos de
Bosnia-Hercegovina: el cardenal Vinko Puljic, arzobispo de Vrhbosna; mons. Pero
Sudar, obispo auxiliar de Vrhbosna- Sarajevo; mons. Franjo Komarica, obispo de
Banja Luka; mons. Ratko Peric, obispo de Mostar-Duvno; y mons. Pavao Zanic,
obispo emérito de Mostar-Duvno.
Asimismo se reunió con representantes de la comunidad
musulmana de Bosnia- Hercegovina y luego con los de la comunidad judía.
Un acto particularmente significativo de esta
peregrinación apostólica fue la entrega, por parte del Pontífice, del
"Premio internacional de la paz Juan XXIII" a cuatro organizaciones
que se distinguieron por su labor de ayuda a la población durante la guerra: la
Caritas católica, la Dobrotvor serbo-ortodoxa, la Merhamento musulmana y la
Benevolencia judía. El Santo Padre escogió esas cuatro organizaciones humanitarias
-vinculadas a cuatro religiones diferentes- para poner de relieve la ayuda que
dieron a la población durante la guerra. Cada organización recibió, además de
un diploma, la suma de cincuenta mil dólares para seguir ayudando a los
necesitados.
Cumplido esto, emprendió el regreso. Fue despedido en
el aeropuerto por los señores Izetbegovic y Zubak, en representación de la
Presidencia colegiada, el nuncio apostólico, monseñor Francesco Monterisi,
numerosos autoridades civiles, el Cuerpo diplomático y todos los obispos de
Bosnia-Hercegovina. El señor Zubak lo despidió en nombre de la Presidencia y de
la toda la población y, a su vez, Juan Pablo II pronunció su despedida.
El Papa partió de Sarajevo a las 18:30, había
arribado a las 17.45 del día anterior.
Extractado de L'Osservatore Romano en español
del 18 de abril de 1997.
En ocasión de la visita pastoral del Santo Padre a
Sarajevo, el embajador croata ante la Santa Sede, profesor Ivo Livljanic, ha
organizado para sus colegas embajadores de otras naciones una breve visita a
otras ciudades de Croacia. Once embajadores con sus familias y varios
periodistas han visitado a Dubrovnik, Makarska y Split en un programa de días
antes de la Misa del Papa en Sarajevo, Después de asistir a la Misa han
visitado a Mostar y Medjugorje. En todos lados fueron recibidos por los
intendentes locales como el público en general. Los embajadores quedaron
entusiasmados por las bellezas naturales, los tesoros culturales y la
amabilidad de la gente.
Glas Koncila, 27 de abril de 1997
Davorin Poric, Buenos Aires, 5 de abril de 1997
Distinguidos señoras y señores:
Nos hemos reunido hoy en nuestro Club Cultural Croata
Argentino para recordar y celebrar el 56 aniversario del establecimiento del
Estado Independiente de Croacia (NDH) el 10 de abril de 1941.
Seguro que para muchos, aun entre los aquí presentes,
en sus corazones y oídos todavía resuenan las palabras del representante del
Poglavnik y comandante superior de las Fuerzas Armadas Slavko Kvaternik que en
la tarde de ese día anunció por radio:
"Pueblo croata:
La Providencia Divina y la voluntad de nuestros
amigos, la lucha por la libertad durante siglos del pueblo croata, el gran
sacrificio de nuestro poglavnik Dr. Ante Pavelic, y el movimiento ustasa tanto
en la patria como en el exterior han permitido que hoy, en la víspera del día
de la Resurrección del Hijo de Dios, resucite también nuestro Estado
Independiente Croata...".
El establecimiento del Estado Independiente de
Croacia (NDH) es el fruto del trabajo y la lucha de la nación croata para
lograr su libertad e independencia.
Los príncipes y reyes de sangre croatas reinaron
sobre el territorio croata hasta la muerte del último rey croata Petar Svacic
en el año 1097. Desde entonces hasta el 10 de abril de 1941 Croacia nunca fue
un Estado independiente y libre.
Fue necesario que pasaran casi nueve siglos y que
corrieran ríos de sangre. Hubo lamentable pérdida de miles y miles de vidas
croatas para lograr finalmente un Estado croata.
Desde la firma del tratado Pacta Conventa en el año
1102 con el rey húngaro Koloman comienza una vida en común, bajo la misma
corona, entre los croatas y los húngaros. En esa unión personal los croatas
tuvieron su Sabor (parlamento) para el dictado de las leyes y para las
cuestiones financieras. Tuvieron un rey común con los húngaros hasta el año
1526. En el año 1527, la corona real croata pasa a manos de la casa austríaca
de los Habsburgo, que regirá al imperio Austro-húngaro hasta el fin de la
Primera Guerra Mundial en 1918.
A través de todo ese tiempo la vida de las croatas en
su tierra no fue ni fácil ni cómoda. Tanto los húngaros como los austríacos
trataron siempre a cualquier precio de dominar totalmente a los croatas.
El sistema feudal que imperaba en Europa y la mayoría
de la nobleza croata atendían y defendían más sus propios intereses y
privilegios que el bienestar de la nación croata.
Recién a mitad del siglo XIX se levantan en
Austro-Hungría las primeras voces de nacionalismos. En el Sabor, recién en el
año 1847 el croata reemplaza al latín como idioma oficial.
En el año 1861 el Dr. Ante Starcevic funda el Partido
del Derecho Croata (Hrvatska Stranka Prava) y busca la autodeterminación de la
Nación croata en base al derecho estatal croata.
El Dr. Ante Starcevic luchó igualmente contra la
germanización y la magiarización de Croacia así como contra la agresión gran
serbia que desde hacía mucho era fomentada tanto por Viena como por Budapest, y
se infiltraba en el suelo, en la economía y en las instituciones croatas.
Para el Dr. Ante Starcevic fue muy claro ya en ese
entonces que solamente un Estado croata, libre e independiente podría ser la
solución para la nación croata.
Son conocidas sus palabras: "Que el húngaro sea
feliz en Hungría, que Austria sea feliz en su hogar, pero sobre todo que el
croata sea feliz en Croacia", y "Aunque Croacia sea solamente una
hora de largo y una hora de ancho, aunque haya sólo cinco croatas, que esos
cinco sean libres y felices".
Lamentablemente la idea del Estado que tenía el que
fuera llamado Padre de la Patria todavía no había madurado en otros partidos
políticos croatas de modo que cuando terminó la Primera Guerra Mundial y fue
derrotada la monarquía Austro- húngara, la nación croata entró por medio de sus
políticos en la creación de Versailles: el reino de los serbios, croatas y
eslovenos, denominada posteriormente reino de Yugoslavia.
La germanización y la magiarización fueron dañinas
para la nación pero mucho más dañina y tremenda llegó a ser la presión del
terrorismo gran serbio yugoslavo. Con la muerte de Stjepan Radic en agosto de
1928, como resultado del atentado en el parlamento de Belgrado, muere también
la así llamada Yugoslavia democrática.
El 6 de enero de 1929 el rey Alejandro Karadjordjevic
anula la Constitución, cierra el parlamento y prohibe toda actividad política.
Al día siguiente, el Dr. Ante Pavelic, que era
secretario del Partido del Derecho, abandona la actividad partidaria legal y
funda la organización revolucionaria Ustasa con el objetivo de luchar contra
Yugoslavia, hasta lograr el establecimiento del Estado croata por medio de
todos los medios adecuados. Inmediatamente después abandona la patria y ya el
17 de julio de 1929 fue condenado a muerte en Belgrado.
Consecuencia del trabajo revolucionario de la
organización ustasa fue la agitación en Croacia llegaron las agitaciones de las
universidades, el levantamiento de Lika (1932) y el atentado al rey Alejandro
en Marsella (1934).
Cuando comenzó la Segunda Guerra Mundial, el
Poglavnik se encontraba confinado en Italia, por pedido del gobierno yugoslavo
de entonces, para impedir su actividad revolucionaria y política.
En esos momentos la situación política en Yugoslavia
era muy crítica. El Regente Pavle Karadjordjevic acepta que Yugoslavia firme en
Viena el 25 de marzo de 1941 su entrada en el Pacto Trilateral.
Pero las fuerzas granserbias dentro del mismo
gobierno realizan el 27 de marzo de 1941 el golpe de Belgrado, reniegan del
Pacto, desplazan al Regente e instalan al menor de edad Petar como Petar II. De
ese modo provocan el ataque alemán sobre Yugoslavia el 6 de abril de 1941.
Ese era justo el momento que esperaba Ante Pavelic
para establecer el Estado Independiente de Croacia.
La proclamación del estado croata ocurrió en el curso
de la Segunda Guerra Mundial, en momento del enfrentamiento de los Estados del
Pacto Trilateral con Yugoslavia. Así Croacia, sin su culpa, pasó a ser parte de
la Europa en guerra, y debido a necesidades del momento histórico, pasó a ser
aliada del Reich Alemán y de la Italia fascista.
Croacia no pudo ser un territorio aislado, en el que
los acontecimientos ocurrieran principalmente como consecuencia de las propias
decisiones, sino que, como ocurrió en muchos otros países europeos, Croacia fue
llevada por la fuerza de las circunstancias a los hechos de la guerra.
Además de eso, ya antes y durante los primeros días
después de la proclamación de NDH, sus futuros aliados, el Reich Alemán e
Italia, tomaron decisiones unilaterales respecto de Croacia, que afectarían a
sus fronteras estatales, así como también respecto del establecimiento de la
línea que separaría los espacios de actuación de las Fuerzas Armadas alemanas e
italianas que estaban en Croacia. Esto provocó dificultades políticas,
económicas y militares.
Este Estado croata sería reconocido formalmente
enseguida por doce estados y de facto por otros tres. Así, tuvo su
reconocimiento internacional, su población, su territorio, su ejército, su
moneda, su bandera y su escudo, es decir, todos los atributos de un Estado
independiente.
La supervivencia de NDH fue amenazada ya desde el
primer día por los chetniks de Draza Mihailovic y por los partisanos comunistas
de Josip Broz Tito. Un rol igualmente mezquino tuvo nuestra "aliada"
Italia, que debido a sus propios intereses ayudó abiertamente el actuar de esas
bandas en perjuicio de la integridad territorial, de la población y de la
economía croatas. Una prueba más de ese rol dudoso fueron los "acuerdos de
Roma" que Croacia tuvo que firmar para lograr el reconocimiento de Italia
como Estado.
A pesar de todas las dificultades, la mayor parte de
la nación croata apoyó y defendió a su estado. El ejército luchó contra la
agresión chetnik y contra los partisanos comunistas que no vieron en ese
momento que destruyendo al Estado croata devolvían a la nación croata a una
segunda Yugoslavia.
El mismo grave error lo cometieron también muchos
supuestos políticos croatas que fuera de la patria, en tiempos de guerra,
apoyaron una línea puramente yugoslava monárquica en vez de preparar el terreno
para que, una vez terminada la guerra, permanezca el Estado croata como tal, y
que libremente la nación croata elija a su liderazgo.
En mayo de 1945 como consecuencia de la derrota del
Reich Alemán, cayó también NDH. Para la nación croata había llegado nuevamente
una noche negra. Miles de civiles y el ejército croata que de modo organizado
se había retirado hasta Austria para entregarse a los aliados, para así
salvarse de la masacre serbo-comunista, fueron entregados en forma vergonzosa,
totalmente desarmados a los partisanos quienes cometieron con ellos el mayor
genocido después de la terminación de la guerra del que se tenga memoria.
Bleiburg, columnas de la muerte, campos de concentración, cárceles, torturas y
matanzas son testigos de esa nuestra tragedia nacional.
Desde ese entonces, quienes tuvimos que abandonar
nuestra patria con nuestros padres para salvar nuestas vidas, constituimos la
emigración política con el objetivo de resguardar el espíritu nacional y luchar
para establecer nuevamente el estado libre.
El gran número de organizaciones croatas de
orientación nacional tales como HOP (Movimiento de Liberación Croata), HNV
(Consejo Nacional Croata), nuevos partidos políticos, sociedades y
organizaciones religiosas por todo el mundo son frutos de ese trabajo.
La segunda Yugoslavia, esta vez comunista, que se
estableció después de terminada la guerra, también fue una prisión para todos
los nacionalistas, especialmente croatas. Lo que no lograron matar en Bleiburg
y en las marchas de la muerte, lo hicieron en vergonzosos juicios populares.
Así mataron o pusieron en prisión o campos de trabajos forzosos a miles de
croatas. Cada intento de despertar la conciencia croata, fue en la patria
rápidamente apagado de forma brutal, como por ejemplo la Primavera croata de
los años setenta.
Después de la muerte de Tito en 1980 apareció
nuevamente en grado mayor la ambición gran serbia de ampliar dentro de
Yugoslavia su poder, que ya era muy grande. El liderazgo serbio, para mantener
su dominio, no puede concebir una Yugoslavia que fuera una unión de naciones
con iguales derechos, sino sólo como una gran Serbia ampliada.
Después del derrumbe comunista en Europa, se llega
también en Croacia a elecciones democráticas en mayo de 1990. En esas primeras
elecciones democráticas la Unión Democrática Croata (HDZ) liderada por el Dr.
Franjo Tudjman obtiene una gran mayoría (94%).
El Dr. Tudjman representa la línea nacional croata y
el día 30 de mayo de 1990 en el Sabor Croata se proclama solemnemente como Día
Nacional Croata. La nación croata expresó su posición claramente: queremos el
Estado croata.
Pero quedaban obstáculos: formalmente todavía existía
Yugoslavia. Se hablaba de mayor democratización, de una Confederación en vez de
la Federación y se hablaba de una Tercera Yugoslavia.
Pero los gran serbios dentro de Yugoslavia vieron su
caída y la pérdida de su poder y de los privilegios de tantos años, así que de
forma brutal y cobarde, sirviéndose del Ejército Popular Yugoslavo atacaron a
Eslovenia y a Croacia con el guiño favorable de las potencias occidentales.
Finalmente se quitaron las máscaras...!
Comenzó la terrible Guerra de Liberación Nacional.
Entonces también aquellos que no creían lo que había sucedido en tiempos de
NDH, ven con sus propios ojos el horror y el incomprensible odio del agresor
serbio. La diferencia entre la guerra en tiempos de NDH y la guerra actual es
que esta vez todos los croatas están unidos hombro a hombro en contra del
enemigo común. El croata no dispara contra otro croata sino que juntos luchan
dentro de su Estado en contra de la agresión serbia.
La agresión finalmente no tuvo éxito y el Sabor
croata proclamó solemnemente la República de Croacia soberana, independiente y
libre, el 25 de junio de 1991. Nuevamente nosotros los croatas, y Dios quiera
para siempre, tenemos nuestro Estado!
Después de la proclamación de la República de
Croacia, después de su reconocimiento por prácticamente todos los países del
mundo, hemos dejado de ser Emigración Política y pasamos a ser una parte de la
diáspora croata.
La República de Croacia todavía necesita mucho de
todos nosotros. No miremos lo que ella nos va a dar, sino pensemos lo que
nosotros le podemos dar. Nuestro deber es trabajar constructivamente para
Croacia, cultivar a sus instituciones para fortalecerlas, respetar las leyes y
trabajar apropiadamente para que la República de Croacia tenga en el mundo
actual el prestigio que realmente merece.
Mi deseo es, y pienso que es el de la mayor parte de
la anterior emigración política, que el 10 de abril de 1941 obtenga lo antes
posible también en nuestra patria el reconocimiento histórico que le
corresponde.
Seguro que hubo muchas omisiones y errores que el
tiempo y la historia calificarán con justicia, pero es cierto que las víctimas
inocentes de entonces y los soldados que cayeron, que dieron sus vidas para
defender al Estado croata merecen, igual que las víctimas de la guerra de
liberación, nuestro reconocimiento y homenaje!
¡Viva el 10 de abril!
¡Viva la República de Croacia!
¡Honor a todos los defensores caídos!
Tradujo: Joza Vrljicak
Marina Baricevic, Zagreb
Una exposición argentina en Zagreb
Hoy tenemos la oportunidad de acercarlos, a través de
esta crónica, a una exposición que nos entusiasmó y a la que, tanto por razones
que hacen a nuestra formación profesional, como por aquellas otras que
transitan sólo senderos emocionales, recomendamos visitar.
Esa muestra, que procede de la República Argentina,
ha sido autoralmente estructurada por el Dr. Isaac Lisenberg y entrelaza, de
una manera auténtica, el tradicional arco de la cultura de ese país desde
tiempos precolombinos hasta nuestros días, o más precisamente y para expresarlo
mejor, desde la cultura precolombina hasta el arte argentino de vanguardia.
Dicha exposición se presenta bajo el título
unificador de "Argentina - Orígenes y Herencia" en los salones del
Museo Arqueológico de Zagreb, institución de severos perfiles científicos que,
como es sabido, no es pródiga en patrocinar exhibiciones colaterales si para
ello no cuenta con valederas razones cualitativas.
Quiso el azar que la apertura al público de la
muestra que nos visita, tuviera lugar en los mismos días en que se celebra el
150° aniversario de la creación del Museo Nacional de Zagreb, que dio origen
tanto al Museo Arqueológico como a los museos Histórico y de Ciencias
Naturales, acontecimiento de significativa importancia para la museología
croata.
Ese aniversario museológico de Croacia toda, o mejor
dicho de Zagreb en particular, reviste caracteres de singular trascendencia,
pues pone en relieve la importancia que tuvo el antiguo Museo Nacional en la
evolución y posterior desarrollo de nuestra ciencia museológica, en la que se
refleja la fuerza de lo tradicional: nuestros orígenes y nuestra herencia
nacional, histórica y cultural, reunida a través de colecciones y de donaciones
particulares.
La libertad del profesionalismo
Quiso la casualidad, como dijimos, que la exposición
argentina aunque planeada de antemano- coincidiera con la fecha en que,
procedentes de prácticamente todas nuestras ciudades, convergen en Zagreb los
integrantes de la plana mayor de la museología croata. Esa fue una excelente
oportunidad para que dicho evento contara con una muy calificada y numerosa
concurrencia, circunstancia que, sin dudas, resultó importante no sólo como un
gesto de cortesía o bienvenida hacia nuestros visitantes, sino también -y más
egoísticamente- porque a través de ella se abrió a nuestros museólogos,
críticos e historiadores de arte, una nueva perspectiva o modelo capaz de fijar
nuevas pautas tendientes a favorecer, dentro de lo posible, el desarrollo de su
propia actividad.
Es sabido que la dinámica y la atracción del espacio
expositivo se consiguen, en definitiva, justamente mediante la condensación de
las dificultades y quizás con su focalización y visualización, así como también
con la interrelación entre el arte moderno y el universo histórico en que se
ubican sus remotos orígenes.
Por eso en la idea puesta en práctica por nuestros
visitantes, que no es nueva, reconocemos la sabiduría de la preparación de las
exposiciones itinerantes, planeadas para exhibir en el extranjero el medio
cultural propio, lo que contrasta con nuestra inverterada costumbre según la
cual ofrecemos al mundo un único aspecto de nuestro arte reciente: los pintores
naive.
De la misma manera, y esta es una impresión a la que
no podemos sustraernos, en la exposición que estamos comentando vislumbramos la
libertad del profesionalismo, porque solamente aquel que domina su profesión es
libre. Y esa libertad se refleja en lo no convencional del acto en sí, cuyo
encanto se basa también en el dominio de la técnica, en su amor al trabajo, a
su vocación y a la cultura nacional, poniendo de manifiesto como expresión de
reconocimiento de peculiaridades nacionales a través del intelecto, la
confianza de la dirigencia política en sus representantes culturales
Enmarcada en esas premisas, la exposición da en el
blanco, pues entusiasma a aquellos a los que está destinada. Tanto es así que
en el Zagreb Cultural ya se ha corrido la voz sobre ella en los mejores y más
elogiosos términos.
Concebida para una gira europea, en cuyo itinerario
figuraba también Zagreb, la exposición "Argentina - Orígenes y
Herencia" llegó a nuestras tierras desde el Museo de Bellas Artes de
Buenos Aires.
En ella se traza un correlato entre las dos partes
inseparables y complementarias que han sido tenidas en cuenta para la
preparación de esta muestra. Una, la relacionada con las raíces históricas,
presenta la fuerza y la belleza de la cultura precolombina, de la cual se
exhiben extraordinarios ejemplares en cerámica, y la otra, la que abarca el arte
contemporáneo, mediante el aporte de cuatro pintores argentinos: los artistas
Elizabeth Aro (1961), Oscar Páez (1953), César Paternosto (1937) y Alejandro
Puente (1939).
Allí puede percibirse la armonía entre los maestros
anónimos y los alumnos famosos; entre origen y herencia, y ubicar el pasado en
el presente en forma de meandros de autoestima cultural, conocimientos e
información.
La cultura precolombina
Partiendo del hecho de que el interés por la cultura
precolombina se ha despertado en Europa hace muy poco tiempo, que ella
anteriormente no ejerció una influencia mayormente importante sobre el arte
europeo y que por eso ha sido tan poco o mal representada en los compendios de
la Historia del Arte, o aislada como es el caso de las mejor conocidas culturas
peruana o mejicana, los eficientes organizadores de la exposición formularon la
siguiente advertencia, tanto en el catálogo como en un texto preparado
especialmente para esta ocasión: "... No existe una cultura precolombina
general. Ese es, en realidad, un concepto didáctico introducido por el conocido
arqueólogo argentino Alberto Rex González, quien reunió, dentro del mismo, los
variados aspectos artísticos de diversas culturas señalando, no obstante, las
variables de sus estilos. Por tal motivo, el concepto "cultura
precolombina" es aplicable también a las características propias de todos
los habitantes americanos anteriores a la llegada de los europeos...".
Es por esa razón que, para poder interpretar
cabalmente la exposición, es necesaria una aclaración previa de lo que se
entiende por "cultura precolombina", poniendo de relieve que ella no
es patrimonio de una sola civilización, sino de varias, y que esas
civilizaciones -que poco o nada conocemos-, surgidas espontáneamente, cerradas,
inalcanzables y ubicadas fuera de las tendencias artísticas y valores
espirituales que otras culturas conocen, poseen sus mundos propios, especiales
y peculiares que difieren de nuestra estética y de nuestra manera de ver las
cosas.
Se trata, entonces del arte de las distintas
civilizaciones diseminadas en el territorio americano, entre las cuales figuran
también, por cierto las que habitaron el suelo argentino, las que dieron forma
a una cultura que, con la fuerza de su expresividad, se proyectó desde el
lejano pasado hasta la peculiar contemporaneidad en forma de inspiración,
momento, fuente, etc., e impregnando el arte se transformó en una expresión
nueva de sentidos modernos y sensibilidad tradicional.
Poniendo énfasis en el adorno
La exposición que estamos comentando y que se exhibe
en Zagreb, está integrada por una selección de más de 100 vasijas cerámicas,
además de objetos trabajados en piedra y en cobre, cuya antigüedad comprende el
período que va entre los años 500 a.C. y 1.500 d.C.
Los objetos expuestos son de distinta procedencia
geográfica y cultural, pero incluso los estilísticamente expresivos, atestiguan
la creatividad de los hombres "de la tierra americana antes de la llegada
de los europeos..."
Entre las cultura cuyos exponentes artísticos figuran
en la exposición, merecen citarse las de Ciénaga, Condorhuasi y Candelaria, las
que abarcan el temprano período de la cultura del Noroeste argentino. Los
adornos y más exactamente los motivos geométricos y las inscripciones
meándricas en la pulida superficie exterior de los vasos y de las vasijas, son
una expresión ilustrada de esas formas rotativas creadas al girar el torno del
alfarero.
Son especialmente expresivos, también, los objetos
cerámicos de las culturas Aguada y Santa María, originarias del noroeste
argentino. La primera de ellas pertenece al llamado período medio y sus
productos cerámicos se destacan por sus finos dibujos de figuras tanto humanas
como de animales, y por sus representaciones imaginativas. Dibujos esos que
frecuentemente han sido realizados en la técnica "Esgrafito".
De ese período se destaca un vaso zoomorfo (500 - 900
d.C.), en forma de sapo.
Por último, las culturas Belén y Santa María, que
también se caracterizan por sus adornos, representan el período tardío, que se
prolonga casi hasta los tiempos de la conquista española de la Argentina.
El arte precolombino argentino, surgido con fuerza a
partir de los descubrimientos arqueológicos, sirve hoy de base temática para la
pintura moderna de ese país. Pero más importante aún que este hecho, es la
convicción de que el arte precolombino es "el precursor del arte moderno,
geométrico, y abstracto".
Lo expresó así el fundador del universalismo
constructivo, Joaquín Torres García, quien en 1934 "... dio forma a un
espacio de creación estética a través del cual la identidad latinoamericana se
convirtió en un acontecimiento vital, en el que el equilibrio, el orden y la
proporción, juntamente con una revisión inteligente y cuidadosa de la
imaginación artística de las culturas históricas, dentro de la nueva corriente
expresiva propuesta por ellos,
La creación reciente
Elizabeth Aro, cuyas obras fueron expuestas tanto en
América como en Europa, César Paternosto, cuyos cuadros se encuentran incluso
en el Museo de Artes Modernas de Nueva York, Alejandro Puente, ganador del
premio Guggenheim y Oscar Páez, nos brindaron, con su presencia en el Museo
Arqueológico de Zagreb, un interesante panorama que nos permitió apreciar,
aunque parcialmente, el arte argentino contemporáneo.
A pesar de que conocemos demasiado poco sobre sus
orígenes, es decir, sobre la cultura precolombina, el enfoque
"aislado" que nos ha sido ofrecido bastó, aun sin que tuviéramos que
recurrir al método profesional comparativo, para que en nuestra memoria quedara
grabada la imagen no sólo del arte pictórico en particular, sino también de
todo el material expuesto, como ser vasos, tazas, máscaras pétreas, campanas de
bronce, etc.
Por todo ello, es dable afirmar que tanto particular
como globalmente, la exposición "Argentina - Orígenes y Herencia" es
magnífica.
Novi List, Rijeka, 17.11.96 (Suplemento Cultural) Traducción: Jasna Bulat
Ante Stamac, Zagreb
Antun Soljan, nuestro escritor más versátil de la
segunda mitad del siglo XX ocupa, por sus incursiones en diversas ramas de la
actividad creativa tanto filológica como poética y narrativa, el lugar más
destacado dentro de la literatura croata contemporánea.
Escritor de poesías, dramas, cuentos, novelas,
ensayos y crítica literaria, no sólo brilló por su vasta producción en esas
disciplinas, sino que también lo hizo como traductor de nota, contribuyendo con
ello a la interrelación de las letras croatas con los mayores exponentes universales
de la cultura escrita de nuestro tiempo.
Puesto que escribió sus obras más importantes en la
época de la "segunda moderna" y, sobre todo, en tiempos de "la
táctica de la liberalización del idioma como estrategia de la conquista de la
libertad", es posible llamar a los años que van de los 60 a los 90
"época de Soljan", y esa es una distinción que merecieron sólo muy
pocos.
Si bien situaciones familiares y enredos tan propios
de nuestro siglo dieron lugar a que Antun Soljan naciera en Belgrado el 1 de diciembre
de 1932, sus raíces familiares estaban en Stari Grad, en la isla de Hvar. Su
niñez la vivió en Slavonski Brod y a la edad de 13 años se trasladó a estudiar
a Zagreb, ciudad en la que, salvo esporádicas estadías en Rovinj, pasó el resto
de su vida.
Su trayectoria en el campo de las letras (crítico,
director de empresas literarias, redactor, antologista, traductor, etc.), lo
muestra como a un cabal profesional del trabajo literario. Un escritor libre
que, independientemente del apoyo estatal, creó y dirigió publicaciones
("Círculos", "Entretanto" y "Escritor") que en
los años 50 y 60 marcaron la vida pública, cultural y literaria croata.
A lo largo de su vida publicó las novelas "Los
traidores", "Una breve excursión", "El puerto" y
"Otros hombres en la luna", así como también cuatro libros de
cuentos, cuatro de ensayos, trece dramas, siete libros de poesías y gran
cantidad de traducciones del inglés, alemán y ruso.
Asimismo dio forma, solo o en colaboración, a varias
antologías de poesías norteamericanas, inglesas y croatas, y se hizo famoso con
publicaciones ligadas a la literatura universal a través de colecciones que
agrupó bajo el mágico número 100. Como por ejemplo "Las 100 obras máximas
de la literatura universal", "Los 100 mejores cuentos, novelas y
leyendas", libros con los que sentó las bases de la cultura populista
croata.
Antun Soljan, cuyas obras fueron traducidas a
numerosos idiomas, pertenece a la pléyade de escritores más significativos de
nuestro siglo. Este hombre, que hizo vida de proletario intelectual y de libre
pensador en tiempos decididamente adversos, falleció en Zagreb el 12 de julio
de 1993. Había vivido 61 años.
Su Actividad Literaria
Al igual que la mayoría de los escritores notables y
de los autores importantes, Soljan comenzó como poeta, disciplina que seguiría
cultivando hasta el final de su vida.
Su poesía es de un estilo peculiar, impregnado de
hondo significado espiritual y sus temas giran alrededor de tres ejes: su
vitalidad personal, la naturaleza y la política entendida como una fuerza cruel
que aplasta el indeclinable impulso libertario del individuo.
Hábil en la construcción de los versos, con
significativa influencia del ritmo y la entonación propios del idioma inglés,
que le era tan conocido, Soljan ordena sus poesías como una fuerte pulsación
rítmica de las partes integrantes de la cadena de la frase dando, a la relación
con la realidad, una vigorosa carga de imágenes y una rima potenciada con
adjetivos, especialmente aquellos que nombran colores.
La poesía de Soljan es, la mayor parte de las veces,
una orquestación colorística del mundo frente al cual sus sentimientos no son
de enemistad, sino más bien metafísicos, y cuanto más madura se torna, más se va
volcando hacia los temas "generales" de nuestro tiempo.
Son especialmente significativas sus poesías "El
lanzador de piedras", "Expreso certificado" y "Mensaje por
Vukovar". En la primera de ellas, se evidencia la fuerza indomable del
individuo; en la segunda, la proyección optimista del mundo respecto de las
jóvenes generaciones venideras, y en la tercera, el mensaje o carta al enemigo,
la amenaza poética con el futuro mundo equilibrado "Pagarán por
Vukovar".
VUKOVARSKI ARZUHAL
Miroljubiv
covjek sam,
a pomalo
vec i star
al vam
velim gospodo,
platit
cete Vukovar.
Satrli ste
cijeli grad,
napravili
grdan kvar,
stog vam
kazem, gospodo,
platit
cete Vukovar.
Da u mojoj
kuci gost
hoce biti gospodar –
ne ide to,
gospodo,
platit
cete Vukovar.
Sto ste htjeli, zlo ste htjeli,
i bit nece nikadar –
zapamtite,
gospodo,
platit
cete Vukovar.
Dugo ce
jos Dunav teci,
platit ce
se svaka stvar –
ja vam
jamcim, gospodo,
platit
cete Vukovar.
MENSAJE POR VUKOVAR
Yo soy un
hombre sereno
que su
vejez ve llegar
pero les
digo, señores,
pagarán
por Vukovar.
La ciudad
la destrozaron
causando
daños sin par
por eso
digo, señores,
pagarán
por Vukovar.
Que el
huésped que yo cobijo
quiera
apropiarse mi hogar
eso no es
justo, señores,
pagarán
por Vukovar.
Todo el mal
que pretendieron
nunca lo
podrán lograr
recuerden
siempre, señores,
pagarán
por Vukovar.
Por
siempre fluirá el Danubio,
por todo
se va a pagar,
yo
garantizo, señores,
pagarán
por Vukovar.
Sobre esta
última poesía, que ha adquirido en Croacia una especial significación y que es
citada frecuentemente por los principales pensadores y por la prensa como
expresión del sentimiento nacional croata, hemos creído oportuno ponerla en
conocimiento de los lectores de Studia Croatica, en una traducción al castellano
del año 1994, de la que somos autores.
En cuanto a su actividad como dramaturgo, puede
decirse que Soljan construye sus textos sobre situaciones controvertidas y
conflictos que, interpretados dentro del entorno de su propia contemporaneidad,
contienen en su interior elementos arquetípicos.
Así en la "Ascención de Galileo" se plantea
el conflicto entre la libertad intelectual y las instituciones autoritarias,
sin tomarse en cuenta la pura verdad histórica. En "La montaña", a su
vez, se pone de manifiesto la imposibilidad de que un individuo moral y
físicamente fuerte, como lo es el Sargento García, pueda llegar a ver cumplidos
los fines que se había propuesto.
De esa especie de enfrentamiento entre el hombre y su
impotencia, representada en forma de mole metafísica enorme e inconmovible,
diría A. G. Simic ("La montaña y yo"): "El debe alejarse sin
apelación y sin perspectivas de comprender el sentido de su alejamiento".
En "El Palacio de Diocleciano", Soljan
presenta al lector la leyenda, basada en la verdad histórica, de la
construcción del palacio del emperador en la futura Split.
Con acertadas pinceladas costumbristas muestra a un
Diocleciano aburrido del poder pero impotente para evitar que los
acontecimientos transformen el palacio, que él habia ideado como un remanso de
paz, en una suerte de pequeño estado organizado, aún más perfecto que el que
había abandonado.
Como dramaturgo, Soljan era un demitificador de los
argumentos preestablecidos, cuestionando todo lo que tuviera apariencia de
pensamiento concluyente.
El hombre de hoy, parece que dijera, incapaz de
evitar enfrentarse con todas las fallas historicas humanas, es la criatura del
error y del esfuerzo inútil. Un esfuerzo que, por su nobleza, debe ser
considerado como su deber ineludible.
Sus dramas, basados en conceptos originarios de ese
género, pero representados por personajes actuales que todos reconocemos,
trasuntan, en sus diálogos, todas las dolorosas sensaciones de nuestros
tiempos.
Es importante consignar que sus obras dramáticas fueron
originariamente escritas para la radio y por ese medio transmitidas. Por ello
es sumamente interesante conocer, a través de su propio testimonio, cómo
encaraba ese trabajo: "Cuando escribo para la radio, muchas veces pienso
en un ciego. Me lo imagino sentado, solo, cubierto con la frazada de su
oscuridad, en su tierra eternamente gris, como en un teatro provincial
abandonado. Sin embargo delante de él, en su imaginacion, se extiende el
escenario del eter completo, y las palabras, como estrellas fugitivas, crean en
el espacio frágiles dibujos semejantes a estructuras de cristal".
Como crítico y ensayista, Soljan se destacó por sus
opiniones y su fuerte e inclaudicable individualidad. En su juventud fue
comentarista literario, especialmente en el campo de la poesía.
Sus juicios eran agudos, a veces crueles,
frecuentemente hasta injustos, pero siempre concordantes con sus principios
estéticos en cuanto a priorizar la forma y rechazar la chapucería y el
tartamudeo poético.
Como director o crítico estuvo al tanto del acontecer
literario croata, especialmente en los años 60, siendo, a la manera de Petronio
en Roma, un arbiter elegantorum. Era ¿para qué negarlo? señor y referente
válido de la poesía croata.
Y sin embargo, Soljan fue más que nada un cuentista,
un especialista de la imaginativa, escritor de la "prosa inventada",
definición que según sus propios términos resumía, en un marco semántico
inteligible, su traducción del vocablo inglés "fiction".
Ya en su primer libro de cuentos cortos aflora su condición
de escritor brillante: "Enviados especiales", tomo con catorce
relatos cuya temática transcurre dentro de la realidad cotidiana de su tiempo,
con argumentos típicos por su forma pero atípicos por su destino, denota la
influencia de Antun Branko Simic.
Con su primera novela "Los traidores",
Soljan hizo irrupción en la primera fila de los novelistas croatas, ganándose
de la crítica el mote de escritor de "prosa informal".
En realidad, "Los traidores" es una novela
sólo por su forma, ya que se trata de una serie de cuentos ligados entre sí por
los mismos personajes (estudiantes, buscavidas, etc.), los mismos lugares
(Rovinj, sus bares y sus casas de veraneo) y la misma temporada (verano,
vacaciones), pero sin que exista entre ellos un nexo narrativo que los
unifique, ni un desarrollo temático común.
En todos los casos se trata de personas que quieren
escapar de la cotidianeidad rutinaria, viviendo sus destinos marginales
abandonados a sus propios planes confusos; planes con los que piensan cubrir
sus pequeñas exigencias diarias de hombres jóvenes.
En 1965 escribió su segunda novela "Una breve
excursión", con el mismo tipo de personajes pero esta vez unidos en pos de
una misión concreta: explorar el terreno de Istria en busca de tesoros
artísticos del pasado.
Esta novela, durante cuyo transcurso el grupo
explorador va desintegrándose a medida que cada uno va encontrando su propio
destino, hasta quedar reducido a una pareja que sí descubre en una caverna unos
maravillosos frescos antiguos, contiene pensamientos alegóricos sobre la vuelta
a los valores originales, que han quedado sepultados en un mundo totalitarizado
e indiferente como el de esos tiempos.
El tema de esta obra causó escozor a las autoridades
de aquel entonces, las que intuyeron el peligro que emanaba del texto y, a la
vez, produjo una gran conmoción pública.
Ese mismo escándalo se potenció, en 1974, con la
publicación de "El puerto" la mejor estructurada y por su
problemática, la más actual novela de Soljan, aunque los críticos durante 30 años
hayan privilegiado "Los traidores" y "Una breve excursión".
El tema es tan filosófico como político, pasible de ser interpretado como un
mensaje alegórico del escritor a los tiempos futuros, o quizás como un amargo
testamento en el que éste refleja su posición frente a la vida.
El héroe de la obra es un ingeniero llamado Slobodan
(libre) Despot. Nombre y apellido que evidentemente contrastan entre sí,
conformando una suerte de imposibilidad existencial; la de ser
"libre" dentro de uno mismo y "déspota" frente a los demás.
La base argumental gira alrededor de la construcción
de un puerto "socialista", en lugar, tiempo y bajo condiciones
inviables, proyecto que privilegia el voluntarismo en su afán por imponerse a
las leyes naturales.
El comienzo de los trabajos -a cargo del ingeniero
Despot- en una aldea costera llamada Murvica y la posterior decisión de las
mismas autoridades que habían ordenado esa obra de abandonar el proyecto,
desencadena una serie de acontecimientos que concluyen con el derrumbe del
protagonista, abrumado por el fracaso, la traición y el alcohol.
La trama está contada con una cronología precisa. Los
personajes se ensamblan perfectamente y la función del relator se destaca por
su objetividad y confiabilidad. El clásico estilo de Soljan está enriquecido
con alusiones y citas de la historia y de la sabiduría general.
Sin lugar a dudas, "El puerto" es la mejor
novela que se ha escrito en Croacia sobre el comunismo: novela que niega sus
presupuestos sociales, prácticos y psicológico-individuales. La crítica oficial
vio en ella la negación del mundo inhumano sobre el cual se basaba su sistema
social.
En 1996 esta novela fue llevada al cine con la
dirección de Tomislav Radic y fue proyectada durante un homenaje que rindieron
a Soljan las autoridades de la Zupanija de Istria, de la ciudad de Rovinj y de
la Sociedad Croata de Escritores, a los tres años de su muerte.
Soljan era un hombre proclive a las posiciones
espirituales, especialmente estéticas, que se apoyan en probados valores
humanos y sociales.
Era un devoto de la literatura croata, por lo que
ella significa como custodia de la riqueza de la lengua y su ininterrumpida
continuidad. Encontraba en esa literatura "lugares" en que se
fusionaban idénticos valores, por ejemplo en Antun Branko Simic, Cvijeta
Zuzoric y Petar Hektorovic, y entre los más nuevos además de Ivan Slamnig y
Slavko Mihalic.
Sereno, incluso en momentos en que tenía conciencia
de lo catastrófico de su tiempo, era partidario de los valores tradicionales,
que él y su literatura heredaron de sus conocidos y desconocidos antecesores.
Publicado en Hrvatsko Slovo, extractado y traducido por Jasna Bulat
La prestigiosa revista italiana de los paulinos,
"Jesús", eligió como personaje religioso del año al cardenal
arzobispo de Sarajevo, Monseñor Vinko Puljic, por corresponderle el difícil
encargo de ser el pastor de una nación devastada. Estos son algunos de sus
comentarios.
Eminencia, ¿cómo era Bosnia en el tiempo de su
juventud? Usted nació en el 45, también esos fueron años difíciles...
- He vivido mi primera infancia en un período marcado
por la grave consecuencia de la Segunda Guerra Mundial, un tiempo muy difícil.
He vivido una fuerte diferencia en mi instrucción; de pasar de la tranquila
vida familiar, en un ambiente religioso, a la escuela que estaba bajo la
ideología del odio hacia Dios, hacia la Iglesia y también hacia la identidad
croata. Hubo diversos niveles de intensidad de la acción ideológica.
Entrando en el seminario, la diferencia fue todavía
más fuerte. También mi maestro fue castigado por no haberme influenciado desde
el punto de vista político. Yo, con mi elección, constituía un fracaso para él
y su superior.
Cuando comencé a usar la sotana, fui objeto de escarnios
y persecuciones. Estaba orgulloso por el hecho de poder sufrir por mi vocación;
en aquellos años, en Croacia, numerosos sacerdotes e intelectuales católicos
eran encarcelados.
¿Por qué decidió hacerse sacerdote?
- Crecí en una familia numerosa en la cual se rezaba,
especialmente al final del día. Fuimos educados en el temor de Dios. La familia
me ha enseñado a amar a Cristo, a la Virgen, y a los hombres.
Un rol decisivo en mi elección tuvo un sacerdote con
el cual he crecido; era muy querido por el pueblo. Simplemente yo decía que
quería ser como él: predicar la bondad, celebrar la Misa y ayudar al prójimo.
¿Cómo madura una vocación, cómo se nutre a través de
los años, en un ambiente difícil como fue el de aquella Yugoslavia?
- En la vocación religiosa de un sacerdote, lo más
importante es el ambiente familiar, porque el primer seminario es la familia.
Allí se aprende a amar el evangelio y a la Iglesia. Una vida familiar de
oración es un medio esencial para una vocación.
De mi experiencia parroquial he aprendido que es muy
importante el sacerdote que dirige a la comunidad a través de su ejemplo y
dedicación. Permanece profundadamente impreso en mi memoria la felicidad de mi
comunidad cuando fui ordenado.
Para la vocación, naturalmente, es importante también
la comunidad del seminario, en la cual debe reinar un sano espíritu de familia.
Toda la dificultad que nacía del régimen comunista
constituyó una prueba extraordinaria para la fortaleza de la vocación, de la
dedicación total a Cristo, a la Iglesia y al propio pueblo.
¿Podría recordar el primer año de sacerdote: su vida,
la vida de su gente, es decir, de los fieles católicos de Bosnia?
- Al comienzo fui nombrado capellán en Banja Luka. El
párroco era un sacerdote que había pasado casi trece años en la cárcel,
injustamente, por supuesto. Su experiencia testimonial con lo que ha vivido en
sus años de cárcel ha representado una gran riqueza para mi vida. También he
sido educado por las confesiones que escuchaba cada día, a veces durante horas.
Así pude comprender a fondo el sufrimiento de la gente.
Muchos practicantes que venían a ser dirigidos eran
espiados por el servicio secreto del Estado. Registraban cuanto se decía en el
confesionario y yo era interrogado y amenazado por la policía, (había informado
de todo esto a mi obispo).
He probado mucho: el miedo y las persecución, pero
también la alegría de ser acogido por la gente como pastor. He podido vivir la
experiencia de llevar con mi vida y mi trabajo un poco de seguridad y
esperanza. La experiencia más bella de comprensión que la gente necesitaba de
mí como sacerdote.
Un momento muy lindo fue el pasado entre los jóvenes.
Recuerdo la historia de uno, hijo de un oficial militar que vino en secreto a
pedirme ser bautizado. Cuando su padre lo supo, se enfureció mucho por no haber
podido darle una buena educación, desde su punto de vista militar y del
comunismo. Juró matarme a mí y a su hijo. Dios lo ha salvado, ahora este joven
es un hombre felizmente casado y un óptimo católico.
¿Cómo es el miedo para un obispo?
- El miedo es un sentimiento natural del cual no está
exento un obispo, sea que se trate de su vida o de la vida de aquellos que
están cercanos.
Estuve muchas veces lleno de temor; en tantos viajes
durante la noche, en las montañas, cuando ninguna luz podía estar encendida.
Muchas granadas explotaron cerca mío; sólo por un don misterioso de Dios estoy
vivo. Pero el miedo es un sentir momentáneo. El amor hacia Cristo, hacia las
almas y hacia la misión son más fuerte que el miedo.
La fe en la moral me ha guiado. El centro de todo mi
esfuerzo y el objetivo de todo lo que hice fue el hombre, en toda su dimensión.
Después el Papa, en medio de la guerra, lo designó
Cardenal. ¿Qué pensó en aquellos días?
- No lo podía creer, estaba confuso. Pero cuando he
visto la alegría del pueblo que sufría, he interpretado la decisión del Papa
como un testimonio o signo de cercanía a nuestra prueba, a la ciudad y al país.
Y he pronunciado mi "conformidad".
¿Qué sucedió verdaderamente aquellos días en torno al
8 de septiembre de 1994, cuando al Papa le impidieron ir a Sarajevo?
- Es difícil con palabras expresar con cuanta
devoción nos preparábamos para recibir al Papa. Habíamos tenido la ilusión de
que el Papa estuviese por las calles de Sarajevo. El Santo Padre no temía por
la propia vida, más sí por la del pueblo que asistiría a la misa en un lugar
abierto y bien visible desde la posición serbia. Aparte de esto el único modo
de alcanzar Sarajevo era llegando por el aeropuerto controlado por las Naciones
Unidas.
Pero el Papa no podía venir contra el parecer del
representante de la ONU. Por esto ha debido suspender su viaje... Y hoy la
situación es similar a la de entonces. La Iglesia, con sus actitudes claras, no
es bien vistas por algunos representantes de la comunidad internacional. Pero
nosotros no podemos renunciar a la defensa de los derechos del hombre.
Maja L. Lukac-Stier
Incluimos
a los húngaros y rumanos en este resumen debido a que éstos se encuentran
rodeados de pueblos eslavos, perteneciendo al mismo mundo cultural.
En la Europa Centro-Oriental los más antiguos aportes
filosóficos se remontan a la Edad Media y provienen de aquellos pueblos eslavos
que estuvieron ligados a la cultura latina. Así ya en 1271, mucho antes de la
fundación de la primera universidad europea del Este en Praga (1348), en
Bohemia se discutía a Aristóteles. Lo mismo sucedía en Croacia, concentrándose
la mayor parte de los filósofos en la ciudad-estado libre de Dubrovnik, ya que
en el resto del territorio las luchas contra las invasiones de los mongoles
(1242) y de los otomanos (1415 hasta el s. XVIII) no constituían un campo
propicio para el ocio y la reflexión filosófica. En Croacia hubo dos conocidas
e inevitables orientaciones propias del medioevo: la dominicano-tomista y la
franciscano-escotista.
Del mismo modo en Polonia, en permanente contacto con
la tradición espiritual de la civilización occidental, latina y cristiana, la
filosofía se desarrolló tempranamente: en la Universidad Jagellónica en el s.XV,
dominaban el nominalismo, el albertismo y el escotismo. El pensamiento del
Renacimiento polaco culminó en la teoría heliocéntrica de Copérnico, base de la
astronomía moderna.
Contrariamente a los citados, en aquellos pueblos
eslavos que recibieron el cristianismo no de Roma sino de Bizancio, tales como
Rusia, Bulgaria, o Serbia, el pensamiento filosófico apareció mucho más tarde.
Esto nos permite afirmar que en el medioevo existía una comunidad espiritual
cristiana, podríamos decir paneuropea, donde el eje principal era el idioma
culto común: el latín.
De este modo, podemos también citar en Ucrania,
aunque recién en el s. XVIII a Skovoroda, máximo exponente de la filosofía
ucrania, quien tradujo a Cicerón, Plutarco, Horacio, Ovidio y escribió gran
cantidad de epístolas, mayormente en latín. Su obra filosófica, ya que también
fue un gran poeta, está constituída por un tratado de moral cristiana y doce
diálogos. La finalidad de su filosofía, si bien tocó la metafísica y la
antropología, es práctico-moral: mostrar el camino a la felicidad. Para
Skovoroda la felicidad consiste en un estado interior de paz, posible de
alcanzar por todo hombre. Su doctrina metafísica sostiene que hay dos
naturalezas en cada cosa: la ideal, interna, invisible, eterna e inmutable y la
material, externa, sensible, temporal y mudable. Este dualismo se extiende a
través de toda la realidad: el macrocosmos o universo, y los dos microcosmos
que Skovoroda distingue: la humanidad y la Biblia. En el macrocosmos la
naturaleza íntima es Dios y la externa el mundo físico. La postura de Skovoroda
con respecto a la relación de Dios con el mundo es panenteísta más que
panteísta. En el hombre la naturaleza interna es el alma y la externa el
cuerpo. En la Biblia la verdad interna es el significado simbólico y la externa
el sentido literal. Siguiendo la tradición patrística Skovoroda interpreta la
Biblia de forma alegórica, sosteniendo que el antropomorfismo divino y los
milagros del sentido bíblico literal son externos y falsos. En cambio, el
sentido simbólíco interno, coincide con la verdad conocida por los filósofos
antiguos que él considera como sus maestros en filosofía: Platón, Aristóteles,
los estoicos, los cínicos y Epicuro. Esta interpretación de la Biblia pretende
reconciliar el conocimiento secular con la fe cristiana.
La filosofía de Skavoroda tuvo poca influencia en los
pensadores ucranios del s.XIX, pero jugó un rol importante en el renacimiento
de la cultura el s.XX. Poetas como Filiansky, Tychyna, Barka, Stus, Chubai,
Kalynets y Drasch son deudores de las ideas y del estilo de Skovoroda.
Entre los checos hay dos figuras descollantes. Una es
Jan Hus (1360-1415) teólogo reformista protestante y heresiarca, teórico de la
liberación nacional. Hus es un exponente típico de uno de los rasgos característicos
del pensamiento europeo centro-oriental: la estrecha vinculación entre la
filosofía y la historia de los pueblos en esas regiones caracterizados por su
permanente lucha por la liberación nacional. La otra figura es la de Jan Amos
Komensky, Comenius, (1592-1670), quien tomó una orientación pedagógico y
socio-política, amplíamente conocida en Europa Occidental. Su Pansophia fue
típica del humanismo barroco.
Volviendo a Croacia, podemos afirmar que hasta el
resurgimiento croata o movimiento ilirio, difícilmente puede denominarse a los
filósofos croatas filósofos eslavos, ya que en su mayoría desarrollaron gran
parte de su obra en centros y universidades de la Europa Occidental. Tales son
los casos de Juraj Dragisic (Gregorius Benignus de Salvatis) s.XV-XVI, que
vivió y escribió en Dubrovnik y fue profesor de filosofía en Pisa. El principal
objetivo de su obra filosófica fue conciliar la escuela tomista con la
franciscana; o Benko Benkovic, s.XV-XVI, llamado el "monarcha
scientiarum", franciscano de Zadar y profesor en la Universidad de la
Sorbona; el dominico Agustín Maljeskovic, s.XV-XVI, oriundo de Dubrovnik,
profesor en Venecia y Bolonia, erudito comentarista de la Prima Pars de la
Summa Theologiae de Tomás de Aquino. En el s.XVI sobresalen tres filósofos de
la familia Gucetic de Dubrovnik: el dominico Ambrosio, profesor en Dubrovnik y
en varias ciudades de Italia; Petar Gucetic, dominico profesor en la Sorbona y
en Lovaina, conocido como "doctor illyricus", y Nicolás Gucetic,
autor de varias obras filosóficas comentando a Averroes. También podemos añadir
a Franjo Petric (Franciscus Petricius) oriundo de la isla de Cres, profesor de
la Academia de Ferrara y de Roma, adversario de la escuela peripatética pues
trataba de demostrar la imposibilidad de conciliar el cristianismo con la
filosofía de Aristóteles, por lo que prefería la filosofía platónica. Tuvo gran
infuencia en Giordano Bruno.
En el s.XVII hubo menos filósofos en Croacia, tal vez
por haberse tranquilizado el campo de las discusiones filosóficas después de la
Contrarreforma. No obstante se destaca Stepan Gradic, de Dubrovnik, consejero
del Papa Alejandro VII y director de la Biblioteca Vaticana.
Es, sin embargo, el s. XVIII el que da a luz al
filósofo croata de mayor renombre en la historia de la filosoía: el jesuita
Rudjer Boskovic, profesor de matemáticas, física y astronomía en Roma y París,
fundador del Observatorio Astronómico en Milán y uno de los más grandes
científicos de su tiempo. Nacido en Dubrovnik en 1711, enseñó matemáticas y ciencias
naturales en Roma, París, Milán y Venecia. Fue nombrado miembro de la Royal
Society de Inglaterra. Influído por Newton y por Leibnitz desarrolló una
filosofía natural que intentaba solucionar un problema muy discutido en su
época: la llamada "acción a distancia", es decir, el problema de cómo
los cuerpos y fuerzas pueden influirse recíprocamente sin necesidad de entrar
en contacto directo. A tal efecto postuló la existencia de "átomos
inmateriales" o "puntos de fuerza", en muchos aspectos parecidos
a las mónadas leibnitzianas, pero también a los "indivisibles" de
Galileo. Tales "puntos de fuerzas" ocupan posiciones determinadas y
se atraen y repelen mutuamente de acuerdo con las distancias, según las leyes
newtonianas. Las leyes que rigen este tipo de atracciones y repulsiones se
aplican no solamente a los puntos de fuerzas individuales, sino también a
sistemas de puntos de fuerzas, esto es, a los llamados "cuerpos".
Extensión y duración son modos de ser de los puntos de fuerza y solamente
"existen" en cuanto tales puntos se hallan en relaciones recíprocas.
El espacio y el tiempo de los que Newton hablaba como "absolutos" son
para Boskovic, a lo sumo, posibilidades de que los puntos de fuerzas se
manifiesten espacial y temporalmente.
Contrariamente a estos pueblos, que por su contacto
permanente con la cultura europea latina, avanzaban a la par de los movimientos
filosóficos engendrados en torno a los centros universitarios más destacados:
París, Roma, Lovaina, Bolonia, etc.; Rusia, que al igual que Rumania y
Bulgaria, recibió el cristianismo no de Roma sino de Bizancio, al principio se
vió aislada de la cultura occidental. Como se sabe, Rusia estuvo bajo el
dominio del yugo mongol, o tártaro, durante largo tiempo, y por lo tanto no
pudo desarrollar su propia cultura filosófica, ni asimilar la civilización
occidental de la Edad Media y del Renacimiento.
Por otra parte, en Rusia como en Bulgaria, durante
esa época dominó el mesianismo. Por un breve lapso de tiempo se creyó que
Tirnovo, capital del segundo estado búlgaro, podría proseguir la gran tradición
de Bizancio. Dado que el Imperio bizantino había continuado la tradición de la
antigua Roma, tras su colapso esta misión iba a ser ampliada primero por
Bulgaria y luego por Rusia. Tales ilusiones fueron acariciadas en la primera
mitad del s. XIII, hasta tanto se produjo la división del país en dos Estados
búlgaros separados, los cuales más tarde cayeron bajo el dominio turco. Fue en
el s. XV cuando Rusia tuvo por primera vez la idea de misión para con el mundo,
asumiendo el papel de continuadora de Bizancio y defensora de la Iglesia
ortodoxa. Los rusos quisieron ser entonces los sucesores del Imperio bizantino,
y la idea de Rusia como centro de la Ortodoxia universal no tardó en verse
desbancada por la idea de Moscú como la Tercera Roma. Ya en 1492 el monje
Philoteus declaraba que hasta el momento dos Romas habían caído, que la Tercera
Roma sería Rusia, y que no iba a existir una cuarta.
La segunda teoría mesiánica originada en Rusia, en el
s. XVII, fue el paneslavismo. La misión religiosa de Rusia ha sido expresada en
su máxima claridad por el pensamiento profético de Dostoievsky al poner énfasis
en la "misión universalmente humana del pueblo ruso".
El más grande de los filósofos rusos de la segunda
mitad del s. XIX, Vladimir Solovyev, también pensó que Rusia tenía un gran
papel mesiánico a desempeñar en el mundo con relación a la unificación política
y religiosa de la humanidad bajo el zarismo.
Solamente bajo el reinado de Catalina la Grande
(1762-1796) penetraron en Rusia, al igual que en los otros países de Europa del
Este, las ideas de la Ilustración francesa, junto con la muy poderosa
influencia del filósofo alemán Wolff.
El surgimiento de la conciencia nacional moderna en
casi todos los pueblos de centro y este de Europa, fue impulsado por las ideas
de la Ilustración, difundidas en la segunda mitad del s. XVIII y principios del
XIX.
Durante esta época ambas partes de Europa, la
occidental y la oriental, entraron en contactos más estrechos, pero sólo los
eslavos asimilaron los valores occidentales. No sucedió en general a la
inversa, salvo en un filósofo como Herder, quien consideró el humanitarismo y
la actitud de amor por la paz como los rasgos más característicos de los
pueblos eslavos.
Prontamente el impacto del pensamiento francés en la
Europa Central y Oriental llegó a ser eclipsado por la filosofía alemana
clásica: Kant, Schelling y Hegel. Esto se notó, particularmente, en las
filosofías checa y húngara. El primer filósofo húngaro moderno fue un kantiano,
Itvan Márton (1760-1831) que en su obra presentó a Kant en latín.
Con celeridad fueron emprendidas las primeras
tentativas de crear filosofías nacionales como la húngara, la polaca, la croata
y la rusa.
En Hungría surgió la "filosofía de la
armonía", basada en Kant. En Polonia aparecen el mesianismo y el
romanticismo expresados en la "filosofía eslava", que definida como
una filosofía de la creatividad soñó con cambiar el mundo, regenerar la
humanidad y restaurar a Polonia. Los principales filósofos de la época fueron:
Cieszkowski, Trentowski, Libelt, Kamienski y Dembowski, todos políticos activos
y reformadores prácticos. Para ellos los filósofos debían prestar oídos a los
poetas y a la voz del pueblo rural, trasladando el lenguaje poético y el de la
gente común al discurso filosófico. Influído por Mickiewicz, el gran poeta
polaco, Libelt afirmó que "el dogma fundamental de la nacionalidad polaca
-y de la nacionalidad eslava en su conjunto- es la creencia en la acción
constante del mundo invisible sobre el visible". Según Libelt "los
espíritus eslavos" están individualizados y encarnados, presentes en la
vida cotidiana, a diferencia del impersonal Geist alemán. No obstante, las
ideas eslavófilas chocaban con la Polonia católica que mantenía sólidos
vínculos culturales con Occidente.
En Croacia, salvo el movimiento ilírico que lideró
Ljudevit Gaj, entre los años 30 y 40 del s. XIX, con el objeto de recrear un
país autónomo, Iliria, dentro del Imperio Habsburgo, y que tuvo repercusión en
la poesía croata como la de Ivan Mazuranic, que creó el mito de una apacible y
bucólica Iliria, símbolo de la armonía y simplicidad feliz, no hubo otras
manifestaciones ni simpatía por la filosofía eslava, debido a la fuerza del
catolicismo práctico y la férrea adhesión a Occidente. Si bien en el mito
ilírico se combinaron motivos eslavos tomados de Herder y del checo Kóllar, la
misma denominación de Ilírico hace referencia al antiguo pueblo que habitaba la
costa del Adriático antes de la llegada de los croatas a la región, que nada
tenían en común con los eslavos.
Por el contrario, las ideas eslavófilas y
antioccidentales cundieron con fuerza en la cultura serbia, imbuída del
cristianismo ortodoxo oriental. Estos motivos antioccidentales y anticatólicos
se hicieron presentes sobre todo durante el período romántico y estuvieron
relacionados con la influencia cultural rusa. Vuk Karadzic es el representante
más destacado de la cultura nativa y patriarcal serbia basada en el mito del
eslavo bueno de Herder, aunque bárbaro y no civilizado, en franca oposición a
los valores europeos clásicos.
Firmemente unido a la filosofía occidental, a
mediados del s. XIX se destaca, en Croacia, Franjo Markovic, primer profesor en
la Facultad de Filosofía de la Universidad de Zagreb, fundada en 1669, y
considerando como el iniciador de la filosofía secular croata. Continúa esta
tradicción Djuro Arnold y la retoma Albert Bazala, considerado como el creador
de la terminología filosófica croata.
En Rusia, la eslavofilia de los años 40 del s. XIX,
cuyos máximos representantes fueron Konstantin e Ivan Aksakov, se transformó
más tarde en una doctrina política de paneslavismo, cuyo "sagrado
objetivo" consistió en conquistar Constantinopla y unificar a los eslavos
bajo la autoridad del zar de Rusia. Ivan Aksakov pasó de la eslavofilia a ser
uno de los principales representantes del paneslavismo ruso. En sus escritos se
encuentran la continua antítesis entre eslavismo y occidentalismo euorpeo. El
paneslavismo ruso empobreció las ideas románticas y utópicas de la eslavofilia,
pues en la práctica era equivalente a la expansión de la dominación rusa
absolutista y zarista.
Pero en la segunda mitad del s. XIX en Rusia renace
la metafísica religiosa en las ideas del filósofo Vladimir Solovyev. Su obra
tendió a reunir creencias religiosas, filósofía pura y diversas ideas sociales
dentro de una perspectiva mundial. Acostumbraba criticar el empirismo, el
positivismo y el racionalismo en defensa del "conocimiento místico".
Siendo un pensador típicamente ruso, se mostró interesado en unir la ortodoxia
al catolicismo y a toda la raza humana. Su influencia se extendió a la dos
primeras décadas del s. XX en el pensamiento de los filósofos Bulgakov,
Berdyaev y Lossky.
En los finales del s. XIX, el positivismo de Comte,
Mill, Spencer y Darwin invadió la Europa centro-oriental. Sin embargo, el único
exponente digno de mencionar por su incidencia en el pensamiento universal es
el sociólogo polaco Gumplowicz, partidario del monismo, del determinismo social
y del darwinismo.
En general el positivismo fue rápidamente desplazado
en esas latitudes por otras influencias como las del vitalismo e intuicionismo.
Bajo la influencia del teísmo de Brentano, Masaryk -filósofo realista y primer presidente
de Checoslovaquia- reaccionó contra el positivismo, convirtiéndose en un
teórico de la democracia y el humanismo metafísicamente sustentados.
En esta exposición, tan limitada en el tiempo,
podemos dividir la filosofía del s. XX en Europa centro-oriental, a vuelo de
pájaro, en tres grandes etapas. La anterior a la Segunda Guerra Mundial, la
posterior a ella y la que se genera a partir del colapso del marxismo.
En la primera etapa podemos afirmar que en todos los
países de Europa central y oriental, con excepción de Rusia, estuvieron
presentes casi todas las corrientes filosóficas occidentales contemporáneas.
Tal vez, como innovadora y original, merece destacarse la Escuela de
Varsovia-Lvov con su sección de "filosofía analítica", anterior a la
británica. Sus filósofos lógicos más destacados son Twardowski, Lukasiewicz y
Tarski. También debe tenerse en cuenta que el "estructuralismo" nació
en el círculo lingüístico de Praga, a fines de los años 20. En Rumania, una de
las naciones más jóvenes de la Europa centro-oriental, aparece el interés por
la filosofía de la cultura y la reflexión sobre el mito, desarrollados por
Lucian Blaga que influyó notablemente en la filosofía de la religión y de la
historia de Mircea Eliade, cuyas obras aparecieron en el exilio después del 45.
Otro exiliado rumano notable, de tendencia
existencialista y nihilista es Emile Cioran. Parafraseando al escritor checo
Milan Kundera: el modelo de la Europa central fue la mayor pluralidad posible
en el mínimo espacio.
Finalizada la Segunda Guerra Mundial se inicia la
segunda etapa filosófica signada por la instalación del marxismo en todas los
países de la Europa centro- oriental. El marxismo y el leninismo, bajo su forma
stalinista, fueron declarados la única filosofía científica por muchos años.
Previamente, en Rusia, ya en 1922, más de cien filósofos (Berdyaev, Lossky y
otros) fueron expulsados, sobreviviendo en el exilio.
Los primeros en liberarse de la versión dogmática del
marxismo fueron los croatas, serbios y eslovenos que integraban el artificial
estado yugoslavo, ya que en 1948 había logrado independizarse de la Unión
Soviética.
El proceso de desestalinización empezó en todos los
países comunistas después de 1956, permitiendo ciertas interpretaciones del
marxismo que buscaron crear una versión humanista a partir de los escritos del
joven Marx. Así los hicieron Gyorgy Lukacs en Hungría, Adam Schaff y Leszek
Kolakowski en Polonia, Karel Kosik en Checo-Eslovaquia y el Grupo Praxis
(Markovic, Petrovic, Kangrga, Bosnjak y otros) en Yugoslavia.
Ciertas tradiciones humanistas lograron sobrevivir en
el silencio, sustentadas muchas veces desde el exterior como las
investigaciones fenomenológicas del checo Jan Patocka, o el movimiento
fenomenológico estético de Roman Ingarden (1893- 1979), discípulo de Husserl,
en Polonia. El movimiento fue esmeradamente proseguido en el exterior y con
gran éxito por Ana Tyminiecka. En Polonia, la fenomenología tuvo influencia
tanto en el marxismo como en el pensamiento católico. Esto último se verifica en
la Universidad Católica de Lublin, donde fue profesor Karol Wojtyla, hoy Papa
Juan Pablo II, y fundamentalmente en el pensamiento del filósofo cristiano
Jósef Tischner.
Durante el período del socialismo en decadencia,
apareció en Polonia un interesante movimiento denominado "filosofía polaca
del encuentro", corriente que asimiló críticamente las ideas de Buber,
Ebner y Lévinas. El principal representante de este movimiento es el ya
mencionado sacerdote Jósef Tischner, promotor de la "filosofía de la
esperanza", tan presente en los actuales documentos pontificios; así como
de la "ética de la solidaridad", fundamento ideológico del movimiento
político- gremial Solidarnozsc.
Finalmente la libertad de expresión suscitada por la
perestroika soviética fomentó el crecimiento del pluralismo filosófico, un
profundo interés por la filosofía occidental y un resurgimiento del pensamiento
ruso de orientación religiosa.
Llegamos así a la tercera etapa del s. XX, marcada
por el colapso del marxismo. Es la década del 90 que aún transitamos y que, por
lo demasiado cercana en el tiempo, no permite aún la decantación necesaria para
una evaluación filosófica. Necesitaremos llegar al Tercer Milenio para poder
realizarla.
Conferencia brindada en la Facultad de Filosofía y
Letras de la Pontificia Universidad Católica de Buenos Aires.
Mirjana Polic-Bobic
Conferencia pronunciada por la Prof. Dra. Mirjana
Polic-Bobic en abril de 1997, en ocasión de la decimotercera Feria del Libro en
Buenos Aires
La intención de esta comunicación puede definirse
como la presentación de una parte de los resultados de la investigación de las
fuentes españolas sobre las relaciones entre aquella parte de Croacia que hasta
los comienzos del siglo XIX formaba y era conocida como la República de
Dubrovnik (Ragusa) y la corona española en el siglo XVI, en el marco de las
relaciones de los españoles y de los Austrias españoles con otras naciones
europeas. Dubrovnik era una forma política de ciudad-estado, muy característica
del Mediterráneo en la alta Edad Media que se perpetuó por mucho tiempo
mientras que otras ciudades estados o repúblicas ya estaban bien integradas en
estados- monarquías grandes. Como bien sabemos, en la época hubo novedades y
cambios en la actitud de los hombres, y de todo orden, es decir descubrimientos
científicos, novedades en los conocimientos geográficos, etc. En el caso
español, se trató del contacto directo con otras naciones y culturas del imperio,
con quienes los españoles mantenían una actitud de libertad e independencia, la
misma independencia que hizo posible una concepción de literatura renacentista
española distinta y más amplia que la italiana. Dadas las circunstancias
políticas que lo hicieron posible: la conquista de las Indias, la gran
movilidad del ejército español así como de los funcionarios públicos y de los
altos cargos del gobierno por Europa, los españoles de la época tuvieron no
sólo de conocer al otro (otro europeo, indio americano), sino también el
privilegio de definirlo, es decir, de moldear decisivamente la opinión o las
dudas propias y ajenas sobre todo lo que estos eran o representaban. La mejor
prueba de ello está en el hecho de que el cuerpo de documentos escritos sobre
la conquista y la colonización (historias, crónicas, relaciones y otros tipos
de discurso testimonial) continuaba suscitando disputas hasta los comienzos del
siglo pasado, más que nada en aquellos segmentos donde se trata de la
naturaleza del otro.
Creo que no estoy equivocada si hago constar que en
este siglo la literatura testimonial española del siglo XVI sigue siendo la
materia preferida para la investigación del sistema de representaciones en la
tradición que data de Huizinga. Y que se expresa como la "...búsqueda del
sentido de una sociedad en su sistema de representaciones y en el lugar que
ocupa ese sistema en las estructuras sociales y en la realidad". Sin
embargo, y a pesar de lo que se ha investigado la documentación española de los
siglos XVI y XVII y la historia cultural del Siglo de Oro, resulta sorprendente
el hecho de que fuera del cuerpo de lo que se ha determinado como la literatura
erasmista no se haya estudiado de manera más sistemática el conjunto, o el
sistema de representaciones que, digámoslo así, "cubren" todo aquello
que era el otro europeo que el español encontraba dentro mismo, o en las
márgenes, del vastísimo Imperio que tan de improviso le pertenecía.
Lo que quedó del territorio croata después de las
conquistas turcas - que en su mayor parte coincide con el territorio nacional
de hoy- pasó a formar parte del imperio de los Austrias, gracias a la decisión
tomada por la nobleza croata en 1526. En el sur del litoral adriático, sin embargo,
independiente del Imperio y cercada por el imperio otomano, persistía la
República de Dubrovnik en su forma de ciudad-estado frecuente en el
Mediterráneo a lo largo de la Alta Edad Media. El período de su independencia
absoluta y de mayor auge se sitúa entre 1358 y 1526, momento en que su Consejo
fue constreñido a entrar en relación de dependencia del imperio otomano, que
entonces se había apoderado ya de los vastos territorios a sus espaldas. El
turco le garantizaba libertad a cambio de un tributo regular muy alto. Un siglo
más tarde, Dubrovnik tendrá que defender su independencia entrando en una
relación similar con el imperio austríaco.
Las relaciones de la pequeña República con la corona
española de los Austrias data justamente del siglo XVI. Es la época en que, a
pesar de la orientación de toda Europa, y de España en primer lugar, hacia el
Atlántico y el Ultramar recientemente descubierto, el Mediterráneo sigue siendo
el "gran protagonista histórico" como dice Braudel, en el cual compiten
las fuerzas y las influencias entre España, la primera potencia occidental y el
imperio otomano, que representa el peligro creciente para todo el continente.
Dichas relaciones presentan un caso sintomático para la red de puntos de apoyo
o de fuentes de información que establece en el Mediterráneo la corona
española. La importancia de esta alianza, de naturaleza semi-secreta como
veremos más adelante, era enorme para la pequeña república. Vinko Foretic, en
su "Historia de Dubrovnik hasta el 1808" demuestra que las relaciones
con los reinos que luego formarían el Imperio de Carlos V habían sido las más
estables desde antiguo. Su alianza con la corona española era mucho más fácil
de mantener bajo una forma estable que con las potencias vecinas, dadas las
pretensiones constantes de éstas de dominarla. Su interés en esa relación
podría resumirse así:
1) La necesidad de mantener un número considerable de
consulados en las "tierras del Emperador" como decían los textos de
aquel entonces, que hacían posible el comercio en el cual se basaba el
bienestar de la República, y la necesidad constante de comprar trigo en ellas,
y
2) La necesidad de llamar la atención de la primera
potencia del mundo cristiano occidental sobre el constante peligro otomano
constante y, consecuentemente, de pedir apoyo; así como también destacar el
hecho de que su posición podía ser utilizada para informar a la corona sobre el
turco e incluso para hacer contactos que no se podían establecer ni mantener a
través de los canales diplomáticos existentes.
Aunque los vínculos (comerciales y otros) entre la
República y la Península datan de la Edad Media, en la década de los treinta
del siglo XVI, justamente entre 1533 y 1543, período que los historiógrafos han
denominado "época mediterránea" en el reinado de Carlos V (cf. Jover,
J. M. "Carlos V y los españoles", Madrid 1975) la política española
empieza a tomar en consideración "el prouecho" -como decían- de la
situación ragusina. En la correspondencia de Lope de Soria, embajador de Carlos
V en Venecia, archivada en la Sección de Estado en el Archivo de Simancas,
encontré una "Referencia acerca de la ciudad de Ragusa y de lo que podría
beneficiar al Emperador" que plantea una posibilidad:
Si vuestra magestad es bien informado de la calidad y
modo de gouierno de la ciudad de Ragusa la qual esta en la parte de Esclavonia
de frente monfredonia de pulla y se gouierna como Republica y es tierra de poco
pueblo y poca jurisdiccion propicua a tierras de esta Republica y del turco y
es bien Rica y tiene harto dinero contado y de sesenta naues que van de
mercantia por el mundo haze tributo al turco de (...) ducados cada año pienso
que fácilmente si compareciesse alli la armada de Vuestra Magestad se
concretaria de hazer el mismo tributo a Vuestra Magestad y se podria hauer dozientos
y aun trezientos mil ducados de alli para ayuda de los gastos que Vuestra
Magestad haze contra los infieles Nuestro Senor guarde la vida de Vuestra
Cesarea Magestad y guie a la monarchia como aquella desea.
de Venetia a (...) de septiembre 1533
Lope de Soria
(Archivo de Simancas. Sección Estado, Leg. 1310, f.
9)
Poco después de esto, empieza el envío constante de
informes de Dubrovnik a la corona española, pero no directamente, sino a través
de su embajada de Venecia, y no abiertamente sino en secreto, y dura hasta los
años ochenta. El primero entre los embajadores españoles que los recibe y
resume, o envía al Emperador tal y como los había recibido, es justamente Lope
de Soria. Por los informes existentes, o referidos y resumidos en cartas de embajadores,
se nota que estos llegaban con cierta frecuencia, aunque en las cartas mismas
en más de una ocasión se menciona o refiere la pérdida o el extravío de alguno
de los informes.
La información requerida era de índole varia: a la
corona le interesaba en primer lugar el movimiento de las tropas turcas, su
fuerza, armamento, el número y la procedencia de los soldados; también en los
encuentros entre las tropas turcas con las tropas imperiales, sobre todo en lo
que en la época se establece como la frontera del territorio croata que quedó
libre, es decir, unido con el Imperio de los Austrias, y el territorio ya
conquistado por los turcos (lo cual a grande rasgos corresponde a lo que hoy es
Bosnia y Hercegovina); además de toda la información posible sobre los cautivos
cristianos en "tierra del turco" como la llamaban, así como también
saber sobre las posibilidades de rescatarlos, sobre la colonización del terreno
conquistado por familias o soldados turcos. Eran materia de estos informes
además la descripción detallada de los lugares que en un momento dado pueden
ser convertidos en plazas españolas (Herceg-Novi, o Castelnovo); el
"ambiente" en el territorio conquistado (los españoles se
entusiasmaron mucho tiempo con la idea de ayudar a los cristianos que vivían en
el territorio conquistado a rebelarse y así reconquistarlo para la
Cristianidad), sobre otros "espías" -así llamaban muy llanamente a
los informantes que trabajaban para otras potencias (sobre todo para los
franceses), implicando así que ellos mismos -los informantes de la embajada
española de Venecia-, también lo eran. Tal vez vale añadir aquí como
contribución a las discusiones sobre el uso del español en toda Europa en el
siglo XVI que con la excepción del primer informante, Marin Zamanja, que escribía
en una mezcla del antiguo dálmata y el veneciano de su tiempo, todos los demás
escribían en español, aunque tan sólo uno entre ellos (don César de la Marra)
tenía ese origen.
Citaré ejemplos:
1. En su resumen de la información de Dubrovnik, que
desde Venecia envía a su Majestad García Hernández, secretario de la Embajada,
en 1560, se dice:
"Malcos bej, sanjaque de la Bosnia, con cuatro
mil turcos, la mayor parte a caballo, pasaron a los (...) de octubre el Rio
Popa (Kupa), en la Croacia, cerca de Zagreb, 30 millas, y entraron en tierras
del emperador, donde hicieron gran daño y presa de cuanto pudieron y volviendo
con ella el día siguiente los rompieron 300 infantes tudescos y otros tantos
caballos, en cierto paso que les habían tomado, y les quitaron la presa, y
huyendo los turcos, hallaron el rio tan crecido de la gran lluvia que hizo la
noche antes, que por pasarlo se ahogaron muchos de ellos, los demas fueron
muertos a cuchillo que de todos cuatro mil no escaparon ciento, hubieron los
nuestros nuevecientos caballos turcos y muchas armas y asi lo refieren personas
que han venido de Trieste, pero con haber pasado esto siete o ocho jornadas de
aqui, no se ha sabido hasta hoy, a Dios sean dadas gracias que ha sido muy
buena nueva aunque todos no huelgan de ella ni la crean (Leg. 1324, fl. 149).
2. En la correspondencia de don Diego Hurtado de
Mendoza, que entre los numerosos cargos que desempeñaba para la Corona de
Italia, sirvió como embajador en Venecia entre los años 1541-1543, se
encuentran observaciones interesantes basadas en los informes recibidos de
Dubrovnik, y ocasionalmente desde otros lugares del litoral oriental del
Adriático. Su informador constante es todavía Marin Zamanja, quien en varias
cartas le advierte sobre un fenómeno sintomático de muchas comarcas fronterizas
de la época cual es el rescate de los cristianos. El fenómeno se describe en el
marco de las consideraciones de Hurtado de Mendoza acerca de la Santa Liga.
Quiero llamar aquí la atención sobre el hecho de que Dubrovnik se menciona
justamente en conexión con esta práctica en el "Viaje de Turquía" de
Andrés Laguna, uno de los libros de viaje imaginario más leídos en la península
en la época:
"Yo escribí en la precedente como el papa habia
hecho toda la instancia que ha podido con esta senoria porque se arme y la
respuesta que se le dio que proveerian en la conservación de su estado.
(...)
En lo que toca a los cautivos no he recibido carta de
Francisco Duarte, hare lo que me escriviere, aunque parece que hablando al
Bayle de esta senoria hay dos inconvenientes el uno que son tan celosos que en
hablar por españoles al turco pensaran que se les ha de romper la paz y el otro
que Barbaroja subirá al doble el rescate y también el bayle querra ganar su
parte quizás seria más conveniente aora que estan en poder de Barbarroja.
Rescatarlos uno por uno por vía de personas bajas.
Soy informado de Marino de Zamano que hay muchos
cautivos en aquel contorno de Ragusa que por no haver un Banco en Ragusi que
salga por los rescates se dejan de libertar y por muchos dineros anzi que con
dos mill de credito salirian muchos a XL y XXX y diez ducados. Guarde Nuestro
Señor y ensalce la S.C.C. persona de Vuestra Merced con mayor acrecentamiento
de Reynos y senorios de Venetia a quatro de agosto
(...)
3. En otro de los resúmenes enviados "A Su
Majestad" por el ya mencionado García Hernández, secretario de la
Embajada, en marzo de 1560, se advierte sobre las bajas en cuanto al territorio
que día tras día sufre el mundo cristiano. Se describe con exactitud las dimensiones
del territorio, distancias entre los puntos perdidos y Venecia, número
aproximado de emigrantes, sus calidades y el provecho que la idea de la
resistencia conjunta al peligro turco, siempre presente en la política europea
del Imperio, hubiera podido tener de ellos.
Por letras de Zara de (...) del presente tiene aviso
esta secretaria que en Lica, y Corbavia, que es un lugar alla en la montana de
la Morlaca confin de Zara han venidas a habitar ocho mil casas de Turcos y se
esperaba otros cuatro mil que serán malos vezinos para la Dalmacia, y Coruatia,
y para la Histria.
(Leg. 1324, fl. 44)
Ciertos gentiles hombres de Zara y de otras tierras
de la Dalmacia me han dicho que passan de quinze mil casa de turcos las que son
venidas a poblar en Lica, y el que lo guia es Malcosbej Sanjaque de la Bosnia,
que el ano passado llegó con seis mil cavallos hasta cerca de Guricia que es
dos jornadas de aquí, el cual les ha concedido algunas exegencias con que
paguen al turco un ducado por casa en cada ano, y dizen que quiere hazer alli
forteza pro ser la mas fuerte tierra del mundo, y que muchos Dalmatinos
subditos de venecianos se han ido y van alla por no se morir de hambre, y que
por esta misma causa se han ido tambien al reyno de Napoles buen numero de
ellos, los cuales haran gran falta a esta senoria por ser la mejor gente que
tiene para su Armada, ni de lo uno ni de lo otro, no lo se da mucho, a lo menos
no lo muestran ellos.
4. La índole de las informaciones que recogían los
ragusinos para los españoles y la insistencia en que se abarque tanto los
elementos políticos y militares como los modelos o casos de comportamiento
cotidiano y las tendencias prevalecientes en él, demuestra una vez más lo
viejas que son las tareas de los servicios de inteligencia. Los informes
posteriores a la batalla de Lepanto, por ejemplo, se centran en lo que pudiera
demostrar o revelar los planes del ejército turco a largo plazo: juntamente en
base a los hechos que a primera vista no tienen conexión directa con la
política.
Leg. 1331, fl. 217:
Por cartas de Ragusa de 24 de marco 1572
Auisan me que dos naues Raguseas, que en Smirri en la
Natolia auian cargado para Ragusa y Liorna, auian saido detenidas por orden del
Turco y hecholas descargar y cargar de telas para velas de galeras y las enbiauan
a Constantinopla.
Que se auia prohibido por el Turco el comercio y
trato de las mercancias de Turquia para Ragusa, no queriendo que ninguno de sus
subditos Turcos ni judios pasassen alli con ellas, ni de alli christianos en
Turquia, aunque hasta agora auia estado abierto aquel paso.
Que entiendéndose en Ragusa que todas las naues y
nauios que se hallauan en Turquia eran retenidas (salvo las francesas).
(...)
Por otra via se entiende que en Contantinopla eran
maltrados los griegos del patriarcado y del monto Santo, leuantandoles los
Turcos que tenian intelligencias con el senor donjuan y auian muerto algunos
dellos por esta causa. La prohibición del comercio se cree hayan hecho afin que
no se entiendan sus cosas como andan. Ni entiendan los cristianos de la Turquía
las fuercas que se aparejan contra los Turcos.
Que se han mandado en el Sangiacato de Bosna,
Cheerlegouina, Scuttari I en otros lugares por publico pregon que ninguno
siegue la hierba la qual se quiere para la cauvalleria Turquesca, la qual se
piensa que pasara para quella tierra, mas que a la verdad no se entiende porque
se ha hecho este pregon.
5. Otro segmento que se sigue con mucho esmero es la
disposición de los habitantes de los países, ciudades y comarcas del Adriático
oriental hacia los españoles. En una de sus primeras cartas a Hurtado de
Mendoza en que se centra en la cuestión de Castelnovo (para nosotros:
Herceg-Novi), que luego se convertiría en plaza fuerte del ejército español,
Zamanja destaca la actitud favorable de la población en la ciudad, en aquel
momento mayormente albanesa: debido a la emigración en masa de los albaneses
después de la ocupación otomana:
Per le cose de castelnouo quantunque sia fato el
posibile so lauorato in uano et se la opera mia non fosse stato interotta da
stefano palacio per lo quale mandai le mie al signor principe doria et al
signor uicire de cicilia significandoli si la qualita castelnouo com del
sterile et deserto paese circunuicino disato ad ogni inpresa et esortandoli che
nel ritorno dela armata doueseno expugnare duracio lo quale senza dubio se
aueria auuto a mano salua et apreso notificami la disposicion dei albanesi
prontissimi al seruicio de sua magesta.
Esa relación entre lo que probablemente fue uno de
los estados más pequeños en la Europa del momento y el Imperio de Carlos V está
suficientemente investigada por parte de la historiografía peninsular y europea
occidental para que podamos juzgar su peso a la luz del conjunto de esos acontecimientos
históricos.
El primero en prestarle atención fue Francisco
Laiglesia en sus "Escritos históricos: 1515 a 1555" (Madrid 1905), en
el capítulo intitulado "Cómo se defendían los españoles del siglo
XVI". Allí se describe la toma de Herceg-Novi (Castilnovo) por parte del
ejército español y la defensa heroica de aquella plaza fuerte. De los
comentarios sobre una serie de acontecimientos causados por la derrota de los
españoles por los turcos se infiere que Dubrovnik había prestado ayuda a los
españoles salvando a los soldados, ayudando a rescatarlos y transportandolos a
territorio cristiano. La confianza sin reservas que la corona española tenía
con la República se comprueba por toda la documentación que Laiglesia escoge
entre el material archivado para dar pie a sus explicaciones. Cita, por
ejemplo, las ordenanzas a Francisco Sarmiento, capitán de la plaza, fechadas el
17 de noviembre de 1538, donde se dice que tiene que mantener contacto amistoso
"...con la ciudad y Republica de Ragusa y con los vezinos y vasallos que
tiene en los lugares y casales de su comarca, especialmente con los que estan
los mas cercanos a Castilnovo y que se den luego a salvaguardias en forma para
que las tengan en los dichos pueblos y lugares de Raguseos y las puedan mostrar
a nuestros soldados y gente de guerra si por alli aportaren para que vean y
sepan que no les han de hazer dano con apercibimiento que si alguno la
quebrantara muera por ello y esta pena se ha dexecutar sin remision alguna en
los delincuentes y desobedientes porque a ellos sea castigo y a los otros
exemplo pues la dicha comunidad de Ragusa son buenos servidores de Su Magestad
en particular y de toda la Santa Liga en general". Más adelante se le
recomienda procurar tener sus inteligencias y buena amistad con los pueblos y
gente principal de los cristianos morlacos y esclavones y albaneses de todas
estas comarcas y de todo este ducado dando a entender a todos la potencia y
beneuidad de Su Magestad y de la Santa Liga y el herror que tienen en estar en
servicio del Turco." (Laiglesia 1905; 551).
La finalidad del análisis que presenta Laiglesia de
la defensa de Herceg-Novi es de orden simbólico: él, que era diputado en las
Cortes, latifundista, gerente del Banco Hipotecario, coleccionista y, como
decía: "un enamorado de la personalidad y de las proezas" del
Emperador (cf. Laiglesia 1905; XI), en 1905 cree que en la España de su tiempo
todavía no ha sido evaluado el período del Emperador ni su política. Combate la
opinión, relativamente difundida pero a su juicio miope, de que España se había
vuelto vulnerable gastando la plata y oro indianos para las "guerras de
Italia" y para su causa europea. Comprende esa parte de la política
española como la defensa de los intereses de la política y la religión españolas
en Europa central, que de esa manera ha dejado a su posteridad una rica
herencia moral y un sentido de honor que impidieron el desmembramiento del país
con el cambio de la dinastía en 1701, y ayudaron a su regeneración bajo Carlos
III de Borbón. Dentro de este marco, la defensa de Castelnuovo sirve como
modelo de conducta ejemplar.
Otra fuente para estas relaciones se encuentra en
"Correspondencia entre España y la Santa Sede" (1918) de Luciano
Serrano, cuando investiga ese segmento de la política exterior de España entre
1565 y 1572. Las relaciones entre la corona española y Dubrovnik se mencionan
en una serie de ejemplos de desacuerdos entre Venecia, la Santa Sede y España
en la materia de la Santa Liga, de donde se infiere lo difícil que fue la
posición de Dubrovnik, y que su destino en más de una ocasión dependía
literalmente de la destreza de su diplomacia. Por poner un ejemplo, diré que en
el resumen de la respuesta del cardenal Granvela y de don Juan Zuñiga,
embajador de la corona en Roma, al rey de España, el 5 de enero de 1570,
encontramos muy clara la referencia a la insistencia veneciana en perjudicar la
posición de Dubrovnik:
"En lo de Ragusa diximos llanamente lo que V.M.
nos escrivia; y los de S.S. estuvieron en que el capitulo quedase como estava
puesto en todo caso; Venecianos en contra, que Raguseos eran tributarios del
turco, davan avisos y navios, y que no eran justo quedasen tan asegurados
ayudando al enemigo y dañando a los confederados. Contradixeronlos los de S.S.
con dezir que si Raguseos eran tributarios del turco, davan avisos y navios, y
que no era justo quedasen tan asegurados ayudando al enemigo y danando a los
confederados. Contradixeronlos los de S.S. con dezir que si Raguseos davan
tributo, también lo havian dado Venecianos; que si davan navios era porque los
tomaba el turco por fuerca; que de los avisos creyan que no los davan mas que
conforme a los que se entiendiesse que hiziessen falta; seria en arbitrio de
S.S. conceder que se procediese contra ellos; y asy se revolvio en que quedaria
el capitulo con anadir que: si a S.S. por justas causas que sucediesen no
pareciese que se huviese de hazer otra cosa contra los dichos Raguseos. (Apud
Serrano 1918-98).
Mientras que los historiógrafos peninsulares analizan
la situación de Dubrovnik en el marco de las relaciones con España, a Fernand
Braudel le interesa la minúscula república y el hecho de que hubiera
sobrevivido siglos después de que el fenómeno de la ciudad-estado desapareciese
del Mediterráneo como forma específica del comportamiento político. Dado que el
centro de su interés en la investigación recae en las categorías y estructuras
que están detrás, y quedan ofuscadas por los acontecimientos, pero que incluyen
en su longevidad también las consecuencias de los acontecimientos, Dubrovnik,
"tanto tiempo en las mismas garras del infiel" -según cita de la
carta de uno de los informantes al rey Felipe II- se le revela como marco en el
cual se pueden encontrar y analizar muchas de las formas de la conducta
política y social características del Mediterráneo. Vale recordar aquí la tesis
de Braudel de que, al contrario de lo que generalmente se piensa, el
Mediterráneo perdió importancia con los descubrimientos en el Nuevo Mundo y con
el cierre de las rutas terrestres hacia mediano y lejano Oriente, justamente
gracias a la política española de refortalecimiento de su poder en el área
mediterránea y de la reafirmación de la influencia del mundo cristiano
occidental allí (que podía realizarse tan sólo gracias a la fuerza militar y
naval españolas), juega el papel tan importante como el Atlántico y el
Ultramar. En este marco Braudel eleva a Dubrovnik a la categoría de una de las
metrópolis del Mediterráneo, no porque fuera centro de poder, porque eso no lo
fue nunca, sino porque durante siglos mantuvo el perfil típico de una ciudad de
Mediterráneo, caracterizada en tantos y tantos detalles por el contacto
indispensable entre los mundos, es decir, las potencias que lo rodeaban. Por
esto tuvo que adiestrarse en el arte de mantener equilibrio en las relaciones
con cada uno de ellos en un juego de acercamientos y distanciamientos
discretos, conservando a siempre su propia identidad reconocible. Arte que el
francés define indirectamente llamando "solución ragusina" a la paz
que firma Venecia con el Turco después de la batalla de Lepanto.
Acerca de las relaciones de Dubrovnik con España,
ofrece un número respetable de pruebas engarzadas en el conjunto de los
segmentos de la vida en el Mediterráneo oriental que investiga: desde el uso de
dinero -investigado en el marco del vaivén de la fortuna de las ciudades en el
Mediterráneo, que, como sabemos, experimentaban altibajos increíbles en tiempo
muy breve- hasta los detalles de la indumentaria, que apunta hacia los
contactos entre los mundos. De manera que se encuentran datos sobre el uso de
la moneda española (el real de a ocho), que invadió Dubrovnik tanto como el
resto del Mediterráneo a mediados del XVI, sobre los numerosos raguseos
educados en España que luego trabajaron para el Emperador en distintas partes del
Imperio, sin olvidar nunca que en cualquier parte también podían hacer algo por
su pequeña república.
Sobre las cartas de despedida de los marineros,
procedentes de la república, en las naves españolas que componían la Invencible
Armada ("Mañana partiremos... Dios sabe quien volverá"). Sobre los
distintos y numerosos informantes españoles en la ciudad, alrededor de 1560,
momentos de gran prosperidad y victorias turcas: "Desde los personajes
encumbrados hasta las gentes más modestas enviaban a Madrid su parecer, y casi
todas coincidían en que el rey no podía contar con las costas de los Estados
mediterráneos sin una poderosa fuerza naval, dice (Braudel, 447).
Pero por encima de la serie de detalles que me atrevo
a decir- siguiendo un principio casi sinestético -componen rompecabezas
magnífico del Mediterráneo, están sus conclusiones sobre aspectos decisivos de
su geografía, de su urbanismo (por ejemplo, se detiene en el análisis de las
características urbanas del pueblo dálmata), de la identidad de la República y
también de lo que llama "la región" que define como la tierra
fronteriza entre los dos dueños del Mediterráneo: el emperador Carlos V y el
"Gran Turco", el católico y el musulmán:
Su catolicismo era una religión de combate frente a
la ortodoxia que amenazaba desde lo alto de sus montañas y frente al inmenso
peligro turco. Si Dalmacia, pese a tantos avatares, era fiel a Venecia, como lo
señaló hace mucho tiempo Lamansky, es porque, por encima de la señoría, su
fidelidad miraba a Roma, a la Iglesia católica. Incluso ciudades como Ragusa
son sorprendentes ejemplos de fervor católico, a pesar de encontrarse tan
próximas a otros intereses, engarzadas a la vez en el mundo turco y ortodoxo,
viviendo, en suma, en medio de pueblos cismáticos e infieles. Sus supuestos
religiosos resultarían tan interesantes de investigar como sus estructuras
económicas. El interés se mezcla -¿Y por qué no?- con los aspectos más
espirituales. Su fidelidad a Roma protege su frontera amenazada, como se vio en
la terrible crisis del año 1571. Y cuando, en el siglo XVII, se produce el gran
repliegue económico después de los esplendores de un Renacimiento que como el
de Venecia y de Bolonia, se iluminaron tardíamente, Ragusa encuentra en la
Iglesia magníficos canales que la llevan por toda la Cristianidad.
De manera que en la imagen del occidente mediterráneo
entre los croatas del XVI de la República de Dubrovnik predominaba la idea y el
deseo de identificación y de perpetuación de su identidad de nación occidental.
Los ejemplos que sostienen esta afirmación son
numerosos y lo que acabo de leer es sólo una parte de un cuerpo de documentos
que lo apoyan. Podríamos escoger otros, por ejemplo, la relación entre la
corona y los uscoques, soldados y comunidades enteras en el norte del Adriático,
ya que hemos mencionado aquí la imagen y el imaginario mencionaré de paso lo
bien que han sido investigados los numerosos pleitos contra las mujeres de los
uscoques en Venecia, por "brujería", en el marco de las
investigaciones de los pleitos contra las supuestas brujas en los siglos XVI y
XVII.
Vale la pena regresar, sin embargo, a la temática de
los avisos e informes ragusinos. Todo lo que allí está y no representa
información política o militar a secas, pertenece a la esfera del imaginario de
los españoles de la época, es más, incluye algunos ejemplos de los temas más
frecuentes, que giran alrededor del miedo al otro (i.e. al turco). Los detalles
entresacados de los informes coinciden en más de un caso con los detalles
concretos en el texto de "Viaje de Turquía", donde el tema del
rescate de esclavos cristianos por vía de Dubrovnik es casi idéntico al relato
de uno de los largos cuentos de Pedro de Urdemalas.
Sin embargo, en esta "nueva geografía
humana" - que es como define Marcel Bataillon en "Erasmo y
España"- las descripciones imaginarias del Dr. Laguna y la de otros
informes no hay prácticamente ninguna descripción acabada del hombre cristiano,
habitante del territorio. Este aparece como soldado, remero, capitán
informante, alguien que tiene que huir de su casa, en suma, como a quien le
está pasando lo que los que reciben los informes no quieren que les pase a
ellos mismos. De manera que, aparte de la suma de los conocimientos que la alta
política tenía sobre la situación en toda la región, en el imaginario que
despunta en estas líneas al territorio y a los habitantes se les percibía, e
imaginaba, como un conjunto de perfiles borrosos y exóticos, distantes y
próximos: eran cristianos como los españoles, pero en la situación dada podían
dejar el serlo, o bien perecer por serlo. Imagen inestable, probablemente no
del todo placentera formada como proyección de todos los miedos compartidos por
la colectividad occidental. Por otra parte, la imagen del territorio occidental
desde el litoral oriental del Adriático concuerda perfectamente con la
imaginación política del momento, en la cual la España de Carlos V se erige
como la única potencia que puede salvar su situación.
Imaginarnos a los hombres de carne y hueso de una
época pasada es tarea difícil y propensa a éxitos parciales. Sin embargo, la
larguísima duración de las consecuencias de los hechos y de las actitudes de
los que vivieron en el pasado, nos obligan a que tratemos de imaginarlos y
comprenderlos. De esta manera podremos comprender mejor nuestra propia
situación y los modelos sociales y culturales en los que nos ha tocado nacer,
vivir y comunicarnos. A todo eso, lo que yo he presentado hoy aquí, es tan sólo
un minúsculo fragmento del mosaico de una época pasada. me encantaría saber si
comparten mi nada modesta opinión que este trabajo ayuda a componer el
rompecabezas del siglo XVI. ¿O no es así?
Tomislav
F. Boric, Trelew
Tal como lo destacó el Profesor Dane Mataic en el N
12 (año 1996) de la revista Matica que se edita en Zagreb, la masonería
en Chile tuvo gran influencia en les principales actividades del mundo político
y económico.
El primer Presidente de la República que no
perteneció a la masonería fue Eduardo Frei Montalva (padre del actual primer
mandatario), quien asumió en 1964.
Como es conocido, los masones reclutan a sus miembros
entre las personas destacadas o pudientes. Como los primeros inmigrantes
llegados desde Croacia eran campesinos o artesanos, no eran considerados por la
masonería como candidatos para ingresar en sus filas. Recién cuando algunos
llegaron a tener cierto poder económico y en especial cuando ingresaron a Chile
algunos contadores, periodistas o profesionales, empezó el reclutamiento de
croatas en las logias masónicas.
Cuando Chile logró afianzar su frontera norte, se
produjo en esa región un importante desarrollo económico; los croatas empezaron
a organizar sus bibliotecas, salas de lectura, sociedades de beneficencia y
culturales con nombre croata. También emprendieron la publicación de un
semanario, que sirvió como nexo con la patria.
Al estallar la Primera Guerra Mundial, se produjo un
cambio en las relaciones comerciales y sociales. En aquella época, en la zona
de Antofagasta un porcentaje importante de la extracción y comercialización del
salitre estaba en manos de croatas; a su vez, los empresarios tenían bajo sus
órdenes a muchos de sus connacionales. Es decir, todos dependían de la misma
explotación.
Debido al conflicto mundial, los ingleses impusieron
el bloqueo que, junto con las medidas económicas, hizo imposible a los
ciudadanos de Austria-Hungría esta comercialización. Los croatas en esa época
eran considerados ciudadanos del imperio austro-húngaro y por ello sospechosos
y posibles enemigos.
Para que no fracase la venta del salitre -en aquella
época principal elemento para la fabricación de la pólvora- fue necesario
encontrar una salida. En vez de continuar con la labor de profundizar el
esclarecimiento en favor del movimiento nacional croata para lograr su plena
soberanía, la acción de un grupo imbuido en la idea del
"yugoeslavismo" realizó una propaganda cuyo fin era el camino a
Belgrado. Así, por los caminos más diversos, se trató de demostrar que los
croatas no eran una nación sino una de las diversas "tribus"
desprendidas de los serbios.
Para obtener rápidamente un resultado favorable,
había que reforzar la acción de reclutamiento masivo en las logias chilenas que
ya actuaban y fundar alguna nueva exclusivamente con integrantes
"yugoslavos". Esto, como lo consigna el Profesor Mataic, se logró en
el año 1917, pero ya desde 1915 se había suprimido el nombre de Croacia en
muchas sociedades y clubes, que desde entonces y hasta el comienzo de la
presente década, llevaban la denominación de "yugoslava". También
lograron excluir de la lista de los enemigos a los empresarios croatas que
tenían en sus manos el comercio del salitre, quienes debían previamente
contribuir al fondo de la propaganda yugoslava y a los esfuerzos bélicos de los
aliados. Esta exclusión se hizo con el apoyo de los ingleses, de quienes
dependían las logias chilenas.
Junto con la propaganda que se realizaba a través de
la prensa chilena y la presión e influencia sobre los inmigrantes croatas, los
masones desde el 12 de diciembre de 1914, habían empezado a imprimir un
semanario bajo el nombre de Pokret. Este impreso vio la luz del día
debido a los esfuerzos de Mateo Skarnic Harazic, masón y propietario de una
imprenta en Antofagasta. Varias fuentes registran que Skarnic trataba de
imponerse en todas las instituciones yugoslavas. Otras fuentes dicen que los
masones lo tenían como la persona visible al tiempo que los demás actuaban tras
bambalinas.
En la página primera del número inicial del semanario
Pokret se daba a conocer que la razón fundamental de la Dirección era
"... dar a conocer a los indígenas su programa y la posición frente al
conflicto entre Austria y Serbia". Más adelante el artículo dice "que
es necesario aclarar ... a cuál raza pertenecemos y de qué nacionalidad somos
parte", para concluir "... somos de raza eslava y parte de la nación
yugoslava". Mientras reduce a los croatas a la categoría de plebe, o sea,
una "tribu yugoslava".
La influencia y el éxito de los masones yugoslavos
(no croatas) no es difícil de entender si recordamos que desde antes de la
guerra, las logias actuaban en las principales ciudades de Chile. Llegaban así
en contacto "hermanados" con políticos, artístas, escritores,
periodistas, abogados, quienes en mayor o menor medida respondían a los
intereses de Inglaterra. Debido a estas relaciones la propaganda intencionada
yugoslava (no croata) recibió un gran respaldo en desmedro de los intereses
nacionales croatas. La idea yugoslava se imponía con medidas directas y
secretas. La presión contra los croatas tomó grandes dimensiones de modo que en
todos los centros se recolectaba dinero para la promoción de los intereses
yugoslavos. Como dijimos, en primer lugar se logró la exclusión de los
principales empresarios del salitre de la lista de los indeseables a los ojos
de Inglaterra, y a continuación de todos los que se declaraban de nacionalidad
yugoslava (no croata). Todos ellos empezaron de inmediato a contribuir
monetariamente a los diversos fondos, bajo el control de los masones yugoslavos
(no croatas).
De manera que había fondos suficientes y ya no se
dependía de la Central de Londres, que siempre había respaldado a Serbia. En
vez de los semanarios Pokret y Yugoslavia, en Antofagasta salió
uno con el nombre de Estado Yugoslavo (Yugoslovenska Drzava), como vocero de la
agrupación Defensa Nacional Yugoslava.
En aquellos años afluyeron grandes sumas de dinero en
las ciudadas de Antofagasta y Punta Arenas, según lo atestigua la fundación del
Banco Yugoslavo. Las nuevas condiciones económicas permitieron también aumentar
la propaganda yugoslava. Se convocaron congresos y reuniones, donde se reunían
personas alejadas entre sí tres mil kilómetros y aún más. Se enviaban
delegaciones a los Estados Unidos, a Europa y a diversos países de América del
Sur. Se ayudaba a la Cruz Roja serbia y montenegrina, a la Defensa Nacional
Yugoslava, al Comité Yugoslavo con sede en Londres, se apoyaba monetariamente y
se reclutaba voluntarios para el ejército serbio- yugoslavo, para la prensa,
etc. No existen datos fidedignos sobre la suma que consiguió reunir la
propaganda yugoslava de aquella época, pero es seguro que llegó a contar varios
millones de libras esterlinas.
Las reuniones, congresos, asambleas y los contactos
personales representaban una permanente presión sobre los croatas radicados en
Chile. Los aportes pecuniarios (que eran publicados) y las expresiones públicas
ligaban a muchos a los intereses yugoslavos. Por ello, no debe extrañar que en
Chile se llegó a la virtual desaparición del nombre croata y su sustitución por
el de yugoslavo.
Afortunadamente, los modernos medios electrónicos, en
primer lugar la televisión, dieron oportunidad a la actual generación de
conocer la verdad. Se pudo ver y oir la diferencia que existe entre los croatas
y los serbios, se pudo ver y oir quién es el agredido y quién es el agresor. Se
pudo comprobar que Yugoslavia era un engendro que servía sólo a los intereses
serbios. No fue necesario emplear elementos fuera de la ley para destruir las
mentiras serbio-yugoslavas que antaño tuvieron tanto éxito.
Es necesario recordar que la logia Pokret N
54, que desde 1917 agrupó a los masones yugoslavos (no croatas) de la zona de
Antofagasta, no actuó desde su fundación en provecho de Croacia, porque:
1.- Después de la debida obediencia a los postulados
de la masonería, su meta estaba dirigida al engrandecimiento de los sueños
yugoslavos y al cumplimiento de los intereses gran-serbios, en detrimento de
las aspiraciones croatas;
2.- Ignoraba en forma sistemática la nacionalidad
croata y jamás se preocupó por los derechos del pueblo croata y de su cultura;
3.- Actuaba en favor de la estructuración del estado
de Yugoslavia bajo la égida de Serbia y de su dinastía;
y porque durante
4.- la Segunda Guerra Mundial apoyó a los chetnik
serbios y después a los partisanos, favoreciendo a la propaganda gran serbia
contra el pueblo croata.
Debemos estar agradecidos a Dios y a los combatientes
croatas que pusieron fin a la agresión yugoslava y que todas las instituciones
que otrora fundaron los inmigrantes croatas lleven ahora su nombre nacional.
Todos los clubes, sociedades de socorros mutuos, centros culturales,
deportivos, de bomberos, llevan de nuevo el nombre croata y en sus fachadas
enarbolan la bandera de Croacia. También las plazas, calles, y escuelas que las
autoridades chilenas habían denominado con el nombre de Yugoslavia, hoy llevan
el nombre de Croacia.
Publicado en la revista Matica N 3 - Año 1997.
En la colección de manuscritos de la Biblioteca
Británica de Londres se encuentra un códice latino con la vida de San Jerónimo
escrito por Marko Marulic. El título completo de este texto latino traducido al
castellano es: Vida de San Jerónimo presbítero que compuso Marko Marulic con
agregado en forma abreviada de los milagros que de él cuenta el obispo de
Nazaret Cirilo.
El texto está escrito muy prolijamente en el ritmo de
22 renglones por página, sus títulos están escritos con tinta roja que en
algunos lugares ya ha perdido un poco de color.
"La vida de San Jerónimo" es sin duda el
texto más importante de este códice, pero hay también en él algunos textos más
cortos, a la biografía precede una poesía dedicada al Papa León X.
"La vida..." está dividida en varias
partes: una introduccción, la vida, un relato sobre los milagros del Santo
después de la muerte y la lista de sus obras. El manuscrito termina con dos
textos conocidos en la forma como los publicó Ivan Lucic en la conocida obra De
regno Dalmatiae et Croatiae (Amsterdam 1666) como una discusión sobre el origen
de Jerónimo y una poesía en honor del Santo.
Marko Marulic había terminado la biografía en
primavera del 1507, de esto da testimonio la carta que Marulic ha dirigido al
notario veneciano Jacobo Grassolari. Es difícil saber por qué esta obra no fue
nunca impresa, por qué Marulic desistió de su intención de editar la obra que
le era tan cara. Darko Novakovic que preparó la Editio princeps de este códice
londinense, piensa que Marulic desistió a causa de que en Basel en 1516 Erasmo
de Roterdam había publicado las obras completas de San Jerónimo y que en el
primer volumen está la vida del Santo, que el gran humanista había escrito.
Nos preguntamos cómo este manuscrito de Marulic, que
en 1524 se encuentra en el convento de los dominicos en Split, ha llegado a The
British Library en Londres. Cuando al final del siglo XVIII Split fue dominado
por una gran peste, el convento dominico fue transformado en lazareto y nuestro
códice llegó en 1790 a Ferrari a mano de Francesco Mainardi y después a manos
de la familia de libreros Rodd, a los cuales el Museo Británico lo compró en
una subasta en 1850.
Es importante recalcar que este manuscrito es único
(codex unicus) y autógrafo de Marulic, Al final hay que mencionar que el
científico inglés de Oxford John Case en su disertación jurídico-política
Sphaera civitatis, Oxford 1588 nombra a Marko Marulic al hablar sobre la
literatura latina.
Branko Franolic, Londres
Por tercera vez fue entregado en Zagreb el premio
anual de parte de INA (industria naftera) y del Club Cultural Croata. El premio
se otorga a las personas meritorias en promover la cultura croata en el mundo.
El primer premiado fue el profesor francés Dr.
Charles Béné, por sus investigaciones y disertaciones sobre el "padre de
la literatura croata" Marko Marulic. Para el año 1995 fueron premiados el
profesor Ivo Sanader y el profesor Ante Stamac por la antología "La hora
del horror".
A fin del mayo de este año se premió al destacado
filólogo, profesor, escritor y conferencista Dr. Branko Franolic por promover
durante varias décadas la verdad sobre la historia e idioma croata en el mundo
intelectual del Occidente.
El Dr. Franolic reside en Londres con su familia,
pero es muy conocido y estimado en toda Gran Bretaña, como también en Francia,
Estados Unidos y Canadá. Escribió hasta ahora diez libros y muchísimos ensayos,
disertaciones y estudios que fueron publicados en numerosas revistas y
publicaciones científicas. Como destacado conferencista, es muy conocido en
varias universidades como también en las más importantes radioemisoras.
El premio le fue otorgado sobre todo por su gran obra
(volumen de 246 pág.) intitulado "Books on Croatia and Croatians Recorded
in the British Library: General Catalogue, Vol 1" donde se presenta la
respectiva bibliografía en doce idiomas. Este primer tomo contiene datos sobre
unos dos mil libros impresos, empezando por guías turísticas, manuales hasta
biografías y relatos sobre croatas en el exterior. Este libro fue editado con
colaboración del Centro Informativo Croata, Zagreb. Se están preparando dos
tomos más de la misma obra.
Es también muy meritorio su trabajo de los últimos
años para que se introduzca en Bibliotecas y otras Instituciones londinenses
libros sobre el idioma croata y su historia.
Studia Croatica cuenta entre sus distinguidos
colaboradores, desde hace varios años al profesor Dr. Branko Franolic y al
profesor Dr. Charles Béné.
Carmen Vrljicak-Espain
El palacio contempla, oye y habla. A lo lejos, mira
el azul del Adriático; no es creíble ni descriptible, pero allí está.
De cerca, el palacio escuchó la vida en la morada del
emperador, las intrigas, los poderes, los amores, los temores... Hoy la ciudad
late igual en los amores, las disputas, los dolores y los trabajos. La parte
obscura y la intelectual, la vida ligera y la artesanal, la miseria y la
gloria; todo lo contiene el palacio de Diocleciano.
Desde Split, puerto croata, inconmovible el palacio
contempla al mundo desde hace mil setecientos años.
DORA es un regalo excepcional; esta es la acepción
que los antiguos griegos dieron a eso que a veces los dioses hacen
exclusivamente para nosotros.
En 1991, en el marco de la agresión serbia, se formó
con ese nombre una fundación para apadrinar a los niños dañados o huérfanos de
guerra. DORA creó un sistema de padrinazgo por el cual desde el extranjero las
personas pudieron ocuparse de los niños asistiéndolos en lo material y en lo
espiritual; fue un buen hallazgo. El padrinazgo se diferencia muy bien de la
adopción; lo que quedó claro es que los niños no iban a salir de su país. Por
el contrario, recibirían encantados las visitas de sus padrinos.
La ayuda material se canalizó a través de una cuota
base mensual de 50 dólares que llegaban a su destino por medio de la
organización. Este compromiso se mantuvo mientras fue necesario y mientras los
padrinos pudieron cumplirlo. Muchos de los niños que fueron beneficiados en su
momento y por mucho tiempo, hoy tienen encausada su vida. Algunos han cumplido
ya los 19 años -el límite de tiempo para esta ayuda- y en algunos casos las
madres han encontrado trabajo y pueden sostenerlos. Por todo esto, ya no es
necesaria tanta asistencia como fuera al principio y ha decrecido
considerablemente el número de apadrinados. Aunque en las regiones rurales, se
sabe que aún siguen necesitando ayuda.
DORA ha cumplido así de una manera excelente y
organizada con un objetivo nobilísimo, "funcionó maravillosamente"
dijeron sus responsables en Buenos Aires.
Esta iniciativa tuvo éxito en muchos países del
mundo.
En la Argentina DORA tuvo una repercusión entrañable;
fueron muchos los que respondieron al pedido. Desde aquí se apadrinaron unos
200 chicos; entre los padrinos hubo croatas argentinos, algunos de viejas
inmigraciones y muchos argentinos sin vínculos con Croacia.
"Es nuestra intención seguir trabajando mientras
quede algún padrino" piensan en DORA Argentina, ya que actualmente hay aún
unos cincuenta y cinco apadrinados. Cuando termine esta etapa "haremos
otras cosas", como apoyar las tareas de los franciscanos en Medjugorje
donde construyen casas para los que niños que han quedado sin padres, dijeron
los colaboradores de DORA.
Concreta, organizada y eficaz, la acción llevada a
cabo en Croacia, configuró una administración excelente y duradera. Allí las
responsables de DORA fueron la señoras Tuga Tarle, la señora Visnja Jaksic y la
señora Granic que actuaron en colaboración con otras personas.
En Argentina, los colaboradores de DORA manifestaron
"fue una tarea muy linda, se pudo ayudar mucho". Entre los aportes
realizados se cita la compra de dos aparatos que registran la respiración de
los bebés dentro de la incubadora para un hospital de Zagreb. En la Argentina
los colaboradores más cercanos de DORA son Melita y Marija Stegnar, Marija
Fuduric, Mario Markulin y Dragica Adzic.
De una manera similar funcionó SPASITE DJECU
"Salven a los niños" que apadrinó niños con un compromiso acotado en
solamente un año.
Carmen Vrljicak, mayo de 1997.
Segunda en el mundo por su tamaño, la Exposición del
Libro recientemente ha finalizado en Buenos Aires. La Feria del Libro
Internacional fue también enriquecida con nuestra Embajada en Buenos Aires, el
Ministerio de Cultura de Croacia y la activa colaboración de la Comunidad
Croata local. La larga cercanía (en décadas) entre Croacia y Argentina, gracias
a nuestros emigrantes, siempre fue sólida.
En el stand croata no sólo se expusieron libros sino
también material turístico e histórico que atrajo a numeroso público (hasta a
los más jóvenes) todo hasta la media noche.
Después de la exposición de motivos croatas, los
delegados de Croacia estuvieron presentes en el original desfile de trajes
nacionales, desde Eslavonia y Dalmacia hasta Sestine, como no se ha visto en nuestro
país. Los jóvenes croatas argentinos vistieron los trajes de la patria, que en
la lejana diáspora mantuvieron cuidadosamente hasta el día de hoy.
La vicerrectora de la Universidad de Zagreb, la Prof.
Dra. Mirjana Polic-Bobic, sorprendió al auditorio con su conferencia sobre la
Relación de Croacia con el Reino de España en el siglo XVI . Cabe recordar que
la conocida hispanista disertó en perfecto castellano. Además, y junto con Ivan
Kusan, y bajo la coordinación de la Dra. Celina Lertora Mendoza, participó en
la mesa redonda sobre las fronteras idiomáticas de Europa.
Con la ayuda de un traductor del idioma inglés,
también escritor, el Sr. Kusan disertó sobre la Literatura Infantil y los
Medios de Comunicación, junto con colegas argentinos.
Los invitados de Croacia además de la participación
en esta feria, dieron conferencias en la Universidad Católica Argentina y en el
SADE (Sociedad Argentina de Escritores).
Dieron también una conferencia en croata en el Club
Cultural Croata-Argentino sobre la Literatura Croata Contemporánea, para el
público croata. Especial atención fue brindada a la presentación del libro de
Sanader-Stamac U tom strasnom casu en idioma castellano. Los croatas compraron
ejemplares en idioma croata para sí, y en castellano para sus amistades. Este
fue un excepcional encuentro con los coterráneos que esperaron durante décadas
renovar el contacto con su patria y visitarla o prepararse para regresar a
ella, aunque sea en los últimos años de vida. Por la cantidad de preguntas, pudo
sentirse que no perdieron el interés, ni siquiera por su literatura.
La última noche fue proyectada la película Vukovar
regresa a casa de Branko Schmidt, que conmovió al público croata-argentino.
La exposición de libros croatas en la XXIII Feria
Internacional del Libro, se mostró como un eslabón importante, en el lugar
indicado, en la cada vez más sólida relación entre Croacia con el mundo
hispano, especialmente Sudamérica.
Tradujo: Joza Vrljicak
Periodista: Cuando cree Ud. que se descubrirá toda la
verdad sobre la tragedia de Bleiburg?
Tolstoi: No descubrí una cifra final. Considero que
el propio gobierno de la República de Croacia debería elaborar, por más que sea
una ardua tarea, un listado de las victimas, incluyendo estudios demográficos y
la investigación de tumbas. Según las informaciones de las que dispongo, el
gobierno croata todavía no conoce el número exacto de las victimas. Pero ahora
que Croacia es libre, este tema debería resolverse a la brevedad. En los
archivos mundiales no descubrí ninguna cifra, pero para ser sincero, no me
sorprende.
Periodista: Por que?
Tolstoi: Porque en la época del régimen comunista
Bleiburg era un secreto. Todas las cifras "occidentales" inclusive mi
libro, eran tan sólo una evaluación, pero no reflejaban el verdadero estado de
cosas. Unicamente la actual República de Croacia puede ofrecer cifras
fidedignas sobre las víctimas de Bleiburg. Pero, la tragedia de Bleiburg no se
mide solamente en números- que son sólo una componente y que saldrá a la luz
con el tiempo. Las narraciones de las victimas que han sobrevivido Bleiburg son
más o menos conocidas, pero lo que me interesa en particular y desconozco, es
la relación que hubo entre Tito y los ingleses, es decir cuales eran sus
acuerdos, que en aquel entonces eran un secreto de estado. No sé cuales eran
exactamente sus acuerdos, pero evidentemente el régimen de Belgrado impedía el
acceso a la documentación. Mientras en Serbia no haya un gobierno libre y
democrático, este aspecto fundamental de la tragedia de Bleiburg quedará sin
revelar.
Vecernji list, 12/05/97.
Señor Director,
Muchísimas gracias por enviarme su revista Studia
Croatica, la cual durante varios años he tenido el placer de leer, cuando
vivía en Chile. El número 133, que recibí, es para mí especialmente muy
interesante, pues los artículos esta vez, se refieren casi completamente a la
historia cultural de Croacia y al estudiarlos veo que hay muchísimas coincidencias
entre la historia cultural de Croacia y la de Polonia, pues ambas naciones
aparecen al final del primer milenio de la era cristiana; ambas naciones
reciben la fe cristiana desde Roma; Croacia, tal vez, al final del siglo VIII y
Polonia en el año 966. El primer rey de Croacia Tomislav (910 - 928),
reconocido por el Papa como tal y el primer rey de Polonia, Mieszko (quien
murió en 992) también está reconocido por Roma, a pesar de que ambos tenían
contactos con Bizantium.
Agradeciendole una vez más, le saludo muy
respetuosamente
Miguel Poradowski, Pbro., Wroclaw, Polonia, el 22 de
abril de 1997.
Pasaron ya seis años desde la muerte del escritor,
pintor y escultor croata Ilija Juric, quien pertenece a esa generación de
croatas activos, que pasaron su juventud en la lucha constante en defensa de
los derechos de la nación croata y quienes se pusieron a total disposición de
su Estado Croata, cuando resucitó en 1941.
Ellos no cedieron ante las dificultades y los
sacrificios.
Así se entiende entonces el acento patriótico que le
inspira en todos sus trabajos literarios, por lo que se hace cercano y querido
para todos los patriotas sinceros.
Ilija Juric nació el 19 de julio de 1913 en Konjic
(Hercegovina). Cursó sus estudios secundarios en Sarajevo, y estudió pintura y
escultura en Zagreb.
Todavía siendo estudiante secundario colaboró en
periódicos juveniles. Su primer cuento exitoso, "Staro ralo" (Viejo
arado) apareció en el periódico "Omladina" que publicaba en Zagreb el
Pododbor (rama local) de Matica Hrvatska, el año 1936.
Publicó además poesía, cuentos y artículos en las
siguientes revistas: "Mladost", "Mlada Hrvatska",
"Sarajevski Novi List", "Jutarni List", "Nas
Put", "Spremnost", "Hrvatska Revija", "Croacia",
"Danica", "Hrvatska" y "Drina".
Publicó la novela "Mi ostajemo" (Nosotros
permanecemos) (Sarajevo 1944), "Kraljicino Vrelo" (Buenos Aires 1952)
y "Vidovnjak" (Buenos Aires 1984), el cuento "Drina Zove"
(El Drina llama), el poema "Zenidba Muje Grabovice", así como las
obras de teatro "Fazlagic kula", "Fiskultura' y "Za
obraz".
En tiempos del Estado Independiente de Croacia (NDH),
Ilija Juric dirigió en Sarajevo la revista "Nas put".
En el año 1945 deja a su esclavizada Patria Croata y
con miles de sus hermanos sale a la emigración, primeramente a Italia y luego a
la Argentina.
En idioma castellano publicó el cuento
"Ilusiones sangrientas" (Rosario 1950), y colaboró en el libro de fra
Blaz Stefanic "Comunismo sin máscara".
Como escultor, Ilija Juric realizó sus trabajos en
piedra y en madera. En varias ciudades argentinas se encuentran sus esculturas
como por ejemplo la estatua del escritor José Hernández y el monumento al
trabajador patagónico en Comodoro Rivadavia.
Al cardenal croata Dr. Franjo Kuharic le regaló su
trabajo "San Jerónimo con el león". También realizó bustos de
conocidos políticos croatas.
Ilija Juric murió en la ciudad de Córdoba el 28 de
febrero de 1991, donde fue sepultado. Dejó a su viuda Katica Suic-Juric y a sus
hijos Jadranka, Marija, Franjo y Rosalina.
Ljeposlav
Perinic